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La fusión Bayer Monsanto y el efecto dominó que amenaza la alimentación mundial

Por: Miguel Jara

Bayer ha comprado Monsanto. La Comisión Europea ha dado el visto bueno a la mayor fusión de empresas agrícolas, de transgénicos, pesticidas y semillas. Bayer compra Monsanto por 66.000 millones de dólares (53.800 millones de euros al cambio actual). Para ello la compañía alemana ha de vender parte de su negocio agroquímico aunque esas divisiones ya tienen comprador, Basf, que dará 5.900 millones de euros por ello.

Hay quien, como el eurodiputado ecologista Ernest Urtasun, del grupo de Los Verdes ha sido muy concreto en su opinión:

«Además de veneno, Bayer nos venderá los remedios” (…) La agroindustria ya está demasiado concentrada, unas pocas empresas dominan completamente la producción de alimentos. Fusionar dos de los actores más importantes y con mayor cuota de mercado solo empeora la situación”.

Se refiere Urtasun a que Bayer controla buena parte de la cadena: semillas para sembrar comida; fertilizantes, herbicidas y demás “fitosanitarios” para su cultivo; y medicamentos para tratar las posibles consecuencias que tiene para nuestra salud el modelo alimentario basado en tóxicos.

Aceptar esta fusión en Bruselas y Washington (que se entiende que lo hará en breve) significará la consolidación de la última de las tres mega fusiones de la industria de semillas y pesticidas que han estado en juego desde 2015.

Mientras que al iniciarse el frenesí de las fusiones seis compañías globales controlaban aproximadamente dos terceras partes del mercado global de semillas y más del 70% del de pesticidas, ahora quedarán solamente cuatro compañías en ámbito de semillas y pesticidas: Bayer-Monsanto, que dominará; le siguen Corteva Agriscience (una nueva empresa derivada, resultado de la fusión del año pasado entre Dow y DuPont); la empresa resultado de la fusión anterior entre Syngenta (con sede en Suiza) y ChemChina (la ambiciosa compañía química asiática que se espera se fusione muy pronto con la aún más grande Sinochem); y finalmente la cuarta jugadora en el campo será BASF, la gigante alemana que ahora será más fuerte gracias a la parte de semillas de Bayer.

Como cuentan los persistentes investigadores del Grupo ETC:

«Los negocios de datos masivos (big data): El núcleo de todas las megafusiones ha sido lograr el control de los datos masivos (big data) sobre agricultura. El manejo de datos masivos está detrás de las nuevas tecnologías de ‘ADN digital’, que incluyen a la biología sintética [o cómo comerciar con el código genético de los organismos vivos] y la edición genómica y que están transformando la investigación agrícola y las llamadas plataformas de ‘agricultura de precisión’”.

La rama de capital de riesgo de Monsanto anunció ayer que invertiría 25 millones de dólares en una nueva compañía de edición genética de cultivos (Pairwise Plants) y puso como presidente al vicepresidente de operaciones globales de biotecnología de la propia Monsanto. Con las plantas editadas genéticamente las empresas de semillas intentan esquivar el estigma de los transgénicos.

Los Organismos Modificados Genéticamente (OMG) del “pasado” incluyen ADN externo de otras plantas o bacterias. Pero las nuevas técnicas de edición genética tratan de introducir cambios en los genes sin “ayuda externa”. Un ejemplo que se hace con la soja: se hacen cambios en dos genes implicados en la síntesis de ácidos grasos, para que el aceite prensado de la soja sea más parecido al aceite de oliva que al típico aceite de soja.

Otro de los aspectos que está pasando por alto según apuntan los de ETC es que las oficinas antimonopolio no han vigilado la creciente dominación de Bayer-Monsanto sobre los microbios agrícolas, tan necesarios para la correcta fertilización de los cultivos. En los últimos años, las dos compañías han hecho negocios con antiguas empresas de enzimas como Novozyme de Dinamarca (la compañía de venta de enzimas sintéticas más grande del mundo ) y con nuevas empresas en el ramo, como Ginko Bioworks, Silicon Valley (que utiliza biología sintética y técnicas de edición genética para alterar el ADN de microbios).

En esencia, lo que está (o mejor escrito, sigue) en juego es la situación de monopolio en la que están estas empresas, de las que dependen buena parte de la alimentación mundial. Hay que considerar también el efecto dominó de las megafusiones del agronegocio. El potencial monopolio de los insumos microbianos apunta a otra importante cuestión que las autoridades antimonopolios raramente consideran: ¿Crearán esas fusiones un efecto dominó en el sector de insumos agrícolas?

La investigación de Bayer y Monsanto sobre insumos microbianos amenaza directamente a la industria de los fertilizantes”, explica Jim Thomas, del citado grupo de investigadores ambientalistas. “Si los microbios fijadores de nitrógeno y micronutrientes son usados para revestir las semillas o se inyectan junto con la semilla en el momento de plantarla, será una competencia directa a las compañías que venden fertilizantes”.

De hecho, en este enloquecido panorama en el que las empresas se funden para ser más fuertes y obtener mayores beneficios, sortear la competencia e imponer sus criterios globales, la segunda y la cuarta empresas de fertilizantes más grandes del mundo se fusionaron a principios de enero para formar Nutrient, hoy la número 1.

La empresa número 2 de fertilizantes en el mundo, Yara (de Noruega) también está entrando en el ámbito de la investigación de insumos microbianos y lo mismo la compañía que ocupa ahora el cuarto lugar, Mosaic.

Ese efecto dominó también afecta a las compañías de maquinaria agrícola más grandes del mundo, que ya controlan casi la mitad del mercado global: las cuatro megaempresas de semillas y pesticidas que ahora quedan tras la fusión de Bayer y Monsanto serán objetivo de compañías sumamente ricas como Deere, ACGO, CNH y Kubota.

La merienda de lobos mundial está servida (con perdón de los lobos). Los negocios agrícolas (y sus negociantes) han ido fundiéndose desde 1977 y las actuales megafusiones son la prueba de que los gobiernos no han sabido manejar el tema en función del interés público. Por eso, la alternativa es negociar un Tratado sobre Competencia en Naciones Unidas, que quizá sea la única autoridad mundial capaz de mediar en el asunto pues es la alimentación de todo el planeta la que está en juego.

Fuente: http://www.migueljara.com/2018/03/22/la-fusion-bayer-monsanto-y-el-efecto-domino-que-amenaza-la-alimentacion-mundial/

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Virus del Papiloma Humano: La vacuna del márketing del miedo

Por: Miguel jara 

La vacuna contra el Virus del Papiloma Humano (VPH) comenzó hace meses su «traviesa» travesía por el sistema inmunológico de millones de niñas sanas en todo el mundo. En España, algunas comunidades autónomas se adelantaron al resto pero ya las demás están impulsándola. Y escribo impulsándola porque lo que más llama la atención es el celo con el que las administraciones públicas están promocionando Gardasil (Merck) y Cervarix (GlaxoSmithKline -GSK-), una de las mayores operaciones de márketing del miedo de la Historia desarrollada por dos de las mayores multinacionales farmacéuticas del globo terráqueo. Es difícil entender cómo un producto farmacológico que presenta tantas dudas e incógnitas como esta vacuna esté aplicándose a niñas de entre 11 y 14 años de edad para «prevenir» el cáncer de cuello de útero o cérvix.

Antes de entrar en detalles sobre cómo están consiguiendo Merck y GSK este éxito de ventas conviene recordar brevemente algunos de los puntos más discutibles del fármaco. Aunque parezca lo contrario, si nos atenemos a lo que está pregonándose, en España no hay epidemia de cáncer de cérvix. La infección del VPH es condición necesaria pero no suficiente para adquirir el cáncer de cérvix y además, en el 90% de los casos, la infección remite de manera espontánea. La mortalidad por este tipo de cáncer es baja con respecto a los más corrientes y se produce en torno a los 60 años de edad en personas que no solían hacerse revisiones. Su eficacia no se ha estudiado en niñas, sólo en adultas. No protege de todas las cepas cancerígenas del VPH, es preventiva pero no cura. Su precio es muy caro, más de 300 euros las tres dosis -en algunas comunidades 500-.

Por si fuera poco, como ha reportado la publicación Discovery DSalud en su nº109, en Estados Unidos han fallecido 18 niñas tras ser vacunadas y más de 18.000 han sufrido «efectos adversos». Y es que bajo la presión del márketing del miedo, del terror a enfermar, están realizándose estos negocios basados en el interés de ciertas farmacéuticas por expandir una «cultura de la prevención» basada en productos farmacológicos. Consumir medicamentos sin estar enfermo. ¿Pero cómo están consiguiendo estas poderosas compañías que los gobiernos acepten su estrategia comercial e incluso implanten de manera obligatoria en la población esta vacuna que comenzó -y en España sigue siendo- de administración voluntaria? A comienzos de febrero de 2007 el Estado norteamericano de Texas fue el primero en declarar obligatoria la vacunación con Gardasil en niñas de 11 y 12 años. La decisión fue adoptada por el gobernador del Estado, Rick Perry. Resulta que Mike Toomey, el anterior jefe de Gabinete del gobernador Perry, trabaja en tareas de lobby para Merck, fabricante de Gardasil. El Washington Post publicó un reportaje de Associated Press (AP) que afirmaba que la jefa de Gabinete del gobernador, Deirdre Delisi, celebró con el director de Asuntos Presupuestarios y tres miembros de su departamento, una «Reunión sobre la Vacuna del VPH para Niños», según consta en la agenda de Delisi, a la que AP tuvo acceso. Ese mismo día, el comité de acción política de Merck donó 5.000 dólares para la campaña de Rick Perry.

En Canadá, el lobby de Merck se desarrolló a través de Ken Boessenkool, empleado de Hill and Knowlton, una compañía de relaciones públicas. Boessenkool fue asesor del primer Ministro de Canadá, Stephen Harper, cuando era líder de la oposición. Además, Jason Grier, ayudante ejecutivo del ministro de Salud de Ontario, George Smitherman, hizo lobby para que Merck consiguiera que Ontario se sumara a la vacunación de niñas. Las distintas administraciones están tomándose la vacunación contra el VPH casi como una «cuestión de Estado». El Gobierno catalán ha aprobado hace poco la «Resolución 301/VIII del Parlamento de Cataluña, sobre la orientación política general del Govern». En materia de salud el Parlamento insta al Gobierno a continuar facilitando el acceso de los ciudadanos a los servicios sanitarios «para reducir las desigualdades» y junto a necesidades sanitarias elementales, como la reducción de los tiempos de espera para ser operado o la ampliación de la cobertura sanitaria pública a más personas -o la asistencia a personas con fibromialgia o Síndrome de Fatiga Crónica-, se incluye el acceso a la vacuna contra el VPH.

Por lo que podemos saber gracias a enfermeras que trabajan en el sistema sanitario catalán, sus responsables están desarrollando un sistema de objetivos para las enfermeras de Primaria que una vez cumplidos conllevan una gratificación de 2.000 euros anuales. Entre ellos está la vacunación contra el VPH. Algunas enfermeras se niegan a cumplir los objetivos de Generalitat y están abriendo el debate sobre la falta de ética de los mismos en sus centros. Mientras, en otros lugares también ha comenzado a incluirse la vacuna en el calendario escolar. Así, el Gobierno extremeño ha adquirido 15.000 dosis a un precio de 1.560.000 euros. Entretanto, la publicidad agresiva de las compañías impulsoras de la vacuna continúa. Y en los centros de salud españoles los carteles promocionales llaman a la vacunación dándole a la misma un halo de obligatoriedad con promesas de una curación imposible: la absoluta mayoría de las vacunadas están sanas y la vacuna no elimina las células alteradas.

 Esta campaña de márketing va a dar mucho que hablar. Según Discovery DSaud ya se han presentado las primeras demandas contra los laboratorios. Y las oficinas de GSK en Holanda han sido investigadas por supuestas prácticas fraudulentas en la promoción de la vacuna contra el VPH. Se habla incluso de retirarla del mercado.

 Como alternativas para los padres y madres preocupados por la salud de sus hijas, numerosos profesionales sanitarios contrarios a la medicalización de la sociedad y en concreto de la infancia, proponen el acceso a citologías de cribado para las mujeres. Difundir información sobre sexualidad segura y crear centros para ello y talleres para evitar que procesos fisiológicos naturales sean convertidos en enfermedades y medicalizados. La medicina preventiva debería consistir en una buena higiene, un estilo de vida sano y en la honesta identificación de factores de riesgo para evitar la enfermedad o retrasar su aparición. Los objetivos de estas prácticas deberían de ser evitar en la medida de lo posible la aplicación de fármacos, que casi siempre conllevan efectos secundarios dañinos. La tendencia actual es que los laboratorios están aprovechando la cultura de la prevención para que ésta desemboque en la receta. Existen profesionales sanitarios que piden una moratoria en la expansión de esta vacuna.

Miguel Jara es escritor y periodista, especializado en la investigación y análisis de temas de salud y ecología. Su ultimo libro, escrito en colaboración con Rafael Carrasco y Joaquín Vidal es Conspiraciones tóxicas: Cómo atentan contra nuestra salud y el medio ambiente los grupos empresariales (Martínez Roca Ediciones, 2007). También es autor de Traficantes de salud: Cómo nos venden medicamentos peligrosos y juegan con la enfermedad, (Icaria Editorial, 2007).

http://migueljara.wordpress.com/

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El nuevo sistema de aprobación de fármacos en la UE es un peligro para la salud pública

Por: Miguel Jara

La industria farmacéutica europea está cerca de conseguir lo que tanto ha añorado, un sistema de aprobación de medicamentos a su medida: rápido y que no haga muchas preguntas. Para ello es esencial la concurrencia de la Agencia Europea de Medicamentos(EMA), que más que una agencia pública parece el brazo comercial de los laboratorios y va a propiciar este nuevo peligro para la salud pública.

Lo advierten en el Bristish Medical Journal (BMJ) varios investigadores y especialistas en salud pública, la industria farmacéutica está cerca de superar una de las últimas fronteras que la separan del mercado total, el proceso de aprobación de medicamentos que, si hasta ahora le beneficiaba, en breve puede estar aún más a su servicio.

Como cuento en el post ¿Está convirtiéndose la llamada medicina científica en una pseudociencia?, la clave por la que hoy encontramos en las farmacias medicamentos que son ineficaces y peligrosos es porque el sistema de investigación está protegido por el “secreto comercial”, en nombre del cual los laboratorios pueden no revelar datos fundamentales sobre sus productos.

Así no hay manera de conocer su eficacia y seguridad reales. Antes de ser aprobado en Europa, cada tratamiento ha de pasar por el control de la EMA. Ésta pide al laboratorio que desea que su fármaco sea vendido las pruebas de su eficacia y seguridad. Dichas pruebas han tenido que conseguirse mediante ensayos clínicos que hace el laboratorio.

El sistema, que nunca ha terminado de cuajar y para ello no hay más que ver la cantidad de medicamentos que se retiran del mercado por causar graves daños una vez estaban aprobados, siempre le ha parecido lento, engorroso y caro a la industria.

Un sistema más permisivo y rápido podría ofrecer más rentabilidad económica a la industria al no tener que gastar tanto dinero ni tiempo en documentar la eficacia y sobre todo la seguridad de los nuevos productos. Y es lo que ahora puede conseguir pues la EMA ha adoptado un nuevo modelo de regulación de medicamentos llamado “vías de adaptación”.

Para ello ha creado un grupo de reflexión financiado por la industria, NEWDIGS (siglas en inglés de nuevos paradigmas de desarrollo de fármacos) en el Instituto de Tecnológico de Massachusetts.

El modelo de las vías de adaptación significaría, según lo publicado en BMJ, omitir varios pasos diseñados para proteger a los pacientes de los medicamentos peligrosos e ineficaces, lo que permitiría ofrecer nuevos fármacos para las “necesidades médicas no cubiertas”. Los nuevos tratamientos pueden así ser comercializados más rápido, sobre la base de un menor número de datos que demuestren su calidad.

La EMA inició un proyecto piloto para probar el nuevo paradigma e informó de los resultados hace poco. Preocupados por la salud pública, los citados profesionales argumentan que no queda claro cómo se definirán esas necesidades no cubiertas. También advierten que la información esencial relacionada con el diseño y la fiabilidad de los estudios clínicos con los que generar las pruebas de seguridad de los medicamentos y su eficacia está ausente delinforme presentado por la Agencia para avalar su decisión.

Pese a ello la EMA considera un éxito su proyecto piloto e integrará las vías de adaptación en el marco regulador de fármacos de la UE ya existente.

Puede haber algunas circunstancias concretas que justifiquen el acceso rápido a los nuevos medicamentos sobre la base de un mínimo de datos, pero la realidad es que las agencias reguladoras han sido demasiado permisivas en su interpretación de los criterios existentes para la aprobación acelerada de fármacos.Vioxx artritis

Las normas reglamentarias actuales son ya demasiado laxas y no hay más que ver el número de medicamentos aprobados sin que aporten una verdadera utilidad terapéutica me too, yo también, fármacos que son copias de otros ya existentes para afirmar que el sistema hoy no inventiva una genuina innovación científica.

Los laboratorios, por lo general, están yendo a lo fácil a imitar los fármacos que les funciona desde el punto de vista económico.

En esencia, lo que quiere hacer la EMA es aprobar fármacos sobre la base de los datos preliminares.

Las empresas podrían, por ejemplo, probar medicamentos en grupos de pacientes muy seleccionados, pequeños, con ensayos clínicos hechos en un plazo corto de tiempo o hacer estudios de menor entidad.

Los laboratorios podrían incluso evitarse la denominada Fase III de los ensayos que puede involucrar múltiples médicos tratando cientos o incluso miles de pacientes (es lo deseable).

En esta fase, aparte de verificar la eficacia del medicamento, se busca determinar manifestaciones de toxicidad previamente no detectadas.

Otra idea es que se aprueben medicamentos que urge usar y luego ya se hagan estudios postcomercialización para saber su eficacia y seguridad real, lo que puede ser peor para los pacientes pues sin conocer bien la seguridad de un medicamento se pone en peligro su vida.

Así, fármacos con perfiles de beneficio-riesgo inciertos se pueden prescribir durante muchos años hasta que se tomen medidas, como ya ha ocurrido en muchos casos de retirada del mercado de fármacos especialmente nocivos (leed el ejemplo de la bedaquilina, aprobada mediante un procedimiento acelerado para el tratamiento de la tuberculosis).

Actos diabetes cáncer medicamento reacciones adversasO lo que sucede con la pioglitazona para la diabetes tipo II que fue aprobada por la EMA en 2000. Las pruebas preliminares indicaron que podría causar cáncer de vejiga.

Ahora, más de una docena de estudios de observación han llegado a conclusiones contradictorias y no pueden resolver definitivamente este problema de seguridad… pero el fármaco (cuya patente caducó) sigue comercializándose en muchos países europeos.

Los reguladores europeos están hoy bajo la presión de la industria farmacéutica para acelerar la aprobación de nuevos fármacos y ello conducirá a problemas de salud pública por daños de los tratamientos.

Fuente: http://www.migueljara.com/2016/08/23/el-nuevo-sistema-de-aprobacion-de-farmacos-en-la-ue-es-un-peligro-para-la-salud-publica/

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Electrosensibles: ¿Locos por la contaminación electromagnética?

Por: Miguel Jara

Se publicó hace unos días un artículo que ha ido un poco más allá en la negación del fenómeno de la llamada hipersensibilidad a los campos electromagnéticos. Se titula Electrosensibles: un trastorno psicológico que crece en el primer mundo y tacha poco menos que de “locas” a las personas que, en número cada vez mayor, se quejan de los impactos de la contaminación electromagnética en su salud.

Lo primero que me viene a la mente cuando leo cosas así es que menuda crueldad para con personas que no tienen suficiente con los daños que padecen como para que además se les“diagnostique” periodísticamente problemas mentales. Qué falta de empatía con los sufrientes porque en el post no aparece de ninguna manera su opinión, es decir, no se ha consultado a “las locas” que seguramente tengan algo que decir.

Se “juzgan” además sentencias judiciales que dan la razón a las personas “electrosensibles” y se hace todo en nombre de la “evidencia científica”, que faltan pruebas científicas vaya sobre la citada hipersensibilidad.

Por contra me parece sugerente y por cierto, muy bien escrito un post de José A. Martínez en su atrevido blog Ciencia sin miedo titulado Descreídos de la epidemiología.

Trata sobre las controversias científicas, los prejuicios a la hora de encararlas, el sano escepticismo que ha de guiarnos a la hora de afrontar problemas de salud pública que son nuevos y tanbién sobre el falso escepticismo, el fundamentalista. que llega a poner a la ciencia (ahora en minúscula) por encima de la salud de las personas.

Leer este post me ha recordado la existencia del primero porque en buena medida trata el tema de la contaminación electromagnética. José A. escribe que hay dos tipos de incrédulos:

El segundo tipo es el de incrédulos cerriles, en el que ‘todo es basura’. Bueno no todo, los resultados de investigaciones que concuerdan con sus intereses personales sí que valen, pero los que no son consistentes con su visión del mundo son altamente cuestionables. Si creen que la contaminación electromagnética no afecta a la salud, te dirán que ‘todo es basura’, que todas esas investigaciones son cuestionables”.

Este segundo tipo de descreídos -continúa- sucumben al sesgo de confirmación, tan presente cuando hablamos de consistencia cognitiva; creen lo que quieren creer, lo consistente con sus creencias y prejuicios. Es un modo de autodefensa, una forma de minimizar sus costes psicológicos.

Utiliza muy bien los conceptos este autor y utiliza variados ejemplos que suelen serme conocidos (de hecho me cita amablemente en un par de ocasiones):

Estos descreídos son también vulnerables al efecto halo. Si encuentran que los resultados de una investigación que no concuerda con sus intereses son cuestionables, entonces rápidamente extienden ese razonamiento a todas las demás, sin evaluar su valor.

Es decir, “como esta investigación tiene muchas limitaciones”, todas las demás que argumentan implicaciones similares son inválidas. Este es uno de los razonamientos empleados por personas para atacar cualquier tipo de tópico de investigación, como la asociación entre la exposición a pesticidas y los problemas de salud en niños“.

Nos cita también a Dennis Henshaw, de la Universidad de Bristol, que que se atreve a explicar 35 años de relación entre la leucemia infantil y los campos electromagnéticos de baja frecuencia recurriendo a la literatura de varias ramas científicas que él considera que son olvidadas a la hora de reconocer un problema que tendría otra perspectiva si se adoptara una visión multidisciplinar.

En España ser un investigador multidisciplinar y el propio autor del texto lo ha sufrido en sus carnes.

Significativo es el análisis que hace de los resultados del informe Bioinitiative 2012 (con una actualización en 2014), donde se realizó una revisión de los estudios publicados desde 2007 en relación a los efectos biológicos de la exposición a campos electromagnéticos, tanto de baja como de alta frecuencia. Las pruebas estadísticas a favor del efecto dañino de la contaminación electromagnética.bioinitiative contaminación electromagnética

Tenemos cientos de investigaciones que encuentran asociaciones con diversas enfermedades.

Tenemos muchísimos casos de apariciones de cáncer en personas viviendo en las inmediaciones de fuentes emisoras, ya hayan sido identificadas como cluster estadístico o no.

Tenemos un incremento notable de personas electrosensibles, discapacidad reconocida en algunos países de nuestro entorno.

No existe una prueba definitiva, es cierto, pero los indicios nos llevan a pensar que ‘algo hay’. Esos indicios son, en definitiva, la base de la aplicación del Principio de Precaución, mencionado en el artículo 191 del Tratado de Funcionamiento de la Unión Europea (UE)”.
Después de analizar los puntos anteriores (es útil que leáis todos) José A. concluye:

considero que tengo indicios suficientes para pensar que la contaminación electromagnética es perjudicial para la salud, por debajo de los niveles que a día de hoy se consideran legales. Tengo indicios, no certezas. Pero esos indicios son suficientes para que yo establezca mi propio juicio al respecto”.

Articulo tomado de: http://www.migueljara.com/2016/02/20/electrosensibles-locos-por-la-contaminacion-electromagnetica/

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Si los alimentos transgénicos acaban con el hambre en el mundo te doy un Nobel

Por: Miguel Jara

109 premios Nobel de Medicina, Física o Química se han firmado una carta pidiendo a Greenpeace y a los gobiernos de todo el mundo que abandonen su oposición y sus campañas en contra de los organismos genéticamente modificados (OMG’s), los conocidos como alimentos transgénicos. El contenido y tono de la misma es algo apocalíptico-conspiranoico. Acusan a la organización ecologista de “crimen contra la Humanidad”.

Esperaba encontrar una respuesta científica a las críticas que sufre la biotecnología aplicada a la alimentación. Pero no es así, la opinión del centenar largo de premios Nobel se centra en algo pueril, que los transgénicos son la solución para acabar con el hambre en el mundo y que Greenpeace -y sólo esa organización cuando hay centenares de miles de asociaciones y opositores) es la máxima responsable de que al criticar esta tecnología alimentaria millones de personas en el mundo mueran por no acceder a comida transgénica.

En concreto, el texto arremete contra la organización ecologista y le exige que acabe con su campaña para impedir el cultivo del arroz dorado, una variedad transgénica modificada para reducir el déficit de vitamina A (DVA) y que, según la carta de los Nobel, tiene potencial para reducir muchas de las muertes y enfermedades causadas por la deficiencia de esa vitamina.

Un problema de salud que causa ceguera, mortalidad infantil y problemas durante la gestación y que tiene su mayor impacto sobre las poblaciones más pobres de África y del sudeste asiático.

La Organización Mundial de la Salud -dicen los Noble- estima que 250 millones de personas sufren la carencia de vitamina A, incluyendo el 40 por ciento de los niños menores de cinco años en el mundo en desarrollo. Sobre la base de estadísticas deUNICEF, un total de entre uno y dos millones de muertes prevenibles ocurren cada año como resultado del déficit, ya que compromete el sistema inmunológico y pone a los bebés y niños en gran riesgo”.

El arroz dorado es simbólico en esta batalla y Greenpeace considera que se trata de un caballo de Troya para abrir la puerta para la imposición de OMG por parte de grandes corporaciones interesadas en imponer su alimentación de patente.

Los transgénicos no son la solución del hambre en el mundo. En el mundo hay alimentos suficientes para todas las personas. El 30% de los alimentos producidos en el mundo terminan en la basura. Solo con esto tendríamos lo suficiente para alimentar a todas las personas que habitan la Tierra hoy día y los que podremos llegar a ser en 2050 (sin intensificar más la agricultura y sin utilizar cultivos transgénicos). El hambre es una cuestión compleja relacionada con guerras, migraciones, conflictos y no se soluciona con un cultivo transgénico”, contestan desde la asociación activista.

Lo cierto es que para los firmantes del texto parece que ya no vale con la agricultura tradicional y mucho menos con la ecológica. Ellos lo que promueven es un nuevo tipo denominado “agricultura mejorada”, en referencia a la biotecnológica, fabricada en laboratorios, cuyos impactos ambientales y en la salud de las personas no se conocen bien y eso sí, patentable para que resulte un buen negocio.

Lo de que hay muchas personas que mueren de hambre en el mundo sólo es una excusa, marketing del miedo; intentan hacernos creer que quien se oponga a ese tipo de progreso es responsable de ello, una especie de chantaje moral.

La última evaluación científica de Naciones Unidas sobre Ciencia Agrícola y Tecnología para el Desarrollo, llevada a cabo por más de 400 científicos de todo el mundo -indica Greenpeace- hace un balance de la situación actual en la agricultura mundial y concluye que la agricultura ecológica permite aliviar la pobreza y mejorar la seguridad alimentaria.

Por el contrario, cuestiona la agricultura con transgénicos por sus implicaciones sociales y ambientales y la descarta definitivamente como solución única al hambre”.

Bayer transgénicos biotecnologíaEl problema pues no es tanto la falta de alimentos como el modelo económico que están impulsando empresas como Monsanto, Dow, Syngenta, Bayer, Dupont y BASF, propietarias de casi todos los cultivos transgénicos que se comercializan en el mundo, y controlan el 76% del mercado agroquímico.

Eso significa que las empresas que producen las semillas transgénicas son las mismas que se enriquecen con la venta de los plaguicidas tóxicos adicionales necesarios para la agricultura “mejorada”.

De hecho, continúa Greenpeace, los principales productores de transgénicos eran originalmente empresas agroquímicas que ampliaron su negocio a la producción de semillas cuando surgieron las lucrativas oportunidades de las semillas patentadas. Esta lógica es contagiosa, y ahora las empresas de semillas están patentando plantas obtenidas de manera tradicional y creando nuevos monopolios en las semillas convencionales”.

El problema pues no es tampoco la biotecnología en sí, hay medicamentos loables que se hacen con ese tipo de técnicas y la agricultura ha sido mejorada desde su invención. El problema es que el actual modelo de producción de alimentos está controlado por el citado cartel que considera la alimentación una cuestión de inversiones y ventas más que un derecho humano. La industria no ha conseguido impulsar la comida transgénica en veinte años y cuando encuentre algo aún más rentable que los transgénicos abandonará estos.

Monsanto libroEs más sería indeseable que empresas tan cuestionadas como Bayer o Monsanto por su falta de escrúpulos y de respeto a los derechos humanos y que dominan la industrialización de la alimentación y nos han dejado niveles de contaminación de los campos como nunca, fueran las que alimentasen al mundo.

La idea central de la carta de los Nobel coincide con la línea ideológica propagandística del cartel transgénico: terminemos con el hambre en el mundo, que se titula un artículo escrito por uno de los directores de Monsanto.

Dijo Mark Twain que “es mas fácil engañar a una persona, que convencerla de que la han engañado” y por lo que observo, algo de esto hay, gente ideologizada que nunca reconocerán sus equivocaciones.

Resulta curioso también que se haya intentado describir a los ecologistas como parte de una religión, una especie de panteísmo donde el papel de Dios lo representa la Madre Naturaleza. Como apunta el médico y autor del excelente libro El autoritarismo científico, Javier Peteiro:Peteiro Autoritarismo científico ciencia pseudociencia

se da otra forma de religión tanto o más dañina (incluso para la propia ciencia), elcientificismo.

Referirse a ‘la voz de la mejor ciencia disponible’ [como hacen los citados Nobel- es no decir nada. Alguien recibe un premio Nobel por su contribución a un área de investigación científica, de creación literaria o de la paz.

La posesión de un Nobel, siendo extraordinariamente importante, no supone necesariamente un mayor aval a la hora de hablar de ética o de política, incluso de ética de ciencia aplicada, como en este caso.

Y el criterio cuantitativo no supone un cambio cualitativo, pues da lo mismo que ese artículo lo firme uno o cien; lo importante son los argumentos”.

Durante la época en que el nazismo dominaba Europa, Albert Einstein, a causa de ser de origen judío, debió soportar una guerra en su contra urdida por los nazis con el fin dedesprestigiar sus investigaciones.

Uno de estos intentos se dio cuando se publicó este libro: Cien autores en contra de Einstein. Es un texto en el que se compilaron las opiniones de 100 científicos que contradecían las de Einstein. Cuando le consultaron al interesado, respondió:

«¡Si yo estuviese equivocado, uno sólo habría sido suficiente!”.

*Articulo tomado de: http://www.migueljara.com/2016/07/07/si-los-alimentos-transgenicos-acaban-con-el-hambre-en-el-mundo-te-doy-un-nobel/

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Los transgénicos retroceden en Europa y Latinoamérica, pero avanzan en Africa

Por Miguel Jara

La semana pasada se produjo el lanzamiento de un nuevo estudio sobre la comercialización de transgénicos a escala mundial patrocinado por la industria. Al mismo tiempo conocimos un nuevo informe de Amigos de la Tierra Internacional que revela que los cultivos transgénicos en Europa siguen cayendo en picado, al tiempo que aumentan el número de países que los prohíben.

El informe “¿Quién se beneficia de los cultivos transgénicos” demuestra que apenas el 0,06% de los campos europeos se cultivan con transgénicos, un descenso del 23% desde 2008. Siete estados miembro de la Unión Europea prohíben el cultivo del maíz transgénico de Monsanto por las cada vez mayores evidencias sobre sus impactos ambientales y socioeconómicos, así como sobre sus incertidumbres en la salud. Tres países han prohibido el cultivo de la patata transgénica de BASF por precauciones sanitarias inmediatamente después de ser aprobado su cultivo en la primavera de 2010, y cinco miembros más han llevado a la Comisión Europea ante los tribunales por su autorización. La oposición pública a los alimentos y cultivos transgénicos se ha incrementado hasta el 61%.

Incluso los países que más han apostado por los cultivos transgénicos en América Latina se han visto forzados a tomar pasos para mitigar sus impactos negativos sobre la agricultura, la ciudadanía y el medio ambiente. El Gobierno brasileño ha lanzado un programa de soja libre de transgénicos para facilitar a los agricultores el acceso a semillas de soja no modificadas genéticamente; en Argentina, nuevas evidencias científicas muestran los graves impactos sobre la salud del herbicida Glifosato, utilizado en la inmensa mayoría de los cultivos transgénicos del mundo, lo que ha conducido a la prohibición de la fumigación cerca de los núcleos de población, y en Uruguay, cada vez son más las administraciones locales que se declaran libres de transgénicos.

El informe de Amigos de la Tierra demuestra a su vez que:

-Una nueva generación de cultivos transgénicos diseñados para promover el uso de peligrosos pesticidas como Dicamba y el 2-4 D están listos para su liberación en EE.UU. Las multinacionales biotecnológicas los están promoviendo como la solución al fracaso de los transgénicos actuales para controlar las malas hierbas y reducir el uso de pesticidas.

-La industria de los transgénicos, con el apoyo del Gobierno de EE.UU., buscan nuevos mercados en África en un intento de subir su cuota de negocio. La Fundación Gates, que invierte miles de millones de dólares en proyectos agrícolas en África ha comprado acciones de Monsanto, manifestando su interés directo en maximizar los beneficios de la industria de los transgénicos y no en proteger los intereses del pequeño campesinado africano.

Así que por una parte las buenas noticias, y esperemos que no sea tarde, de que en Europa van prohibiéndose estos cultivos nocivos. Que América Latina comienza a despertar del mito transgénico. Y por otra que estas compañías siguen utilizando la excusa del hambre para trasladarse en este caso a África; lo que no queremos por aquí lo venden en países con menores regulaciones, con gobiernos ansiosos de nuevas inversiones (a cualquier precio) y con poblaciones menos informadas de la que se les viene encima.

Las alternativas pasan por informarse bien sobre qué productos de la cesta de compra contiene trasngénicos pues en Europa es obligatorio etiquetarlos. Pero sobre todo por pasarnos de la comida convencional (muchos alimentos, con la ley en la mano, no tienen que ser etiquetados aunque contengan trazas de transgénicos) a la ecológica, que está certificada por organismos de control. Es necesario crear cooperativas de consumo ecológico, expandir iniciativas como por ejemplo la de EnterBio (de la que ya hemos escrito en estas páginas), apoyar (apoyarnos) en el sector ecológico. Cuanto más crezca este más ganaremos en salud y en cuidado de la tierra pues la especulación con los alimentos nos pasa factura. www.ecoportal.net

Fuente: http://www.ecoportal.net/Eco-Noticias/Los_transgenicos_retroceden_en_Europa_y_Latinoamerica_pero_avanzan_en_Africa

Foto: http://www.taringa.net/posts/salud-bienestar/18503859/Tu-y-yo-ya-los-comemos-Que-son-los-transgenicos.html

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¿Pueden el sistema educativo y los deberes ser una fuente de falta de atención e hiperactividad?

Miguel Jara

El Trastorno de Déficit de Atención con Hiperactividad (TDAH) es un problema social que no para de crecer. Existen factores familiares, ambientales o ecológicos, económicos, que lo potencian pero no se ha planteado si el sistema educativo y el “abuso” de los deberes y tareas pueden influir en esta “epidemia” consentida.

Juan Pundik, es presidente de Filium (Asociación para la prevención del Maltrato al Niño), de la Plataforma Internacional contra la Medicalización de la Infancia y director de la Escuela Española de Psicoterapia y Psicoanálisis. En esta entrevista que le hizo El País Semanal lo primero que responde es sobre que el Trastorno de Déficit de Atención con Hiperactividad (TDAH) no es una patología.

Y pone en cuestión el actual sistema educativo:

No atender en clase no es una enfermedad. Los que derivan a los chicos a un especialista son, normalmente, los profesores que tienen que manejar a 35 alumnos, lo que, naturalmente, no es fácil. Tenerlos quietos y callados puede hasta cuestionarse que sea sano, pero las características de la escolaridad así lo requieren y, en consecuencia, lo mejor es tenerlos drogados. Es lo que se hace con los ancianos en algunos geriátricos”.

En la revista le preguntan:

XL: Pero el niño que no consigue un rendimiento escolar adecuado porque es disperso o hiperactivo tiene más posibilidades de enfrentarse a un fracaso no ya escolar, sino social, con lo que eso supone de traumático…”.

Y responde:

Querrá decir que no consigue el rendimiento escolar que se le quiere imponer. Yo tengo un largo historial de gente que fue diagnosticada y hasta medicada como hiperactiva simplemente porque esa escolaridad que querían imponerle no le servía, porque quería ser bailarina o jugador de fútbol. El problema es porqué les imponemos a todos los niños un menú fijo, cuando cada uno tiene habilidades diferentes. No todos valemos para lo mismo”.

Y en parte ese rendimiento escolar puede estar condicionado por las propias tareas, los deberes que hacen los niños y que si no los terminan en la escuela han de hacerlo en sus casa por la tarde.

Una exhaustiva revisión del máximo especialista en tareas, Harris Cooper, profesor de la Universidad de Duke, concluyó que las tareas no mejoran significativamente el desempeño académico de los niños en la escuela primaria. Es más, demasiadas tareas resultan contraproducentes y los críos que hacen menos tareas van mejor en la escuela. Quizá resulte provocador pero no lo es: ¿Puede ser la escuela una fuente de falta de atención e hiperactividad?

La Organización Mundial de la Salud (OMS) alertó el pasado mes de abril de que los deberes perjudican la salud. El estrés de las tareas escolares desemboca en dolores de cabeza, abdominales y de espalda y causa nervios, tensión y tristeza. Un 70% de las chicas españolas de 15 años aseguran sentirse presionadas por el trabajo que los profesores mandan hacer en casa.

Vivimos en una sociedad compleja en la que cuando hay un problema de salud multitud de causas pueden estar detrás.

Esas causas pueden ser familiares, ambientales (los productos tóxicos pueden causar hiperactividad), comerciales (hay toda una industria que intenta sobrediagnosticar y sobremedicar con fines económicos) y ahora, uno de los espacios donde comienza la sobremedicación, la escuela, puede estar también en el epicentro del problema.

Y este asunto no para de crecer, de aumentar de tamaño según pasa por diferente estamentos o ámbitos como una bola de nieve. Las autoridades sanitarias de Estados Unidos han alertado esta semana de que el exceso de nuevos diagnósticos de TDAH en los menores de cuatro a 17 años ha propiciado que en los últimos 10 años los supuestos casos aumenten un 53% en el país, de acuerdo con el Centro de Prevención y Control de Enfermedades.

Sobre Pundik y conmigo y mi compañero abogado en el Bufete Almodóvar & Jara podéis ver esta entrevista en la que también tratamos sobre el TDAH:

 

Fuente del articulo: http://www.migueljara.com/2016/05/26/pueden-el-sistema-educativo-y-los-deberes-ser-una-fuente-de-falta-de-atencion-e-hiperactividad/

Fuente de la imagen: http://www.migueljara.com/wp-content/uploads/2013/08/TDAH1-229×300.png

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