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¿Quién teme a la calculadora? Su uso divide a parte del profesorado de Matemáticas

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Hace unas semanas, Castilla-La Mancha anunciaba la prohibición del uso de ciertas calculadoras en la prueba de acceso a la universidad: gráficas y de cálculo simbólico. Era la última comunidad autónoma que las permitía en todo el Estado. Desde la Federación Española de Profesores de Matemáticas insisten en la necesidad de permitirlas, así como de renovar la EBAU para que sea más competencial.

Cada cierto tiempo vuelve a saltar a la palestra la discusión sobre si ciertas calculadoras pueden y deben utilizarse en las clases y, sobre todo, en los exámenes de Matemáticas en los cursos superiores. En el horizonte, como siempre, la prueba de acceso a la universidad, la EBAU. Su ejemplo empuja buena parte de las prácticas que se producen a lo largo de la secundaria, obligatoria y postobligatoria.

Hasta ahora, todas las autonomías prohibían el uso de determinadas calculadoras en la EBAU, como las gráficas o las que permiten el cálculo simbólico, salvo Castilla-La Mancha. Desde hace ya meses, como confirman diferentes fuentes, se sabía que esta galia acabaría cediendo y, finalmente, lo hizo hace unas semanas, según fuentes de la FESPM (Federación Española de Sociedades de Profesores de Matemáticas). Es complicado saber dónde, cómo y con qué criterios se toma la decisión de aceptar o no el uso de estos dispositivos en esta prueba.

Lluis Bonet es docente secundaria en Alicante. Trabajó hace algún tiempo en las propuestas para la modificación del modelo de prueba de acceso a la universidad de tal manera que se acercara al competencial propuesto por la Lomloe. Él lo tiene claro, las cosas deben cambiar en esta prueba, de arriba abajo, para que la calculadora tenga cabida.

Desde su punto de vista es una herramienta, como lo es también GeoGebra, y el alumnado debe aprender a utilizarla correctamente. Más allá de eso, es firme defensor de que se utilice incluso en exámenes como la EBAU, puesto que, cree, lo importante es que el alumnado tenga el conocimiento. La calculadora solo debería ser un instrumento para hacer cálculos complejos de manera rápida y sencilla.

“El problema está cuando sustituyen la labor del alumno”, sostiene, por contra, José Rodolfo Das. A este docente de Matemáticas en Valencia, le preocupa más que lo que pase en la EBAU, lo que pasa en las clases previas, a lo largo del bachillerato. Para él, “hay centros y profesores que le dan a la calculadora protagonismo en sí misma”, cuando solo deberían estar para la “realización de tareas rutinarias para centrarnos en el procedimiento”.

Desde la Federación Española de Profesores de Matemáticas elaboraron, ya hace un lustro, un informe sobre el uso de estos dispositivos en el bachillerato y la EBAU, así como un breve análisis de la situación en otros países más o menos cercanos.

Razones para una restricción anunciada

Este es el quid de la cuestión, parece, para la prohibición del uso de ciertas calculadoras en la prueba de acceso a la universidad. Para Das es una buena noticia que se haya igualado la normativa, al menos en parte, en todas las comunidades autónomas, en referencia a la prohibición del uso de ciertos dispositivos en la EBAU.

Hasta fechas recientes, Castilla-La Mancha era la única comunidad autónoma que permitía cualquier tipo de calculadora en las pruebas de acceso a la universidad, entre ellas, las gráficas y las que pueden realizar cálculo simbólico, es decir, las que pueden trabajar con incógnitas, no solo con números. Estas, al igual que las programables (en las que es posible introducir documentos de texto) “darían una ventaja enorme”, asegura Das.

Para Serapio García, profesor jubilado de Matemáticas de aquella comunidad y en su día presidente de la Asociación de profesores de matemáticas castellano-manchegos, la situación se ha debido a presiones de otros departamentos diferentes a los de matemáticas y han tenido que ver con la posibilidad de que en las calculadoras gráficas y de cálculo simbólico el estudiantado pueda meter chuletas para copiar en las pruebas. “Pero las calculadoras se pueden poner en modo examen”, sostiene.

Además de este motivo está el de la homologación de las pruebas de esta comunidad con el resto del país, en donde, a pesar de haber diferencias, tampoco están permitidas las calculadoras gráficas ni de cálculo simbólico. Explica García que en territorios como Andalucía, Cantabria, Galicia, Comunidad valenciana, Cataluña, Baleares o Canarias se permiten calculadoras científicas de última generación (que permiten realizar derivadas, ecuaciones y matrices), mientras que, por ejemplo en Madrid, tan solo pueden usarse las científicas más básicas.

Más allá de que Das no esté de acuerdo con el uso de este tipo de herramientas en los exámenes, es de la opinión de que no son esencialmente necesarias en las matemáticas de secundaria o bachillerato. “De hecho, no suelo utilizarla”, asegura. Dice que con la manera en la que él explica su materia, no hace necesario su uso, y que, además, se ha encontrado con que el alumnado “es muy inseguro a la hora de hacer cuentas”.

Saber pensar, para este docente, es la parte importante, no tanto el uso de la herramientas. Coinciden con él todos los profesores consultados, pero con matices. Para Bonet es importante que se usen calculadoras. Más allá de que en la Ley se hable de la necesidad de que el alumnado sea capaz de usar nuevas tecnologías en esta asignatura, este docente señala que la prohibición de las calculadoras en la EBAU responde a “que el profesor tenga la excusa de no hacer uso de esas herramientas en el aula, como herramientas didácticas”.

Para Bonet, las calculadoras sirven para mejorar el proceso de enseñanza-aprendizaje y tienen un impacto positivo en el alumnado hacia la materia. Para él, las calculadoras, como GeoGebra, sirven para que el alumnado “aprenda más y mejor y comprenda los conceptos matemáticos muchas veces abstractos y complejos”.

A esto se suma que tanto Bonet como García señalan que el currículo de bachillerato incluye, entre los aprendizajes necesarios, el de las tecnologías y la competencia digital, donde encajan perfectamente el uso de las calculadoras (así como su evaluación en la EBAU).

De hecho, García hace hincapié en que la prueba de acceso a la universidad se llama Evaluación del Bachillerato para el Acceso a la Universidad, señalando que, efectivamente, las pruebas deben tener como referente el currículo de esa etapa postobligatoria, pero secundaria.

Pensamiento crítico

Estos dispositivos pueden empujar hacia una nueva manera de enseñar las matemáticas y de evaluarlas, para que no sean solo vistas como “la ejecución de algoritmos, de ejercicios repetitivos, la memorización”, afirma Bonet, quien aclara que “no digo que no haya que trabajar estos aspectos, que lo hacemos”.

José Rodrigo Das insiste en que las prohibiciones de ciertos utensilios tienen más que ver con lenguaje algebraico que con el numérico. “Que yo no haga una cuenta, no es un problema”, sí lo es cuando se trata de una derivada, por ejemplo: “Yo examino al chaval de si sabe hacerla o no”. Es verdad, asume, que este tipo de cálculos puede hacerlos un ordenador, “pero se pretende que el alumno sea crítico y sepa hacerlo”.

Y para Das, el problema de la calculadora es “la actitud acrítica al resultado” que tiene el alumnado. “Si la calculadora dice una cosa, será esa cosa”. De esta manera, si se permitiese, a su entender, el uso de las calculadoras de cálculo simbólico “sería un destrozo: lo copio, aunque no entiendo nada”, sostiene. Por eso le parece bien la igualación de todas las pruebas de acceso.

Das se muestra muy crítico con la legislación vigente (“estamos en una época de engaño al alumno”, dice) puesto que es cada vez más laxa en cuanto a la evaluación. “No se exige que el alumno sepa multiplicar, sino que sea capaz de establecer una estrategia para resolver problemas”, asegura y lo ejemplifica: “Si tienes 15 caramelos para 3 personas deberías ser capaz de hacer la división. Pero se puntuaría bien que se repartieran los caramelos uno a uno para, al final, ver cuántos les tocan a cada uno”.

Lluis Bonet entiende que para mejorar la didáctica de la materia, además de usar dispositivos, hay que generar situaciones “más realistas”, que obliguen al alumnado “a reflexionar, investigar, a ver si el problema puedo trocearlo, intentar interpretar y comprobar los resultados, analizarlos, ser crítico, dar una respuesta argumentada, reflexionada… todo eso forma parte de las matemáticas”.

“Esto requiere un esfuerzo por parte del profesorado”, afirma, también para las personas que hacen las pruebas de acceso a la universidad. “Y no sé si realmente, se quiere realizar ese esfuerzo”, asegura. En opinión de este docente, decisiones como la que se ha tomado en Castilla-La Macha suponen un problema a la innovación educativa que se realiza en muchas clases de matemáticas que hablan de un “inmovilismo total”.

Según cuenta Serapio García “la calculadora es máquina tonta, no sabe qué hacer, tienes que decírselo tú y esto enseña”. Para ello hay que hacer un análisis de las operaciones que deben realizarse, en qué orden hay que realizarlas y, finalmente, llevar a cabo una evaluación del resultado obtenido.

Eso sí, en su opinión, “en manos de un profesor experimentado y con una finalidad clara, (la calculadora) hace que el aprendizaje sea significativo”.

Las diferencias, finalmente, parecen irreconciliables, a pesar de que que quienes sostienen los pros y los contras del uso de las calculadoras coinciden en la necesidad de que el alumnado aprenda a ser crítico y venza las dificultades del pensamiento más abstracto al que debe empezar a enfrentarse ya desde los primeros años de la secundaria obligatoria.

Fuente e Imagen: https://eldiariodelaeducacion.com/2023/11/28/quien-teme-a-la-calculadora-su-uso-divide-a-parte-del-profesorado-de-matematicas/

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China: Universidades de Beijing inician construcción de campus en Nueva Área de Xiong’an

Asia/China/01-12-2023/Autoría y Fuente: spanish.xinhuanet.com

Un primer grupo de universidades con sede en Beijing dieron inicio hoy martes a la construcción de sus respectivos campus en la Nueva Área de Xiong’an, en la vecina provincia de Hebei.

Las cuatro universidades, a saber, la Universidad Jiaotong de Beijing, la Universidad de Ciencia y Tecnología de Beijing, la Universidad Forestal de Beijing y la Universidad de Geociencias de China (Beijing), dependen directamente del Ministerio de Educación.

Se espera que los campus de Xiong’an contribuyan al papel de la Nueva Área de Xiong’an como próspero centro de innovación y emprendimiento en la nueva era.

China anunció en abril de 2017 un plan para establecer la Nueva Área de Xiong’an, situada a unos 100 kilómetros de Beijing.

La nueva área se ha concebido como un importante receptor de funciones que Beijing dejará de cumplir al no ser esenciales para su papel como capital nacional y como un laboratorio para explorar un nuevo modelo de desarrollo de zonas densamente pobladas.

Fuente: https://spanish.xinhuanet.com/20231128/4aa3c81017a64a35811f1fe6a05f84b7/c.html

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Uruguay: ANEP inicia transformación curricular de la Educación Media Superior

Este miércoles 15, se realizó en Montevideo el seminario internacional Nuevos Caminos para la Educación Media Superior en Uruguay, organizado por la Administración Nacional de Educación Pública (ANEP) con el apoyo del Banco Interamericano de Desarrollo (BID). En la oportunidad, se conoció el plan para dicha etapa educativa, que se implementará a partir de 2024 con la instalación del nuevo diseño curricular para primer grado.

El acto de apertura incluyó la participación del presidente interino de la ANEP, Juan Gabito Zóboli, la consejera Dora Graziano y el representante del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) en Uruguay, Luiz Ros.

El objetivo del encuentro, que convoca a expertos de la región, es analizar el último tramo de transformación curricular de la educación pública uruguaya, así como recabar la opinión y el aporte de los participantes respecto al abordaje de procesos similares en otros países, según explicó el presidente interino de la ANEP.

Asimismo, Zóboli aseguró que esta serie de cambios cierra un ciclo de transformaciones que estaban contempladas en los lineamientos estratégicos presentados en 2020.

Por su parte, durante la apertura del evento, la consejera Graziano sostuvo que “es necesario” que la educación sea una “verdadera herramienta” de superación personal, progreso social y desarrollo integral del país, para lo que es preciso «ser sincrónico a los tiempos que corren», y realizar cambios con «mirada prospectiva».

El nuevo plan para la Educación Media Superior, que comenzará a implementarse en marzo de 2024 en el primer grado, establece la posibilidad de cambiar entre educación secundaria y educación técnico profesional, y asegurar la continuidad educativa del alumnado.

Por otra parte, para los estudiantes de 1.º y 2.º grado habrá materias electivas, entre las que se encuentran Conciencia Corporal y Arte; Educación en Patrimonio; Territorio, Ambiente y Sociedad y Emprendedurismo.

Dentro de la estructura de Educación Secundaria, el primer año será de carácter general, con un componente de exploración. En tanto que el segundo contará con tres opciones: Ciencia y Tecnología; Ciencias Sociales y Humanidades, y Creativo Artístico.  El tercer año se compondrá de cinco opciones de especialización a las que cualquier estudiante podrá acceder sin perjuicio de la elección realizada el año anterior. El último año de Educación Secundaria se estructura en: Ciencias y Tecnología, Ciencias de la Vida, Ciencias Sociales y Humanidades, Creativo Artístico, y General.

De forma complementaria, el plan prevé la creación de un espacio de orientación y acompañamiento vocacional para los estudiantes.

Con esta serie de cambios e incorporaciones, ANEP pretende brindar mayores oportunidades de exploración a los estudiantes durante el proceso formativo, a la vez que establecer una autonomía curricular complementada por el acompañamiento en el trazado del proyecto de vida de los jóvenes.

https://www.gub.uy/presidencia/comunicacion/noticias/anep-inicia-transformacion-curricular-educacion-media-superior

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Leonardo Durán Vivas: La IA y su impacto en las universidades

Hay que tener muy en cuenta que gracias a la IA hoy existen más formas de hacer seguimiento y contenido didáctico que permiten cerrar las brechas conceptuales identificadas en los jóvenes y estudiantes

 

La inteligencia artificial (IA) es una de las mayores tendencias tecnológicas en el mundo, es el tercer término más buscado hoy en Google y es la mayor revolución tech este año en el planeta.

 

Su impacto en todas las industrias y sectores es indiscutible y la academia no es la excepción. Esta herramienta ha permeado a todas las universidades del país y la manera de hacer las clases o de evaluar a los estudiantes. Asimismo, hoy representa un gran desafío para las Instituciones de Educación Superior (IES), ya que promete revolucionar la forma como tradicionalmente aprenden los alumnos. Ante estos cambios hay dos caminos; uno, asustarse y salir corriendo, es decir, desconocer el avance de la IA y querer tapar el sol con una sola mano; o prepararse para aprender continuamente de esta herramienta con el propósito de saber utilizarla. Usted elige.

 

Si la decisión gira en torno a empoderarse de esta solución tecnológica para que no lo coja desprevenido, como dicen por ahí, “con los pantalones abajo”, entonces es mejor que vaya conociendo los modelos generativos de IA como GPT o Bard, los cuales están a un clic de distancia para los estudiantes. Esta herramienta, para muchas personas conocida como un robot automatizado, busca dar la mejor respuesta en el menor tiempo posible. En otras palabras, Chat GPT está retando a los profesores y docentes a apropiarse de la inteligencia artificial y a conocer todas sus ventajas para modernizar su pedagogía y didáctica con el fin de no quedarse atrás.

 

Al mismo tiempo, tenga en cuenta que gracias a la IA hoy existen más formas de hacer seguimiento y contenido didáctico que permiten cerrar brechas conceptuales identificadas en los jóvenes. Es decir, que ayudan a los estudiantes aprender a más rápido y fácilmente. Estos avances, que para muchos generan temor, para otros se han convertido en una oportunidad de repensar la forma en que se dinamizan las clases hoy en las universidades, abriendo múltiples formas de aprender para las comunidades académicas. Ahora, si usted es de los que piensa que la inteligencia artificial es solo para los que dictan clase o estudian carreras Tech, está muy equivocado, pues la IA no solo es un tema que se está integrando en programas de ingeniería, sino que también está siendo incluido en las materias de pregrados de humanidades, ciencias sociales o ciencias económicas y administrativas. Sin embargo, es importante aclarar que la influencia de esta herramienta en los pénsum académicos se está dando de manera gradual, pues lo que finalmente se busca es responder a las necesidades de la industria y del mercado laboral con conocimientos y competencias en tecnología que estén a la vanguardia y los cuales se pueden enseñar desde la academia.

 

¿Y qué decir de la evaluación y cómo la IA está impactando este proceso? Acá sin duda hay un enorme potencial de la inteligencia artificial, pues su implementación está facilitando que los procesos para calificar a los alumnos sean más dinámicos, precisos, imparciales y, sobre todo, personalizados. Por ejemplo, actualmente algunas universidades del país están implementando análisis predictivos para identificar a aquellos estudiantes que están en riesgo de deserción, lo que permite a los profesores intervenir de manera anticipada. Eso sin contar que ya se están desarrollando recursos didácticos que facilitan la gamificación, la detección del plagio, las retroalimentaciones instantáneas y la generación de evaluaciones personalizadas, entre otros avances que, poco a poco, se están incorporando a los nuevos métodos evaluativos gracias a la IA.

 

Fuente: https://www.larepublica.co/internet-economy/la-ia-y-su-impacto-en-las-universidades-3738114

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Ecuador: El 19 de septiembre Senescyt arranca las pruebas de ingreso a universidades públicas

América del Sur/Ecuador/15-09-2023/Fuente y Autoría: www.lahora.com.ec

Las pruebas de ingreso a la universidad la rinden quienes se hayan inscrito entre el 31 de julio y el 4 de agosto de 2023

El 19 de septiembre de 2023 se realizarán las pruebas de ingreso a las universidades e institutos públicos con proceso asistido, así lo informó la La Secretaría de Educación Superior, Ciencia, Tecnología e Innovación (Senescyt).

Las pruebas de ingreso a la universidad la rinden quienes se hayan inscrito entre el 31 de julio y el 4 de agosto de 2023.

La evaluación se realizará en tres sesiones: de 08:00 a 10:00, de 11:00 a 13:00 y de 14:00 a 16:00.

Desde el 11 de septiembre de 2023, en la web de la Senescyt se habilitará una opción para saber dónde se rinde la evaluación.

Para los aspirantes que  solicitaron dar la prueba en su domicilio, podrán revisar la web los horarios.

DATO:

La prueba tiene 160 preguntas sobre: numérica verbal, racionamiento lógico, atención y concentración.

DATO:

Si por algún motivo justificado o de fuerza mayor el aspirante no puede rendir su evaluación, habrá una opción para la reprogramación de la prueba.

Fuente e Imagen: https://www.lahora.com.ec/pais/universidad-examen-ingreso-senescyt/

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El normalismo rural en México: El rio revuelto de las discordias

Publicado en educacionfutura.org

Alejandro Moreno Lozano

Desde su nacimiento, Las normales rurales se han caracterizado por ser instituciones escolares que preparaban a profesores que enseñarían la lectura y la escritura, matemáticas, comportamiento social adecuado para la época en los lugares de mayor consentración poblacional. Está lógica se rompe con el fín del régimen de Porfírio Díaz en 1911, Para adquirir un sesgo mas rural.

En los años posteriores a la Revolución, la educación rural fue una preocupación constante para los nuevos grupos gobernantes, no sólo porque México era un país predominantemente rural, sino porque una cantidad significativa de los habitantes apenas se imaginaban parte de una entidad política llamada México. Como es el caso de toda nación, el Sistema Educativo Mexicano de ese tiempo, estaba íntimamente ligado a la necesidad de forjar patria. Así mismo, el origen agrario de la Revolución Mexicana exigía una reforma íntegra y las escuelas rurales serían instrumentos fundamentales dentro de este proceso. Los profesores mismos debían ser líderes en las comunidades y sus lecciones harían posible la transformación que el nuevo Estado decía llevar a cabo. De esta forma los profesores serían el vínculo concreto entre los ideales abstractos del nuevo proyecto nacional y los beneficios materiales, como el acceso a la tierra.

La orientación socialista que tuvo en la década de los treinta la educación, permaneció con fuerza en el Sistema Educativo Mexicano. Aunque su significado era siempre ambiguo, mientras que para unos esta orientación significaba socializar los medios de producción, para otros representaba simplemente una lucha contra el alcoholismo, la superstición y el “fanatismo religioso”. Con su “socialismo a la mexicana”, el presidente Lázaro Cárdenas (1934-1940) desde su campaña presidencial había delimitado el perfil del maestro de la educación socialista: se concibe al maestro como revolucionario, líder social, consejero, orientador, que no solo se aboca a enseñar a leer y a escribir, sino muestra también la manera de convivir mejor, de crear una existencia más humana y justa.

Aunque en la práctica la educación socialista fue siempre problemática, su apoyo por parte del Estado abrió un importante espacio para la transformación social. José Santos Valdés, profesor, inspector de normales rurales y pedagogo, se mostró inicialmente escéptico a la educación socialista. Al parecer sabía que era una contradicción introducir una educación socialista en un país de propiedad privada. Sin embargo, en la contradicción se vislumbraba una amplia oportunidad para la creación de la necesaria conciencia de clase en las niñas, niños y jóvenes de esa época, quienes serían los propiciadores del cambio revolucionario. Así lo comprendió la burguesía y de allí su ruda oposición. Ciertamente, la oposición se hizo sentir de forma virulenta. Auspiciados por hacendados y por la Iglesia, los Cristeros se dedicaron a quemar escuelas, a asesinar y desorejar maestros, y a violar maestras .

Cuando el Estado logró derrotar a este movimiento religioso, los grandes terratenientes siguieron activos en la persecución de profesores y el clero no desdeñaba oportunidad para hablar mal de ellos. Ser maestro significaba enfrentar no sólo el aislamiento y las dificultades de habitar tierras lejanas, sino exponerse a la violencia de los que defendían el antiguo orden. De allí la imagen del maestro que cargaba el libro en un brazo y el rifle en el otro, un heroísmo celebrado tanto en círculos populares como en oficiales, y que muestra el papel tan importante que ocupa el maestro rural en la historia contemporánea.

Forjar patria era una de las primeras preocupaciones de los arquitectos del Sistema Educativo Mexicano. Moisés Sáenz, subsecretario de Educación de 1924 a 1933, afirmó que los dos propósitos trascendentales de la educación rural fue la incorporación de [la] gran masa indígena a la familia mexicana; [y] la formación del espíritu rural. Sin considerar el conocimiento que la población rural había acumulado tras siglos de vivir de la tierra (o simplemente caracterizándose como retrógrada), el gobierno revolucionario se propuso instruir a las comunidades en los mejores métodos para cultivar la tierra.

Pero este esquema pronto dio lugar a varias contradicciones. Por un lado, la efervescencia del nuevo orden revolucionario creó un ambiente propicio para la experimentación con las más recientes teorías pedagógicas. La filosofía de John Dewey, por ejemplo, tuvo especial resonancia en México. Moisés Sáenz, que estudió con él en la Universidad de Columbia, se dedicó a propagar sus ideas. En 1923 la SEP decretó que todas las escuelas debían ser “escuelas de acción” conforme a la filosofía expuesta por Dewey, en la que el niño aprende haciendo. En ningún lugar parecía encajar mejor esta teoría que en la escuela rural, donde el mismo campo abierto sería el salón de clase. La naturaleza proveería la base para construir una nueva realidad. Dewey mismo, quien en 1926 impartió una serie de conferencias en México, resaltó las posibilidades que daba el momento en que se encontraba México. “Creo ocioso decir que ustedes, aquí en México –dijo en su primer seminario– están pasando por una época tan crítica que, si su sistema de escuela ha de estar en armonía con lo que exige la vida social, debe perseguir un ideal de creación y transformación social, más bien que la simple reproducción del pasado”.

El énfasis que ponía Dewey en la necesidad de integrar la escuela con la comunidad, era otro elemento natural de las escuelas rurales cuyos maestros serían no sólo educadores, sino líderes sociales. Ningún sistema educativo en el mundo –observaría Dewey–, demuestra mejor el espíritu de íntima unión entre actividades escolares y aquellos de la comunidad .

La escena que se vislumbraba del profesor rural era de un único maestro, en una pequeña escuelita con piso de tierra, sin materiales, con mesitas precarias y con un montón de chiquillos de todas las edades que tiene que organizar por lo menos, enseñarles a leer y escribir. Maestros que muchas veces se quedan a dormir en la propia escuela y que tardan horas para llegar a las cabeceras municipales a cobrar raquíticos salarios.

Fuente e Imagen: https://www.educacionfutura.org/el-normalismo-rural-en-mexico-el-rio-revuelto-de-las-discordias/

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México: Otorgan concesión a Radio Universidad Pueblo, en Guerrero

América del Norte/México:/08-09-2023/Autoría: Sergio Ocampo Arista/Fuente: www.jornada.com.mx

Chilpancingo, Gro. El rector de la Universidad Autónoma de Guerrero, José Alfredo Romero Olea, informó que el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFETEL) otorgó la concesión de uso público y a partir de este lunes, para que Radio Universidad pase a ser legalmente Radio Universidad Pueblo.

La concesión fue otorgada luego de 40 años de lucha. La concesión fue dada a conocer por la Universidad Autónoma en un comunicado, en el que se informó que el IFETEL otorgó a Radio Universidad la concesión, con lo que la radiodifusora universitaria operará con las siglas XHCPEV-FM y en el 101.9 del cuadrante para seguir dando voz a los universitarios y a la sociedad.

También señaló que «esta estación cuenta con seguridad jurídica y certeza legal. Con este hecho, la estación de la máxima casa de estudios tiene ahora seguridad jurídica y certeza legal, por lo que la radio seguirá siendo un espacio democrático donde todos pueden ejercer la libertad de expresión».

En tanto, el director de Radio Universidad Pueblo, Víctor Wences Martínez aseguró que la concesión es el resultado de una lucha histórica de parte de universitarios, los radioescuchas, y todos los sectores que han apoyado y creído en el proyecto de comunicación popular».

Recordó que la lucha por la «legalización», de la emisora viene prácticamente desde que salió al aire el 4 de mayo de 1982, durante el periodo de rector de José Enrique González Ruiz.

Incluso mencionó que en los años 1985-1987 la radio cerró sus puertas por presiones del entonces secretario de Educación Pública, Jesús Reyes Heroles condicionó a la Universidad el pago de salarios a cambio del cierre de la emisora.

Fuente e Imagen: https://www.jornada.com.mx/notas/2023/09/04/estados/otorgan-concesion-a-radio-universidad-pueblo-en-guerrero/

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