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Docencia a honores o de la corresponsabilidad social docente

Por estos días de inicios del nuevo año escolar 2020-2021, meses de septiembre y octubre, merced a la crisis socio-económica y política venezolana, agravada con la pandemia del covid-19, gobierno y gremios docentes de todos los niveles y modalidades en acciones instrumentalizadas por los partidos de la oposición, han vuelto a echar un pulso, ¿quién irá ganando a estas alturas?

Todos los trabajadores y el pueblo en general están siendo gravemente afectados. Unos lo atribuyen a la corrupción de cierto sector del funcionariado gubernamental y otros a las sanciones, bloqueo o agresiones económicas de la «Comunidad internacional» o «Gobiernos imperialistas». En verdad todo ha sido terrible, cada vez se deteriora la calidad de vida alcanzada al menos desde 2003 a 2012 en Venezuela, un crimen de lesa humanidad. Esas sanciones promovidas por la oposición han dado a Venezuela un golpe certero en el espinazo.

Al respecto los ministerios, porque se ha multiplicado la burocracia, pero no la eficiencia; el de educación primaria, media, general, técnica y profesional y el ministerio de educación universitaria, así como el ministerio del trabajo, callan muy dignos; aunque por ahí circula un rumor de que habrá un aumento del salario mínimo, o exclusiva para los docentes, pero dizque va a ser poco significativo, entre 5 a 6 millones de bolívares mensuales. No hay plata, la hoya está vacía, nada para realizar inversiones en infraestructura, plataformas tecnológicas, recursos didácticos ni para el talento humano.

En cuanto a la limpieza, sólo algunos planteles fueron desinfectados, faltando muchos más. Docentes y empleados al igual que todos los trabajadores públicos sobreviven en condiciones cada vez más precarias, en realidad los docentes realizan el trabajo a honores. Como diría el Sr. Gonzalo, un librero bogotano que tiene toda la vida vendiendo en la Plaza Pedro León Torres de Barquisimeto: «Estamos en la propia inopia».

Como sigamos así, vamos a volver al punto en que la docencia como actividad voluntaria de inicio y mediados del siglo XX, en un tiempo en que el sistema educativo no se había modernizado y el país vivía una crisis socioeconómica y política que muchos denominan de transición caudillista. En ese contexto en que casas particulares servían de asiento de escuelas particulares, los alumnos debían traer su silla, mesa y pizarrón portátil; en espacios más grandes donde funcionaban colegios o liceos nacionales o federales ciertos profesionales (abogados, médicos, farmacéuticos, dentistas, militares entre otros), como parte de su compromiso social con la comunidad solían entregar a las nuevas generaciones sus conocimientos.

En efecto, es fama que reconocidos representantes de profesiones liberales administraban en colegios privados, liceos púbicos y/o universidades materias como: Historia de Venezuela, Historia Universal, Geografía, Astronomía, Biología, Derecho Constitucional, Historia del Derecho Romano, entre otros y el funcionariado formal del servicio educativo era mínimo. Así lo señala el Dr. Domingo Alberto Rangel (el famoso DAR, polemista de palabra encendida como tribuno en el Parlamento, conferencias y argumentos precisos en artículos periodistas y libros), recuerda que:

«En septiembre de 1940 fui a Mérida para iniciar en la Universidad de Los Andes los estudios de Derecho. Ante todo, esta etapa en el camino de la vida, como habría dicho Dante, (…). En Mérida me aguardaba el recodo fundamental de mi vida. Los cuatro años que allí pasé, entre 1940 y 1944, fueron decisivos porque maceraron mi vocación, crearon mi cultura política, me permitieron alternar como luchador con gentes del pueblo e hicieron de mí un intelectual comprometido, hasta la tumba con la causa popular» (Domingo Alberto Rangel «Alzado contra todo. Memorias y desmemorias». Mérida Editores. Vadell Hermanos. Valencia-Caracas. Venezuela. 2003. P. 75).

Aquí viene su descripción del profesorado a honores o parte de un servicio público que prestigiaba en el marco de una sociedad que transitaba de la tradición a la modernidad.

«En la universidad de Los Andes en 1940 era la misma que, sesenta años atrás, había desafiado las cóleras de Guzmán Blanco. Ocupaba el mismo inmueble que era el suyo desde la colonia, un poco remozado que flanqueaba al viejo torreón del Rector heroico. Nada había cambiado en un siglo, los mismos locales, la misma ubicación que luciera en aquella época. Tenía el mismo número de alumnos. Creo que no pasaban ellos de mil y, si estoy subestimando a aquella masa, apuesto a que no excedía los mil quinientos. Los profesores eran todos ellos, en las cuatro o cinco Facultades, profesionales de otras tantas ramas que dedicaban una o dos horas tras el amanecer o pasado el atardecer a la labor docente. Abogados de bufete o tribunal, médicos dedicados a sus consultorios, farmacéuticos dueños de una botica o dentista con clínica propia, eran los profesores. Ninguno de ellos cultivaba la docencia como ocupación principal. El personal administrativo se reducía al Rector, al vice-Rector y al Secretario. Los Decanos ejercían ese cargo de manera honoraria y sin dedicarle un solo momento concreto y determinado. El único empleado que yo recuerdo era Pablito, el bedel» (ob cit., p. 78-79).

Dado el contexto actual, ¿la alternativa en Venezuela será volver a la docencia a honores como parte de un compromiso social de los profesionales universitarios? Parece que no, porque según y que ya se han incorporado más de 70 % del personal docente a los planteles y realizarán acciones sindicales continuamente hasta lograr un aumento salarial adecuado.

La conclusión viene a ser que dado el contexto actual venezolano marcado por la hiperinflación por las agresiones económicas y políticas, los errores en los diseños de las políticas económicas y la corrupción, el ejercicio de la docente como actividad principal remunerada ha desaparecido. Se podrá ejercer sólo como parte de un compromiso social por parte de algunos profesionales, que es una forma de retrogradar a períodos de nuestra historia; ergo, como la sociedad está mal así también está la educación, ¿no hay un pensamiento bolivariano atiente a que la sociedad avanza o retrograda al mismo ritmo con que lo haga su educación?

Paralelamente esto nos trae a la memoria una anécdota, aquella en la que el maestro J. M. Briceño Guerrero, reconocido filólogo y filósofo que se mantuvo como docente activo en la ULA-Mérida hasta cumplido más de 84 años, allá en la biblioteca del Prof. Del Reinaldo Rojas en El Eneal, sostuvo que para que haya enseñanza sólo se requiere que alumnos con deseos de aprender y maestros que quieran enseñar; en esa relación a algunos no les importa pagar, pero también hay quienes no les gusta cobrar sus enseñanzas, que sería el caso de Platón y Aristóteles, a lo que agregaríamos nosotros a los dos profesores ya nombrados; particularmente el Prof. Rojas suele dar asesorías, sobre todo en los niveles de postgrado, maestría y doctorado en el campo de la historia de la educación e historia de la cultura, las ideas políticas.

Notas:

  1. Nos comentó vía telefónica un profesor amigo que el jueves pasado estuvo en el Instituto Pedagógico de Barquisimeto porque se enteró que había inscripciones para alumnos de nuevo ingreso. Estuvo en la famosa «Puerta de Vidrio» y se inscribieron como 160 jóvenes, todos en la especialidad de inglés, un fenómeno que se está repitiendo en estos últimos semestres: la gente quiere aprender lenguas extranjeras con fines de migrar posteriormente. Por demás le sorprendió el abandono del recinto. Las capas gruesas de polvo envuelven las diversas estancias de la institución, desde la Plaza Salvador Allende en adelante. ¿Cuándo será que las instancias gubernamentales se dignarán realizar una jornada de desinfección a fondo del instituto Pedagógico de Barquisimeto? Se ha oído al ministro Trómpiz hablar sobre el plan «Universidad Bonita», ¿incluirán al Instituto Pedagógico de Barquisimeto? Preguntamos porque señaló que inicialmente sería una universidad por cada estado, así las probabilidades disminuyen, dado además de que la UPEL como universidad de estructura matricial nacional no aparece precisamente entre las priorizadas por el Despacho de Educación Universitaria, ha sido marginada.
  2. En esa línea, en el programa radial «Universitas» de la unidad de mercadeo de la UCAB a través de la cadena Unión Radio este sábado 10 de octubre de 2020, oímos a un profesor defender ardorosamente la universidad pública, no abandonarla a pesar de la adversidad, cosa que alimenta el gobierno actual con su desidia, comentó. Precisamente un representante de la Universidad de Los Andes, Núcleo Rafael Rangel del estado Trujillo. destacó que una encuesta arrojó que 60 % de su personal docente y de investigación quiere volver a las aulas semi-presencial, virtual, abierta y a distancia, etc., con el fin de concluir el lapso académico iniciado meses atrás; luego se verá las formas de lucha reivindicativa gremial, argumentó. El rector de la UCAB Dr. Francisco José Virtuoso en entrevista radial señaló también que este 13 de octubre estaban iniciando semestre con «presencialidad remota», es decir, clases vía on-line y para lo cual han adecuado su plataforma y capacitado su personal.
  3. Oyendo sin embargo la intervención del ministro Isturiz en su rendición cuenta televisiva al presidente Maduro por tv (lunes 12 de octubre de 2020) acotó que en Venezuela más del 73 % de los planteles educativos se incorporaron a sus actividades y sus docentes estaban contentos de recibir sus alumnos, de tal suerte que los docentes no desmayan en su empeño; están trabajando a honores. Por otra parte, los gremios y sindicatos magisteriales acotaron que el paro y las acciones sindicales iniciadas el pasado 5 de octubre fueron todo un éxito y continuarán exigiendo sus reivindicaciones. Así la historia no vuelve al pasado, aunque pareciera.
  4. Modernamente, la subvención de la educación y sus agentes óptimos, los docentes formados exclusivamente para ello como profesionales, corresponde al Estado-Nación o a la Sociedad Educadora en sus centros privados como es el caso de grandes universidades de Estados Unidos. En ese sentido hemos leído al respecto los testimonios de Arturo Uslar Pietri, Pedro Grases (y Julio Cortazar) en sus estancias docentes y de investigación en Columbia, Harvard y Berkeley, EE.UU; donde las condiciones de trabajo y remuneración son excelentes, pero en Venezuela volviendo a Briceño Guerrero cuyas clases y charlas nunca estaban exentas del humor, comentaba que hubo un período de la llamada Cuarta República, cuando casi todos los investigadores hacían postgrados en Europa; pero hoy los profesores no gozan de los necesarios beneficios socioeconómicos; no son sino «Pobresores».

Fuente: https://www.aporrea.org/educacion/a296231.html

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Etnografía del quehacer pedagógico a partir de los CLIP

Por: Luis Saavedra 

Lo que sigue es parte de una relatoría sobre una investigación que intentamos junto a una estudiante de postgrado sobre gestión del conocimiento y formación permanente del magisterio en Barquisimeto, estado Lara, y que fue rechazada como proyecto Trabajo de Grado de Maestría, Subprograma de Investigación al parecer por cuestiones formales (ambigüedad en la teoría y metodología, con especial referencia a la formulación de las «intenciones», normas APA).

Se pretendía un acercamiento a las vivencias de los docentes en la gestión de conocimiento en los Centros Locales de Investigación y Formación Permanente (CLIP), apoyado en la perspectiva sociocrítica. Pero como señalara recientemente un historiador de reconocida trayectoria en Venezuela, en ciertas unidades administrativas domina la forma sobre el fondo, los formularios manuelescos por sobre el trabajo de la investigación educacional, cuyo proceso concreto suele ser arbitrario, ya que el tema-problema o el objeto de estudio en el mundo de la vida viene a ser lo que determina el método y la teoría y no al revés; cuando lo que importa es el informe final que es más ordenado y sistemático. Y sobre todo cuando tributa a la solución de problemas del entorno. Como fuere lo queremos socializar ahora y si alguien se atreve a hacernos algunas sugerencias serán muy bienvenidas.

La información se obtendría de observación participante y entrevistas a docentes de aula y docentes directivos quienes siguiendo el Currículo Nacional Bolivariano (2009,) de acuerdo a las líneas de investigación del CENAMEC asumidas por la institución del Ministerios del Poder Popular para la Educación (MPPE, 2014), se involucran en ese proceso, sobre todo a través de la nueva universidad que «compite» con la Upel, la Universidad Nacional Experimental del Magisterio Samuel Robinson; que desarrolla programas de formación con especializaciones o maestrías.

Que la verdad sea dicha en lo personal aun no entendemos su naturaleza y alcance (se requiere más información), dado que para tales fines existen los institutos pedagógicos de vieja data y amplia cosecha reunidos desde hace unos 30 años en la Upel, la universidad de los maestros, gloriosa institución que ha formado históricamente pléyade de docentes e investigadores; pero según un efímero ministro de educación, ahora un oscuro alcalde «La Upel es un veneno».

En concreto, queremos recoger flujos de información en las notas de campo y entrevistas, que se explayarían a través de una matriz de categorías, subcategorias y unidades de significación, como recomienda Martínez, (2007). Finalmente se harán reflexiones y sugerencias pertinentes sobre el asunto abordado.

En sí realizaremos una inserción en el contexto social e institucional donde se ha iniciado un proceso de vivencia de la gestión del conocimiento con las políticas de investigación y formación permanente, formuladas por el Ministerio del Poder Popular para la Educación (MPPPE). Lo cual implica una amplia apertura a las nuevas tendencias científicas postpositivistas y teorías pedagógicas emancipadoras, pero a su vez tiene lugar la emergencia de una no menos amplia problemática en cuanto a su implementación en nuestras instituciones de educación primaria bolivariana, media general y técnica, debido a diversas circunstancias como las actitudes de aceptación y/o rechazo, tal vez por preconcepciones negativas sobre la conducción del Estado-Nación venezolano, entre otras.

En ese sentido, el sistema educativo venezolano bolivariano ha venido desarrollando una serie de políticas que tienen que ver con los cambios necesarios para fortalecer el espíritu crítico, creación de saberes, generación de conocimientos científico-técnicos y humanísticos pertinentes y de calidad para todos. Además de fortalecer el papel científico del maestro y el desarrollo del currículo nacional integrado en el entorno comunitario. Proceso que no siempre se cumple y, a los efectos, conviene acercarse a esa realidad con una mirada crítica.

Desde el punto de vista legal, la Ley Orgánica de Educación (2009), en su Artículo 15, invita a desarrollar el potencial creativo de cada ser humano, desarrollar la capacidad de abstracción y pensamiento crítico mediante la formación en filosofía, lógica y matemática con métodos innovadores. Y uno de los temas indispensables es la ciencia, la tecnología e innovación en la educación.

Todo lo anterior hace parte de esa nueva generación de conocimiento, por lo que es importante saber cuál es nuestra actuación como docentes de aula y la interacción con los demás colegas en las entidades de trabajo, como una forma de asumir este nuevo reto hoy.

Efectivamente, la investigación constituye el referente básico para la formación individual y social, sin lo cual el desarrollo de la creatividad y la innovación quedan truncados. Ello se ha convertido en un nudo crítico en los procesos formativos de las instituciones venezolanas. Superarlo supone un esfuerzo personal y grupal, con equipos de alto sentido de pertenencia a la epistemología crítica o del sur, la organización escolar y comunidad en general de la nación.

Así, de acuerdo a lo anterior, la misma pragmática o sentido de contextualización donde tienen lugar las prácticas sociales tradicionales y generar o aplicar conocimiento privilegian lugares y ordenanzas que suelen observar las personas integradas al sistema social reconocido como válidos de manera estricta, sin advertir apenas que hay otras posibilidades de acción y no solo el flagelo de teorías teórica-metodológicas dominantes en la comunidad científica, que pudiesen dar otros frutos en realización personal, además de productos y subproductos novedosos que den respuesta a demandas muy sentidas en el contexto social.

Lo anterior, viene a ser una invitación al desarrollo práctico de la soberanía cognitiva, como dice la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, en su Preámbulo, (1999). Allí se invita a refundar el Estado-Nación, y sus medios expeditos son: la educación y el trabajo realizados libre y emancipador, de manera soberana y protagónica. Además, en el artículo 3 queda establecido que el Estado tienen como fines la defensa y el desarrollo de la persona y respeto a su dignidad, lo cual solo es posible cultivando la inteligencia, voluntad y memoria histórica.

Por su parte en el Artículo 102 del mismo texto constitucional, enfatiza la educación como un derecho humano fundamental y un deber social ineludible del estado, la sociedad y la familia. Por lo que atendiendo a estas premisas vemos con gran preocupación que, si un docente carece de la formación pedagógica y científica adecuada, estaríamos desatendiendo este derecho a nuestros jóvenes, negándoseles el conocimiento adecuado.

Es por eso, que dentro del proceso de observación participante de la investigadora, a tenor de los elementos dados por los informantes, describe el tema de la gestión del conocimiento centrado este en la formación de investigación permanente en la institución como el aspecto primordial del perfil del docente, ya que venimos de una estructuración positivista, donde los conocimientos se dan por repetición, memorización y nuestras actitudes son unísonos a este modelo; paralelamente de manera concomitante se nos dificulta pasar a otra forma de generar y gestionar conocimiento ante esta nueva era sorprendentemente creadora dentro de una praxis educativa de acuerdo a los espacios de formación.

Es bueno recordar que desde hace años se viene haciendo una reflexión de la calidad educativa. En este sentido se debe reconocer una serie de características como son: la equidad en el ingreso, la permanencia y la universalización, en el sentido de amplia cobertura geográfica, partiendo de esas realidades se presentan un abanico de posibilidades para generar nuevas estrategias pedagógicas para la docencia y la investigación amparados por las orientaciones curriculares para la educación media (MPPE, 2014).

Igualmente, la Ley Orgánica de Educación (2009), en su Artículo 14, define la educación: entre otras cosas, como la promotora de «la construcción social del conocimiento», dándole sustento a lo contenido en el Diseño Curricular (2006), que nos lleva a mejorar los programas para la calidad docente. Siguiendo hacia las políticas de Transformación curricular dispuestas por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (United Nations Educational, Scientific and Cultural Organization), UNESCO.

Desde la observación de la experiencia personal y de su contexto, se puede plantear la necesidad de la investigación como parte del quehacer pedagógico transformador hacia la necesidad de la formación permanente, que permitan dar paso a las políticas de transformación curricular.

Pues como dice Freire (2008) «Todo proceso formativo debe alcanzar una educación que permita, vivir y aprender, saber porque se vive y porque se aprende» (p. 78), para lo cual, debemos partir del docente que poseemos para saber cuáles son sus fortalezas y cuales sus debilidades. Ello permite tener un grado de apropiación y pertenencia de acuerdo a la propuesta de país planteado en los lineamientos del Ministerio del Poder Popular para la Educación (MPPE) acerca de las políticas de transformación curricular, que exige coherencia con las necesidades científicas que el país requiere y el perfil que logremos discernir para avanzar en una profundización de la reflexión teórico-práctica.

Finalmente, surgen inquietudes del siguiente tipo: ¿cómo se desarrolla en la cotidianidad la investigación y formación permanente del docente? ¿Qué elementos destacan en la dinámica curricular hacia la generación de conocimiento? ¿Cómo generan los docentes propuestos de formación permanente según la nueva propuesta curricular en la educación emanada del Ministerio del Poder Popular para la Educación? ¿Qué aspectos críticos se deben tomar en cuenta con fines de elaborar una descripción y comprensión de la producción de conocimiento en la institución en estudio desde la perspectiva etnográfica?

Es así, como hablamos de un proceso de formación del docente que pueda convertirse en la referencia para la educación que éste va a brindar a los educandos, «una educación que permita viviendo y aprendiendo, saber porque se vive y porque se aprende». La formación del docente es entonces una tarea fundamental del cambio educativo, la cual debe partir del reconocimiento de éste como sujeto, con sus potencialidades y limitaciones, avanzar hacia un diseño de aprendizaje que parta del aula, del estudio de la realidad concreta en la cual se desenvuelve el maestro, para contribuir a disminuir la brecha entre formación, investigación y acción transformadora educativa.

Ese reconocimiento nos debe generar elementos que nos puedan ayudar a dar un salto de calidad educativa, que nos propone las nuevas políticas estadales desde el Centro Nacional de Formación Permanente del Magisterio (CENAMEC).

Cabe anotar, que el proceso de investigación y formación permanente en el profesional de la carrera docente en Venezuela, solía ser asumida individualmente por aquellos docentes más comprometidos con la naturaleza de sus funciones, siempre de acuerdo a sus inclinaciones, posibilidades económicas y socioculturales. Así, es tradicional que el docente de su propio peculio financie sus estudios de postgrado: especialización, maestría y doctorado, pues, la gratuidad sólo alcanza por disposición constitucional hasta el pregrado universitario.

Correlativamente, órganos del Estado encargados de la formación de sus ciudadanos a través del Ministerio del Poder Popular para la Educación establece incentivos económicos, reconocimiento social y ascensos en el escalafón técnico administrativo propio de la carrera docente como parte de los empleados públicos por su esfuerzo intelectual; pero sólo en el nivel de la educación universitaria su personal académico y de investigación, su personal técnico-administrativo y de servicios u obreros cuenta con acuerdos derivados de actas-convenio que les garantizan estudios de ampliación, avanzados o actualización de forma gratuita, como una forma de incentivos no económicos.

En cambio, los docentes de educación primaria y secundaria hasta ahora no contaban con programas de formación gratuita y direccionada. Las universidades nacionales tienen programas de investigación y formación para docentes al menos desde mediados de la década de 1970 en adelante, pero históricamente con autofinanciamiento o en otras palabras, al menos que uno sea profesor universitario cada docente con su buen sueldo con el que contábamos hasta poco nos podíamos pagar las escolaridad de especializaciones, maestrías y doctorados; eso hace parte de los ingresos propios de las universidades tradicionales históricas experimentales y autónomas.

Posteriormente, según la progresividad de los derechos laborales se puede señalar una vez revisado los diversos convenios colectivos del magisterio han venido incorporando cláusulas llamadas académicas, o que suponen reconocimiento reconocimientos en emolumentos complementarios al salario: las populares «primas por estudios, con un porcentaje del salario básico por estudios de IV y V nivel (especialización, maestría, doctorado); 20 %, 30 %, 35 %, o menos porque está en relación al comportamiento de variables económicas y, según las épocas, ha variado.

Sólo en las últimas décadas y como parte de la reafirmación del principio político-filosófico de Estado Docente, mediante el cual está capacitado para formular y dirigir las políticas educativas mediante la construcción de edificaciones, mantenimiento, financiamiento y formación inicial y continua (Prieto Figueroa, 1987; Rojas, 2001); el gobierno revolucionario, en atención a los Artículos 3, 102, 103, 104 y 105 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela (1999) y Artículo 5 y 15 de la Ley Orgánica de Educación (2009), ha diseñado ciertos lineamientos atientes a cubrir déficit en los componentes de investigación y formación permanente, constituyendo una novedad cuya implementación, desarrollo y fortalecimiento conviene mirar con fines de describir y valorar ese desempeño a través de un registro etnográfico.

En efecto, desde el año 2014 la instancia hoy llamada Ministerio del Poder Popular para la Educación, MPPE, viene desarrollando en instituciones y circuitos educativos, que es de destacar que comprenden un área geográfica donde se ubican varias escuelas y liceos; allí han creado espacios de investigación y formación teórica-práctica denominados Centros Locales de Investigación y Formación Permanente, Clip.

Son la expresión local del Sistema Nacional de Investigación y Formación, iniciativa académica que surgió de los resultados de la Encuesta Nacional por la Calidad Educativa, la cual detectó la necesidad de desarrollar procesos de Formación de Formadores; siempre con fines de generar transformaciones positivas en los distintos planos de la existencia: personal, institucional, comunitaria del entorno de las organizaciones educativas y la sociedad en general, en el contexto de crear en Venezuela una nueva ciudadanía.

Tal transformación, se pretende desarrollar a partir de la práctica pedagógica adecuada a las demandas actuales, donde se impone la integración de la ciencia, la técnica y el humanismo como un todo que aporta el paradigma sociocrítico, fundamento de la Investigación Acción Participativa y Transformadora fundamentados en autores como Lerwing y Kemmis; así, este programa se inicia con la puesta en práctica de la Micromisión Simón Rodríguez, que después de algunas experiencias de egresar la primera y segunda cohorte de programas no conducentes a título y de IV nivel, ha pasado a ser parte de la recientemente creada Universidad Nacional Experimental del Magisterio Samuel Robinson.

La inquietud que anima esta investigación es, como ya se ha dicho aquí, «mirar» con fines indagatorios esa experiencia de investigación y formación permanente de los docentes en una institución determinada del Estado Lara, por medio del método etnográfico, interactuando con los actores sociales involucrados, advirtiendo que sin pretender generalizar en el estado Lara existen al menos 32 Clip, por ejemplo los que se desarrollan en el Liceo Bolivariano Lisandro Alvarado, Liceo Bolivariano El Ujano, Escuela Nacional Bolivariana José Gregorio Hernández, Federico Carmona y muchos otros.

Con lo que sigue nos ponemos en contacto, por así decir, con la comunidad de investigación que comparte la perspectiva teórica-metodológica que se ha asumido, lo que Rusque (2007) denomina «Cultura Etnográfica» dado que describen atributos en el marco de una interacción social de ciertos actores, realidad reconstruida de manera analítica a partir de los datos obtenidos de la observación, notas de campo y testimonios, entre otras fuentes; de esos productos de investigaciones similares se va nutrir la presente investigación al permitir valorar cómo se aborda el tema en estudio, sus métodos y técnicas, así como las reflexiones que fueron emergiendo de del proceso general de la investigación.

Se incluyen trabajos recientes en el campo de la investigación educativa bajo la perspectiva cualitativa y la metodología etnográfica en el ámbito nacional e internacional, con lo que por demás se está introduciendo un registro del estado del arte de la cuestión investigada, como bien dice Rusque (ob cit): «La investigación etnográfica en su desarrollo actual permite acceder a los otros ámbitos más específicos y localizados, aunque no ajenos a la antropología. Se trata de la etnografía científica y educativa y el trabajo en las organizaciones» (p. 52).

Es así como nos encontramos en lo internacional con Marín (2011), quien desarrolló una tesis denominada «Afecto con sentido, experiencia en el aula de adultos» de la Universidad de Manizalez-CINCE Medellín, Instituto Ferrini, de la sede Calasanz de Medellín; institución pionera en educación de adultos en Colombia, en la cual desarrollo un trabajo acerca del afecto. Luego estableció la relación entre: docentes, administrativos y estudiantes, hizo una triangulación a partir de su discurso social e individual, buscando la comprensión significativa de la cultura, la forma de interactuar las cátedras extracurriculares.

Para ello, como técnicas de recolección de información: la observación participante y no participante y la entrevista. El resultado evidenció la presencia de una cultura afectiva de carácter transformador que finalmente se visualizó en el desarrollo de aprendizajes significativos tanto en el estudiantado como en los profesores y el personal administrativo, resaltando cómo una investigación puede conllevar a transformar el entorno social e institucional y a las personas involucradas en el proceso de la acción educativa bajo teorías del aprendizaje novedosas.

Por otra parte, el trabajo citado aportó a la presente investigación las herramientas teóricas-metodológicas propias de la perspectiva etnográfica que nos ayudarán a comprender, de manera más clara, las situaciones que llevan al desarrollo de los CILP como parte del desarrollo de la investigación y la formación permanente en el Liceo Bolivariano Federico Carmona del Estado Lara.

También está la investigación de Garzón Chivivi (1998) titulada «Rezar, soplar, cantar. Etnografía de una lengua ritual», desarrollada en la comunidad Kamsá, ubicada Sibundoy, Alto Putumayo, Colombia, con el apoyo institucional de la Universidad Nacional de Colombia. Acota su autor que:

«El trabajo está estructurado en cinco partes. La primera corresponde al contexto social, histórico, cultural y lingüístico de la comunidad Kamsá. La segunda, es la caracterización de los médicos tradicionales en el Alto Putumayo y su constitución como sociedad de discurso. La tercera, tiene que ver con las características discursivas de la comunidad de médicos tradicionales del Alto del Alto Putumayo. La cuarta, es la descripción del evento comunicativo de la toma del yagé. Y la última parte es la presentación de las estrategias comunicativas presentes en el discurso de la comunidad de taitas» (p. 16).

El paradigma asumido por ese investigador, Garzón Chivirí, fue el cualitativo bajo la metodología etnográfica, donde según se cuenta rastreó:

«… las condiciones sociales y culturales, históricas y lingüísticas actuales de la sociedad Kamsá. Esta es el resultado de la información recogida en terreno en cuatro salidas de campo realizadas durante los años 1998 y 1999. Este trabajo estuvo apoyado por una revisión bibliográfica llevada a cabo en centros de documentación de Bogotá y Sibundoy. Se adelantaron encuestas y entrevistas con líderes de la comunidad y con algunas familias que permitieron indagar sobre aspectos sociales y lingüísticos. Se asistió y participó en eventos culturales y políticos (carnavales y reuniones de orden organizativo) y se compartió con varias familias durante la estadía en la región. Por otra parte, se realizó la recolección de un corpus lingüístico para dar cuenta del funcionamiento estructural de la lengua kamsá, el cual fue analizado durante la realización de la maestría en lingüística» (ídem).

Como reflexión final y provisoria Garzón Chivirí señala que propuso un lugar teórico para una lengua ritual donde coexisten mundos paralelos al que acceden sólo los chamanes con el concurso de una yerba que secreta sustancias psicotrópicas que alteran la percepción, el yagé, creador de la lengua de los espíritus que comunican saberes sagrados; uno de cuyos constituyentes es el silencio, principio de toda creación y origen de un pacto social que se renueva con la toma del yagé, que no puede comprenderse sino participando de las sesiones con los sabios de aquella comunidad. Por eso concluye que:

«He aprendido que el silencio es el principio de la creación. Que el secreto hace parte de un pacto social que se renueva en cada toma de yagé. He aprendido a tomar yagé, a contarlo. He creado mis metáforas, mis disonancias, mis acertijos y mis pinturas. También aprendí que las encuestas son un objeto distante, cerrado. Que los diarios de campo lo que articulan son un conjunto de emociones que van del encantamiento a la desilusión. Que la teoría sólo puede servir como herramienta de trabajo y no como entidad fija» (p. 153).

Este trabajo constituye un referente significativo para la presente investigación, sobre todo en lo referido a la metodología y las técnicas de investigación etnográfica, porque es muy descriptivo en ese sentido, por lo que su aporte representa una guía a seguir, aunque su tema de estudio sea diferente.

Ya en el ámbito nacional venezolano, Carreño (2012) la tesis doctoral llamada «El ser y el hacer del docente venezolano en el contexto de la educación bolivariana: paradigmas y realidades», de la Universidad Central de Venezuela; que se enfoca hacia el área de valores y complejidad, planteando que en el contexto de la Educación Bolivariana; la investigación que aquí se presenta tuvo como objetivo una aproximación teórica desde el ser y el hacer docente venezolano en el contexto de la Educación Bolivariana, siendo sus soportes teóricos el humanismo, la ciudadanía global y la acción comunicativa, entre otros.

La metodología se fundamentó en el paradigma cualitativo a través de una investigación etnográfica, siendo los informantes clave cuatro docentes del Liceo Bolivariano «Monseñor Francisco Miguel Seijas», ubicado en la población de Tinaquillo, Estado Cojedes; como técnicas de recolección, se emplearon la observación y la entrevista, cuyos resultados señalaron debilidades en el proceso de conducción del aprendizaje y discrepancias entre el ser y hacer docente respecto a los paradigmas humanistas de la educación, procediendo a elaborar la Aproximación Teórica al Ser y Hacer Docente en el Contexto de la Educación Bolivariana y a dejar como reflexión que hoy, cuando muchos docentes se limitan a cultivar sólo lo cognitivo, los conocimientos se reactualizan, los valores humanos, nunca.

A tales efectos la investigadora asume el currículo como: Las intenciones que reflejan el cómo, cuándo, con qué, de qué manera se desarrolla el proceso de enseñanza-aprendizaje en un contexto determinado, orientado por los fines de la educación y operacional izado en el diseño Curricular, a través de los proyectos institucionales, que están sumergidos en esta investigación; ya que al hablar del proceso de enseñanza y aprendizaje resalta el perfil propio del docente para llevar a positiva finalización esa tarea.

Además, no podemos dejar a un lado el hecho de que nos habla sobre los cambios que trae la nueva transformación curricular universitaria y eso está subrayada en un escenario social determinado en nuestro trabajo, lo cual nos ayuda a entender la necesidad de trabajar sobre el perfil que se hace necesario para asumir el reto de la transformación curricular.

Este trabajo nos ayuda a dar claridad acerca de la metodología utilizada en cuanto a corte etnográfico dado que pretende desentrañar significados, significaciones del comportamiento particular de un grupo humano, educativo en nuestro caso.

Otro antecedente de cómo se realiza investigación en educación media se presenta en la tesis de Hernández (2015), de la Universidad Carabobo, titulada «Cultura educativa y reproducción social en los docentes y estudiantes en la educación media», plantea como propósito generar un constructo teórico de la cultura educativa y reproducción social en los docentes y estudiantes en la educación media venezolana, que permita la comprensión del comportamiento social. Está enmarcada dentro del paradigma cualitativo, fenomenológico, mediante el método interaccionismo simbólico.

Las técnicas para la recolección de información utilizadas fueron notas de campo, observación participante y entrevistas a profundidad, el soporte teórico lo constituyó la reproducción social de Bordieau, la intersubjetividad de Shutz, la estructuración de Giddens y la Acción Comunicativa de Habermas. Se consideraron (estudiantes/ docentes) como informantes claves, especiales y representativos, la interpretación se realizó a través del análisis de contenido de la información suministrada para así dar mayor validez y fiabilidad a la investigación.

A tales efectos la investigadora asume el currículo como: Las intenciones que reflejan el cómo, cuándo, con qué, de qué manera se desarrolla el proceso de enseñanza-aprendizaje en un contexto determinado, orientado por los fines de la educación y operacionalizado en el diseño Curricular, a través de los proyectos institucionales, que están sumergidos en esta investigación. Ya que al hablar del proceso de enseñanza y aprendizaje resalta el perfil propio del docente para llevar a positiva finalización esa tarea, además no podemos dejar a un lado el hecho de que nos habla sobre los cambios que trae la nueva transformación curricular universitaria y eso está subrayada en un escenario social determinado en nuestro trabajo, lo cual nos ayuda a entender la necesidad de trabajar sobre el perfil que se hace necesario para asumir el reto de la transformación curricular.

De acuerdo a lo anteriormente mencionado Matos (2.000), nos dice que:

«…el docente es un mediador no de manera declarativa; de hecho, debe asumir el reto de involucrarse en la construcción del conocimiento en el aula. Lo importante no es necesariamente cuánto se sabe, pero que ello descanse en una plataforma teórica-conceptual, psicológica y filosófica para sustentar la práctica pedagógica…» (p. 12).

Por lo que nos deja claro que es importante que el docente es el responsable de su propia formación pues en la medida que adquiere conocimientos debe tener la claridad de repensar, retroalimentarse y ser proactivo al momento de elevar su calidad de praxis educativa en los diferentes entornos.

Por otro lado, González (2.000), nos plantea que:

«…dentro de la praxis pedagógica integradora, el rol del docente debe ser percibido como promotor del aprendizaje, motivador y sensible, por lo que el docente debe conocer y respetar el estado evolutivo del joven y facilitar situaciones que inviten a la búsqueda constante del conocimiento. Se concibe como modelo y líder, centrado en sus alumnos como sujetos de aprendizaje…El rol del docente interactúa con dos elementos más para formar una tríada interpretativa: docente – alumno – saber…» (p. 45).

Lo cual nos lleva a pensar que en la medida de ese avance en el conocimiento nuestro quehacer se hace más palpable en la forma como instruimos hacia el universo del conocimiento por vías distintas a las aprendidas hasta hoy.

Estas interpretaciones de los autores Matos y González, conducen a entender el rol del docente como factor de construcción de conocimientos y de experiencias. Por ello se dice que el perfil docente conlleva un conjunto de acciones que le permiten determinar un desempeño conforme a sus condiciones sociales, políticas, económicas e ideológicas. Es válido pensar no solo que es, sino como hacerlo y con qué hacerlo para que su praxis sea eficaz.

En el proceso investigativo de enfoque cualitativo los estudios se hacen a partir de las realidades observadas , las cuales requieren de los investigadores ser interpretadas, dando paso a nuevas propuestas que ayuden a accionar dichas realidades, cada investigación tiene una serie de estudios previos que ayudan a comprender y tomar decisiones sobre las realidades estudiadas , por lo que en este momento presentaremos parte de esos estudios previos para darnos una visualización del tema planteado y que servirán de soporte a la investigación.

Es por eso que a la luz de la Constitución de La República Bolivariana De Venezuela (1999), en el Capítulo VI De los Derechos Culturales y Educativos, en el artículo 104. Nos dice que «La educación estará a cargo de personas de reconocida moralidad y de comprobada idoneidad académica. El Estado estimulará su actualización permanente y les garantizará la estabilidad en el ejercicio de la carrera docente, bien sea pública o privada, atendiendo a esta Constitución y a la ley, en un régimen de trabajo y nivel de vida acorde con su elevada misión. El ingreso, promoción y permanencia en el sistema educativo, serán establecidos por ley y responderá a criterios de evaluación de méritos, sin injerencia partidista o de otra naturaleza no académica» dejando claro que el Estado es garante de esta formación intelectual y moral.

Dando paso a organizaciones del Poder Popular, a fin de desarrollar los propósitos del subsistema de educación media en el ámbito nacional. Entre las atribuciones de esta nueva instancia, se destaca que podrá establecer mecanismos de participación protagónica por parte de las comunidades universitarias para la transformación de las instituciones del sector, de sus estructuras y de sus programas en la cual la educación se rige por los principios de autonomía, carácter público, gratuidad, democracia participativa y protagónica, calidad, pertinencia, innovación, inter e intraculturalidad, universalización, universalidad, territorialidad, diversidad, igualdad y propugna la conducta ética como sentido del bien común.

La formación del docente es entonces una tarea fundamental del cambio educativo la cual debe partir del reconocimiento de éste como sujeto, con sus potencialidades y limitaciones, y avanzar hacia un diseño de aprendizaje que parta del aula, del estudio de la realidad concreta en la cual se desenvuelve el maestro, para contribuir a disminuir la brecha entre formación, investigación y acción transformadora educativa

Ahora bien, esta es una aproximación a aquellos aportes teóricos que pudieran respaldar el análisis que más adelante nos disponemos a realizar y que pueden afianzar el carácter científico a este trabajo de investigación, más aun si se trata de una investigación que involucra la realización de una fenomenología para comprender desde las perspectivas de los docentes, desde sus vivencias, un fenómeno complejo, como el cambio de un currículo a otro, que rescata aspectos nuevos y modernos a la vez que innova en la relación docente-estudiante, que a fin de cuentas es el punto principal de la educación.

Por lo tanto, necesitamos educadores que entiendan la enseñanza como una actividad práctica y ética, cuyo fin sea la formación de ciudadanos responsables como seres biológicos y culturales constructores del futuro. La docencia es por esencia una profesión exigente, en especial, la docencia en la educación obligatoria. Ahora sabemos que lo importante no son las conductas observables sino el ambiente para el aprendizaje, las interacciones entre los integrantes de la comunidad escolar, el significado de la escuela para los alumnos y sus representantes, la pertinencia de los contenidos para comprender la vida que llevamos y sus posibilidades de cambio.

El aprendizaje no es sólo razonamiento sino mucho sentimiento, es parte del «emocionar» como diría Maturana (1999), de allí que la tarea del Maestro será «crear para el niño un espacio racional en el que puedan expandir sus capacidades para la acción y la reflexión» (p 22). Un educador creativo debe disfrutar de la compañía de niños y jóvenes, comprender, identificarse con sus inquietudes, sentir agrado por ser un modelo para las futuras generaciones.

Creer en la importancia de la escuela y de los docentes en la actual sociedad venezolana y en la formación de ciudadanos responsables para la construcción del futuro de la nación, somos los llamados a construir la base de transformaciones de la sociedad venezolana.

Como nos dice Davenport y Prusak, (2001)

«La gestión del conocimiento es un proceso lógico, organizado y sistemático para producir, transferir y aplicar en situaciones concretas una combinación armónica de saberes, experiencias, valores, información contextual y apreciaciones expertas que proporcionan un marco para su evaluación e incorporación de nuevas experiencias e información.» (p. 10).

Por lo que en ese ritmo las experiencias hacen parte de esa formación interactiva que nos permite ir más allá de un simple contenido, lo cual es llevado a partir de esas políticas que buscan en el nuevo ciudadano hacer haciendo, y por lo tanto en el currículo nacional bolivariano se inicia dicho proceso en la primaria , pero es en la secundaria en el tercer año que se logra un realce de esa generación de conocimiento, llevado a través de las mallas curriculares, hacia el pensamiento crítico, científico e innovador, si nos adentramos en las políticas educativas y desarrollo tecnológico están dados para que el joven al salir sea un ser activo socialmente participante y generador de propuestas investigativas.

Obviamente dependemos mucho de ese perfil que hemos planteado en este estudio, porque es quien lleva la direccionalidad de ese nuevo ciudadano para que sea capaz de generar unas nuevas políticas educativas, sociales e innovadoras en todos los aspectos de nuestra vida.

Es así, como la gestión del conocimiento permite no solo a las organizaciones sistematizarlo y organizarlo en función de sus necesidades, sino también orienta las competencias y capacidades de las personas, en las reflexiones realizadas a partir de los estudios de Nonaka y Takeuchi (1999), se ha gestado toda una visión paradigmática que las Ciencias Administrativas y Gerenciales denominan «Gestión del Conocimiento».

En este sentido, el presente trabajo intenta desarrollar reflexiones en torno a la Gestión del Conocimiento desde el paradigma occidental y sus implicaciones en las organizaciones venezolanas, teniendo presente el significado de trabajo y empleo como elemento cultural., dicho trabajo nos aporta elementos de análisis facultad del ser humano para comprender por medio de la razón la naturaleza, cualidades y relaciones de las cosas.

El conocimiento es la reunión de experiencias vividas asertivamente, como nos dice el texto sobre el conocimiento «la Aprehensión intelectual de la realidad o de una relación entre los objetos, facultad con la que nos relacionamos con el mundo exterior», dicho de otra manera es el momento en que nuestra mente da a luz esa percepción del mundo tangible , de lo que vemos, pensamos u oímos y lo volvemos científico en la medida que no es fruto de la especulación sino del desarrollo crítico, consciente e innovador en nuestro caso de los espacios educativos, los cuales se convierten en laboratorios de ideas en servicio del bien común y como primer abordaje a una comunidad científica que nos puede permitir reflexionar nuestras realidades

Es así como la adquisición del conocimiento está en los medios intelectuales a partir de la observación generando capacidad de juicio lo cual nos debe llevar a incrementar cambios cualitativamente hablando en pro de una profundización en la calidad educativa y por ende una mejor calidad de vida, hacia un elevado capital intelectual que implica transversalidad con lo que sabemos de forma ética y responsable.

A su vez, el conocimiento científico no se limita a describir hechos y fenómenos de la realidad, sino que explica mediante la interpretación lo que podría afectar al ser cognitivo de forma más elaborada, regresándolo de forma objetiva y mediante el desarrollo de conocimientos previos y reelaborados en la reflexión de la praxis misma.

Martínez (2007) dice que «si lo que se desea es descubrir las relaciones que conforman un realidad social» como es la puesta en práctica del sistema de investigación y formación del magisterio, en la institución educativa se partirá de la realidad natural, situaciones representativas, y por ello en la investigación es importante ubicar la metodología, pues ella es la columna vertebral , en este caso específico tomaremos los elementos de la etnografía como estilo de vida de un grupo de personas,

Sostuvo nuestra estudiante que: «Es así, como nuestro enfoque es cualitativo, en el contexto del L.B. Federico Carmona, a partir de una población de docentes y directivos, con los cuales desarrollaremos la descripción de los procesos de enseñanza aprendizaje, procesos de investigación y formación permanente con lo cual se diagnosticará el impulso de las políticas del Ministerio del Poder Popular para la Educación, los lineamientos u orientaciones sobre transformación curricular para educación media, Currículo Nacional Bolivariano (2009), el reconocimiento de los CLIP como propuesta de generación de conocimiento a través del registro de experiencias relevantes, la caracterización de la apropiación de los conocimientos generados y su pertenencia».

Observaremos desde la metodología etnográfica, según Martínez (2007) que «los instrumentos de recolección de información» (p 62) permite familiarizarnos a través del registro de campo, y «la entrevista como instrumento de diálogo para hacer hablar libremente la experiencia vivencial» (op cit), ello nos llevará a describir los procesos de la enseñanza aprendizaje adquiridos dentro de la institución.

De esta manera, lograría describir las fortalezas y debilidades de los Sistemas de Investigación y Formación Permanente del Magisterio (SNIFPM), su implementación y el perfil que debe poseer los docentes para este quehacer pedagógico, como nuevo reto de transformación curricular y poder dar impulso a las políticas de generación de conocimiento interactivo, científico, investigador, creador e innovador en esta modernización educativa.

REFERENCIAS

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Constitución de la República Bolivariana de Venezuela (1999). Gaceta Oficial de la República Bolivariana de Venezuela, 5453 (Extraordinario) marzo 24, 2000.

Corbín, J y Straus, A. (1998). Bases de la investigación cualitativa. Técnicas y procedimientos para desarrollar la teoría fundamentada. Facultad de Enfermería de la Universidad de Antioquia, Colombia: Contus Editorial Universidad de Antioquia.

Freire, P. (2008) Pedagogía de la autonomía. Saberes necesarios para la práctica educativa. Madrid, España: Siglo XXI.

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Matos, F. (2000). Modelo de Construcción del Conocimiento en el Aula para una Educación Integral. Tesis Doctoral no publicada. Universidad Santa María.

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Martínez, M (2007) La investigación cualitativa etnográfica en educación. México D.F., México: Editorial Trillas.

Maturana, H. (1999). Transformación en la convivencia. Santiago de Chile: Dolmen.

Ley Orgánica de Educación (2009). Gaceta Oficial de la República de Venezuela, Gaceta Oficial No 5.929 (Extraordinaria), agosto 15, 2009.

Universidad Pedagógica Experimental libertador (2006) Manual de trabajos de grado, de especialización y maestría y tesis doctorales. Caracas: FEDUPEL.

Rojas, R. (2001) Temas de Historia Social de la Educación y la Pedagogía. Valencia, Venezuela: Universidad de Carabobo.

Rusque, A. M. (2007). De la diversidad a la unidad en la investigación cualitativa. Vadel Hermanos Editores: Venezuela, Caracas.

Prieto Figueroa, L. B. (2006). El Estado Docente. Colección Claves de América. Ministerio del Poder Popular para la Educación. Caracas, Venezuela.

Fuente: https://www.aporrea.org/educacion/a284718.html

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Juventud, rock e imaginario social crítico en Latinoamérica y el caribe, 1950 y SS

Por: Luis B. Saavedra M

Nos pidieron un texto «académico» pero como no gustó el «estilo» o que su contenido no se adecuaba a lo demandado, lo ofrecemos sin embargo por este medio para distracción de cualquier «desocupado lector» como decía el historiador Manuel Caballero (Barquisimeto, 1932-Caracas, 2010); de entrada advertimos que su estructura es desigual pero agradable, tal vez porque fue escrito «a la diabla» (o forma de escritura automática) saliendo lo que a continuación se ofrece, así evito además que luego vayan a plagiar de todas formas el texto enviado por incauto, revelando al final la inmensa riqueza cultural de esta región que adapta a su modo expresiones artístico musicales foráneas y las «hace propias» expresando los «modos de vida» que nos caracterizan entre lo que no es menos nuestro amor a la libertad e indignación por la injusticia.

I

El siglo xx desde su medianía, 1950 en adelante, se puede decir que es el siglo de la cultura de masas. Su principal factor viene a ser la televisión. Este medio o instrumento impulsó un fenómeno de particular interés, a saber, la estética visual, con el sonido de armonías precisas de altos decibeles en la guitarra eléctrica y una lírica recitada con desenfado que, a su vez, representa una proposición nueva sobre el hombre y la mujer en el tiempo contemporáneo y actual, cuyo tejido social fue devastado ácratamente, tanto con la II Guerra Mundial como con los demás conflictos bélicos llamados regionales.

En ese contexto la juventud buscó reconfigurar sobre nuevos planos filosóficos la existencia. Su ser, sus valores y organización social e institucional, esto es, busca nuevas claves de razón práctica. Todo lo cual es recogido con bastante fidelidad por la Carta Fundacional de las Naciones Unidas y la Declaración Universal de los Derechos Humanos, además la canción «Imagina» de Los Beatles, entre otras recogió ese nuevo imaginario social crítico con una propuesta de paz universal.

Sin embargo, la cultura de masas es también la de la publicidad de base psicológica conductista. Esto es, que modifica conductas, genera necesidades, sensaciones y expectativas que supuestamente encuentran su «realización plena» en el mercado de consumo de cualquier tipo de productos industriales, materiales y simbólicas. Una de estas es la música, que según Kant como tal tiene un fin en sí misma: reflexionar, elevar el intelecto, contemplar o acompañar diversas actividades productivas, comerciales, políticas, reconstruir eventos épicos o bélicos. Como también entretener. Evadirse del mundo harto conflictivo y/o recrear imágenes fantasmagóricas, ya que recordando a Nietzsche un mundo sin música sería monstruoso, aunque el bueno de Platón pensaba lo contrario, a saber, que los poetas no hacen sino recrear la realidad del mundo, pero no la describen de manera precisa en sus leyes fundamentales (República, libro X). Sin embargo, ya en su tiempo el teatro y la poesía interpretaban dimensiones muy precisas del universo moral mejor que cualquier otra vía del conocimiento.

En ese sentido, el rock constituye un género de nuevas estéticas y con múltiples funciones psicológicas, sociológicas y hasta políticas, reafirmación de identidad personal, formación de subculturas, crítica social o simplemente hecha por gusto y fines mercantilistas (mercancía para las masas). Al respecto el investigador español-francés Ignacio Ramonet (en entrevista dada en 1993) acota que de ello se pudiera derivar una cierta teoría social de alcance medio sobre la cultura de masas: la que describe un modo de vida urbano-industrial occidental; sobre todo a partir de la semiótica de espacios como «La estética de los noticieros de televisión», donde el espectáculo es un tópico fundamental «con sus ficciones de masas en el cine y la televisión en la década de 1980» (p. 21) que definen un estilo de vida: el de los famosos como ideal a seguir.

Así, la juventud después de la II Guerra Mundial y dese los años de la década de 1960 comenzaron la construcción de una nueva identidad juvenil que tomó como factor determinante la estética, ética y política del rock. Esto es, como filosofía de la práctica. Muy en relación a lo que Villena (1975) sugiere como una operación de doble vínculo. A saber, la de negación y afirmación al propio tiempo. En este caso, negación de la cultura formal tradicional pero como «afirmación de valores opuestos o nuevos» (p. 11).

Valores políticos, morales y estéticos-literarios que aspiran superar ciertas nociones muy ancladas del cientificismo de tradición positivista o empírico-analítico, junto con el taylorismo de la razón instrumental de las organizaciones modernas, que padecen el efecto del reduccionismo antropológico: la del hombre organizacional o de masas; una visión fragmentaria de la realidad social y humana, por la que todo se reduce al pragmatismo, la utilidad marginal de la ganancia monetaria, bajo lo cual se esconde el egoísmo como pulsión básica. El puritanismo, la moral familiar y la piedad fingida, son sus otros elementos subrepticios pero que esconden el prejuicio de la imposición de gustos de la élite, impuestos como «verdades únicas». Al respecto, de Villena (1975) sostiene que:

«Delinear el origen del actual estado de cosas del mundo occidental, supondría investigar raíces históricas muy profundas. Y no es este el propósito de este libro. Supondría (digamos de forma muy somera) mencionar la concepción cientifista del mundo, que se inauguró casi con el Renacimiento. Y el cientifismo, aunque supone una paradoja, puede estar muchas veces reñido con la ciencia. Y mencionar también la tradición puritana y mercantilista, que tantas veces se ejemplifica con estampas de la Inglaterra victoriana, o con alfombrados salones de la próspera burguesía de tantas ciudades (incluso españoles) de finales del siglo XIX. Supondría, además, mencionar la continua insensatez de la guerra. Pero con esto estamos ya en realidades más cercanas. El terrible cataclismo de la II Guerra Mundial, supuso, por un lado, la inauguración de buena parte de las tensiones actuales (terror atómico, política de bloques, etc.), pero supuso, por otro, el primer embrión de desengaño, y la primera sacudida para algunas conciencias» (Pp. 11-12).

Un ejemplo de lo anterior dicho sobre el sacudimiento de conciencias y la cultura de masas, sus desafíos estéticos y crítica en sus proposiciones viene a ser Mercury Quenn, una estrella del rock que en 1981 presentó una serie de cuatro conciertos cuyos videos fueron presentados del 27 de julio al 2 de agosto de 1991 en la casa Rómulo Gallegos, en Caracas, en un evento denominado «Tertulia Queen». Estos cuatro conciertos fueron: We will rock you, rock in río, magic queen live in Budapest, rock very magic live at Wembly’ 86.

Según Alfonso (1992) al comentar esa actividad aprecia que tales conciertos: «Todos con excelente imagen y sonido. El primero resume de algún modo la gira europea del grupo en 1981, año de las presentaciones en los países latinoamericanos» (p. 81). Por su parte, la alusión a la estética que subvierte lo establecido se destaca cuando Freddie canta «love of my life», «We will rock you» y «We are the champions», en especial esta última composición cuyas estrofas «Ustedes me dieron fama, fortuna y todo lo demás/ Se los agradezco», hace delirar a la audiencia ya ambientada con la invitación de Freddie a quitarse las ropas, tras estos otros versos: «He venido a venderles mi cuerpo/ Les puedo mostrar buena mercancía», de la canción «Le me entertain you» (ídem).

II

Todo esto no es sólo una puesta en escena. Es una metáfora, la de la desnudez con fines establecer un rompimiento de las normas cívicas y morales del establishment en lo físico y moral; una operación realizada desde la afectividad humana y las estructuras cognitivas, la emoción y la razón. Conforma una experiencia sensible y de ahí los conciertos para tal fin constituyen performance única, de sonido, interpretación en vivo y videos que envuelven los sentidos al extremo, en el límite entre lo apolíneo y lo dionisiaco.

En ese orden los conciertos de este género musical son los herederos de los iniciáticos espectáculos de Woodstock 3 días de música por la paz (1970-71), de la época que Quenn llama «The Fundations» y que comprende los períodos La banda, Primera Época, Realizando los Videos y En el Estudio, a lo que Alfonso (1992) agrega lo siguiente: «Desde la irrupción de la Queenmanía en su primer Tour japonés en 1974 hasta la presentación de la banda al frente del Festival del Rock más largo del mundo, 35 mil personas en Río de Janeiro, 1985, este volumen sigue el desarrollo de Queen como banda de conciertos con películas de shows nunca antes vistos» (p. 82).

Es la realización completa de la cultura de masas que define perspectivas en varios planos del conocimiento racional abstracto en la episteme moderna y la experiencia emocional ética y estética, una especie de umbral entre la vigilia y el sueño o la ensoñación, lo que hace parte de la creación poética y literaria en general, ya que como sostiene Linton (1959):

«Puesto que los demás individuos constituyen un elemento del medio ambiente del hombre, las condiciones que pueden conducir al registro de esta necesidad son casi continuas. Por otra parte, los seres humanos nos encontramos tan sujetos y condicionados por la presencia de los demás que tenemos una poderosa propensión a proyectar este factor humano hasta sobre las situaciones en que dicho factor no existe» (p. 99); de donde se tiene que la cultura desempeña un importante papel en la constitución de la personalidad, siempre diversa según los patrones fundamentales, por eso concluye el referido autor que:

«Todos los antropólogos que han llegado a conocer íntimamente los miembros de las sociedades no europeas están de acuerdo, en lo fundamental, sobre ciertos puntos, que son: 1) Los patrones de personalidad difieren según las sociedades; 2) los miembros de toda sociedad siempre muestran una gran variabilidad en cuanto a personalidad; 3) en todas las sociedades se encuentran casi al mismo campo de variabilidad y casi los mismos tipos de personalidad. Aunque los antropólogos basen estas conclusiones en observaciones informales, parece que los resultados de ciertas pruebas mentales objetivas las corroboran. Las series de Rorschach, procedentes de diferentes sociedades, revelan patrones distintos para dichas series, consideradas como todos. Pero también revela un amplio campo de variabilidad individual dentro de cada serie y bastante yuxtaposición entre ellas. Aun careciendo de esta prueba, el consenso de opinión de los expertos en estas cuestiones no puede desecharse fácilmente. A falta de informaciones más completas y exactas, está justificado aceptar estas conclusiones como ciertas y tomarlas de punto de partida para nuestra investigación del papel que desempeña la cultura en la formación de la personalidad» (Pp. 132-133).

La distinción o separación como también dice Linton (ob cit) entre el temperamento constitutivo natural y la personalidad adquirida mediante el proceso cultural parece ser muy tenue, pero constituye una «configuración dinámica cuyas partes guardan una relación recíproca tan íntima, en tal interacción constante, que es muy difícil saber dónde se encuentran las líneas de demarcación» (p. 92).

III

En secciones previas se ha intentado realizar una aproximación general al asunto que se anuncia en el título de este texto, a saber, la juventud, la música rock y la construcción personal y social de la identidad cultural del segmento juvenil en el tiempo histórico que va de mediados del siglo XX a lo que va del XXI en Latinoamérica y el Caribe de habla hispana específicamente, aunque se hacen las conexiones a que haya lugar con el taxón inglés o francés por ser raíz lingüística de la expresión musical del rock desde los primeros años de la década de 1950. El propósito viene a ser: comprender la relación entre la cultura regional y nacional, en tanto que subcontinente conformado por una pléyade de estados nacionales en la mediana y la larga duración, que de acuerdo con Braudel (1978) es el tiempo cultural, por ser fenómenos que impactan la conciencia de las personas y sociedades en períodos de cincuenta o más años, que van calando de forma casi imperceptible.

En la elaboración de esta nueva sección se procede, como es propio del discurso histórico y sociológico, a saber, describir narrativamente los procesos socioculturales a que se aluden de manera concreta; en particular, la producción de bienes culturales: piezas musicales, su circulación y consumo, proceso típico de los productos culturales (Rojas, 1995) en el marco de la industria cultural en la trama de un mundo globalizado, potenciado por los medios de comunicación que han convertido al todo el mundo en una aldea de gustos similares (Mcluham, 1963); axioma que habría de cumplirse aún para las creaciones inicialmente contraculturales pero luego son asumidas por las estructuras formales del marketing comercial. Es este un asunto complejo, como reconoce tempranamente Linton (1959) en una obra considerada ya clásica en estos menesteres denominada «Cultura y personalidad» (Breviarios EFE 145).

IV

Es un tema difícil y de muchas aristas porque, en sus palabras, se trata de estudiar precisamente las interrelaciones sutiles entre el individuo, la sociedad y la cultura que textualmente:

«… es el proceso más reciente que ha logrado el hombre en su viejo esfuerzo de entenderse a sí mismo. Este estudio versa sobre el punto de contacto de tres antiguas disciplinas científicas, a saber: la psicología, la sociología y la antropología. Cada una ha seleccionado una serie determinada de fenómenos, ha desarrollado sus propias técnicas y actualmente puede exhibir un buen número de resultados positivos. Sin embargo, cada vez tórnase más evidente que existen ciertos problemas cuya solución no puede darla una sola de estas disciplinas. Se ha utilizado deliberadamente la expresión «ciertos problemas», pues toda disciplina abarca un amplio campo y se ocupa de problemas de muy diversa índole y magnitud» (p. 11).

En verdad estudiar la relación música rock, cultura e identidad en la juventud comporta el compromiso de abordar aspectos de la psicología de la personalidad en sentido estricto peor es un objetivo que escapa a la presente investigación. Se menciona solo para dejar constancia de la complejidad del asunto sobre el que discurre en este informe de investigación, cuestión a la que se refiere Linton (1959) como parte de la «… complejidad de los problemas planteados y de la necesidad de exponer con más claridad algunos de los conceptos que fue necesario emplear para tratarlos» (p. 9); porque, en sí, se trata de describir las relaciones de mutua dependencia entre el individuo, la sociedad y la cultura (ob cit., p. 11), porque los estudios culturales se pueden considerar interdisciplinarios y, en consecuencia, se hallan ligados a puntos comunes entre varias disciplinas propias de las ciencias humanas y sociales; por lo que se requiere de la colaboración de los investigadores, sus teorías, métodos y técnicas al describir y comprender la conducta humana desde varias perspectivas. Por eso el autor que hasta ahora se ha seguido aquí concluye que:

«Los estudios de los antropólogos que versan sobre el proceso y la integración de la cultura han llegado hoy a tal punto que ya todo adelanto requiere la utilización de los descubrimientos de la psicología de la personalidad. Toda sociedad participa de la cultura, la perpetúa y modifica; pero, en último análisis, toda sociedad no es sino un grupo de individuos. Estos son los que constituyen la incógnita que las técnicas antropológicas no pueden resolver por sí solas» (ob cit., p. 12).

La cultura venezolana, latinoamericana y caribeña se desenvuelve en ese contexto y ha sido abordada por autores de la región desde diversas perspectivas teóricas-metodológicas y en épocas también diferentes pero que sin embargo mantienen una continuidad temática, a saber, el asunto identidad personal y colectiva a partir de la descripción geográfica e histórica de la conformación como pueblos indo-americanos, lo cual ha dado lugar a su vez, a creaciones originales en las bellas artes conjugando elementos disímiles, síntesis abigarrada de la totalidad concreta que es la dinámica de «los hombres en el tiempo» (Bloch, 1986).

Cronistas de Indias con su trasunto de mentalidad medieval que miraron con ojos europeos el Nuevo Mundo, como reconoce Uslar Pietri (1998) en su «Globo de colores», memorialistas y anticuarios con su perspectiva nostálgica, poetas de florida imaginación, ensayistas de sutiles requiebres argumentales e investigadores de modernos métodos fenomenológicos-hermenéuticos, etnográficos, histórico-crítico, documental y diseño no experimental y la miríada de teorías literarias; sin olvidar los aportes de quienes ejercen el periodismo cultural en páginas evanescentes de los diarios que reseñan eventos y/o hacen crítica de las pocas, continuas o discontinuas actividades artísticas, publicaciones periódicas, libros y música que recrean el mundo del espíritu, conforman un universo de particular significación en el campo de las representaciones y cuyo mayor instrumento de acción ha sido la producción artístico cultural.

Al respecto Barzun (2005) en su monumental «Del amanecer a la decadencia. Quinientos años de vida cultural en Occidente» (Taurus Historia), al referirse a la creación cultural en la transición del medio evo a la modernidad, su reproducción y circulación en Europa, acota que:

«Ansiosas de novedad en todas las cosas, confiadas de poseer enormes cantidades de conocimientos nuevos, orgullosos de sus nuevos métodos tanto de trabajo como de otras cosas, las generaciones humanistas, armadas de la imprenta, se aprestaron a educar al mundo en todas las artes y las ciencias. Desde la anatomía a la aritmética, desde la pintura a la metalurgia, las imprentas no cesaban de emitir tratado tras tratado. Cuanto más tardía la fecha, menor la probabilidad de que estuviera en latín; la lengua común de cada país era más fácil para los impresores, y el público lector no era ya exclusivamente clerical» (p. 121).

Parte de tal situación cultural fue introducida al Nuevo Mundo Hispanoamericano y en la medida que se amplió el proceso de conquista y colonización también se profundizó en los elementos conformantes de lo que algunos autores como Fagúndez y Marcano (2015) en el opúsculo «Simón Bolívar 1815: Carta de Jamaica» (Ediciones Monte Sacro) dan en llamar las antinomias de los movimientos colonizadores e independentistas, cuyo debate va a estar en el mundo de las ideas e imaginarios que definen representaciones sociales de sujeción a la metrópolis española o libertad en las instituciones o identidades, que van a calar hondamente en «… toda la Sur América» (p. 11); en tanto que nuevo espacio de alteridad o de lo otro-nuevo cuya imagen es la cultura transicional entre la continuidad y la ruptura, en consideración a las condicionantes geo-históricas concretas y/o particulares que definen tipologías específicas, que en general son recogidas en creaciones literarias en diversos géneros.

Por ejemplo, las tesis del antropólogo inglés Peter Wade, autoridad en los estudios culturales en Latinoamérica y el Caribe hace una aproximación crítica sobre el dilema «colonialidad» del pasado y el presente; pero eventualmente por ello mismo se pudiera pensar si estamos cayendo en la falacia de autoridad, nos preguntábamos cuando seguíamos la escolaridad del Doctorado en Cultura Latinoamericana Y Caribeña en la UPEL-IPB, que contrario a lo que algunos piensan, si es que piensan, también se realizan estudios críticos; además, si no constituía un precario expediente echar mano de grandes «Popes» del extranjero cuando se quiere examinar cuestiones de cultura e identidad de América Latina y el Caribe. ¿Es que no hay autores como José Martí en su obra «Nuestra América» que reflexionan con sobrada pertinencia acera de los procesos conformantes de nuestras patrias mestizas? ¿O como canta el gran Darío que rezan a Jesucristo y hablan español? ¿Siempre hay que pagar tributo al eurocentrismo?

Es este el entorno actual polarizado la academia universitaria no ha escapado a ello, si no que al contrario suele ser un ambiente entrecruzado de susceptibilidades y pigmentado de ideologías tenidas por criterios científicos; no todo es malo, sin embargo. Así, se ha establecido, andando el tiempo, una amplia amalgama sincrética pluri y multicultural, qué antes que ser ideología o falsa conciencia y mundo fantasmagórico que oculta desigualdades de índole económico y social, representa un factor identitario y de identidad. En todo caso, ¿cómo leer estos autores que se introducen en el ambiente socio-cultural de América Latina y el Caribe sin genuflexión, como decía Domingo Alberto Rangel que es propio de aquellos indianos que aún tienen el alma sumida en el fango del neocolonialismo?

¿Autores como Wade, tal diría Alexander Moreno, qué tipo de actividad intelectual realizan? ¿Hacen ciencia o ideología? Si es ciencia o ideología, ¿al servicio de quién o quiénes está? En el contexto de los estudios avanzados autores como Wade ciertamente no se deben ignorar, pero sus tesis no cabrían tomarse al modo de verdades reveladas desde la mentalidad euro céntricas, si se considera que la ciencia constituye un saber ampliamente socializado en las comunidades de investigación, por eso en este texto al final se deja abierta la posibilidad de que estas inquietudes no podrían ser sino parte de una aproximación personal y una apuesta nuestra con fines de impulsar la discusión.

Decíamos que este ensayo breve, «como la clara luz de los faroles» (Williams Ospina, dixit), se construyó como participante de la cátedra en el ya mencionado programa doctoral conducida por el Profesor Dr. Luis Paradas, a quien queremos hacer reconocimiento por su buen tino para procesar las diferencias; se propone examinar una tesis del antropólogo inglés Peter Wade acerca del mestizaje, entendido como una especie de parapeto o mampara ideológica para ocultar las diferencias étnicas, en el marco jurídico-político de los estados nacionales de la repúblicas liberales; y se aborda ello desde la perspectiva de la historia de las mentalidades y las ideas, corrientes que abarcan imaginarios sociales y determinan conductas ceñidas a los valores fundamentales del hombre y la mujer en lo moral y civil, base de la actividad socioeconómica y cultural.

Esa mampara ideológica involucra actitudes antagónicas (neocolonial y/o autonomista) que influyen en la comprensión e interpretación de los procesos históricos, demográficos y étnico culturales que establecen ontoguiaturas (Alexander Moreno, diría), con elementos físicos y espirituales intangibles. Todo lo cual se definen y expresan en las formaciones económica-sociales, con sus particulares modos de vidas (tradicionales y modernas), que se yuxtaponen con planos referenciales dispares. Pero persisten ambas en un mismo tiempo y espacio. Aunque un modo de vida, el más fuerte y dinámico, suele imponerse por sobre el otro. Lo anterior algunos autores como Wade consideran que ese estado de cosas es signo de contradicción, lucha y división social.

El antropólogo inglés, reconocido académico de los estudios undergaound acerca de la relación de las etnias en América Latina y el Caribe en los procesos conformantes de los estados nacionales, cuyo factor fundante viene a ser el pueblo mestizo, junto a los fenómenos de la cultura, donde aún se habla español y se reza a Jesucristo (Rubén Darío, dixti); en el marco de lo que Savater (1995, en El Valor de Educar) denomina complejos culturales. Que, con su lengua, lenguaje y los intercambios simbólicos de la psicología y actitudes colectivas, (con el resto de las raíces étnicas), hacen que a pesar de la diversidad de las regiones y climas haya una cierta unidad.

A pesar también de que han sido las élites liberales de mentalidad etnocéntricas las que han conducido los procesos económicos y políticos; debajo de los cuales subsiste la más variada diversidad étnica y socio-cultural, lucha de clases y hasta racismo; de esto último se ocupa el susodicho académico Wade; quien parece que no tiene más oficio que molestar las buenas conciencias de nuestras élites y sacudir a las capas medias profesionales en sus orgullos banales, poniendo en alerta al campesinado, indígenas y negros. Pues, hace ver con facilidad que, en nuestras flamantes democracias modernas, con ciudades principales y risueñas puede haber prácticas de racismos soterrados. Verdaderamente parece un tipo detestable para el statu quo, ya que pone de bulto nuestras miserias y mejores realizaciones políticas y culturales. Juro que cuando el Dr. Luís Paradas me lo hizo leer noté que era un tipo pesado y malasangre e intenté escribir un ensayo académico refutándolo.

En realidad, esa vez no lo entendí. O sería a mi buen profe Paradas que no entendí y era él quien me caía mal, no lo sé. Pero eso no importa a los efectos presentes, en esta segunda lectura. Efectivamente, junto a los procesos productivos de la economía de plantación, industria y comercio y la correspondiente organización jurídico-política moderna, los aspectos anteriores étnico-culturales, comunican sentido de pertenencia, identidad y actitudes de querencia y voluntad de permanecer en estos espacios territoriales a los habitantes de estas naciones.

Sin embargo, Peter Wade, el señalado antropólogo ingles de Manchester, argumenta que el mestizaje, entendido como la confluencia de diversos factores: tales como elementos biogenéticos o filogenéticos de etnia o «raza» (anacronismo que él usa), que crea un nuevo ser o producto (el pueblo mestizo latinoamericano y caribeño, un nuevo género humano que dijera Simón Bolívar, el Libertador; o la raza cósmica de José Vasconcelos); pero el mestizaje, según Wade, representa una falsa conciencia. Esto es, una imagen deformada o fantasmagórica de nuestra identidad. De las anteriores premisas, mayores y menores, como diría mi profesor Heraclio Zaraza en las primeras clases del pregrado en la especialidad en Ciencias Sociales, mención Historia de la UPEL-IPB, 1990-95, cabría concluir que en Latinoamérica y el Caribe no había unidad nacional alguna, por su conformación étnica tan diversa; sino un proceso de balcanización o atomización, ya que hasta el clima es diverso, sus costumbres y modos de vida, de donde se concluiría que: «No hay unidad nacional ni regional posible» y debemos integrarnos a cualquier discurso y práctica política dominante de las naciones y clases dominantes…Ergo, hemos sido territorios neocoloniales porque la civilización occidental se ha universalizado e impuesto como la única posible.

V

Pero eso puede hacerse más notorio en el micro-clima social de una ciudad como Barquisimeto, estado Lara, que al decir de una de sus cronistas tendría una sociología pintoresca, hecha de elementos tradicionales y modernos; con indígenas con sus animales de recuas que a principios del siglo xx aún se dejaban ver por la calle del comercio o Av. 20 (don Hermann Garmendia, en «Barquisimeto hasta 1900»), o con sus campesinos mestizos en tareas domésticas en casas de las familias «aristocráticas» o tradicionales «mantuanas», en cuyos principales templos católicos como la iglesia San Francisco, tenían asientos apartados. Y realizaban «sufragios piadosos» para el descanso de sus almas cristianísimas, (según ha revelado en sus estudios sobre Barquisimeto el Dr. Oscar Barragán Abreu, en revista Tierra Firma, n. 101, mar. 2008).

En efecto, el señalado autor señala:

«Los sufragios piadosos y el sentido de la muerte, en la Nueva Segovia de Barquisimeto (1770-1830), en realidad son dos facetas distintas de una misma cara. Ellos se refieren a la actitud del ser humano ante un problema válido para todas las épocas, como lo es, en palabras de Heidegger, la posibilidad de todas las posibilidades, aquella que nos asoma ante nuestra conciencia la posibilidad del no ser. Es decir, la posibilidad de la muerte. Ante dicho problema, cada época sume posturas diversas; e inclusive, dentro de cada una de ellas, cada grupo social debe asumirlas personalmente, de acuerdo con las circunstancias específicas y radicales. Decidimos abordar aquí, de cara a las condiciones fácticas de las castas de indígenas, pardos, negros libertos y esclavos, a las personas que conformaban, en cierto momento, -1770-1830-, a los principales de la ciudad, en un momento que decidió el destino de todos nosotros: el paso de una sociedad tradicional a un nuevo orden precapitalista y liberal, en el cual, sin darnos cuenta se conformarían nada más y nada menos que los patrones y códigos con que nos juzgamos en la problemática central, exponemos en esta primera parte la perspectiva metodológica y las condiciones fácticas de la ciudad, en relación con las prácticas de los sufragios piadosos y en sentido de la muerte», (Los sufragios piadosos y el sentido de la muerte en la Nueva Segovia de Barquisimeto, 1770-1830…).

En cuanto al problema central que nos ocupa, Oscar Barragán Abreu (op cit) acota que «Es por ello que, para comprender a los grupos principales y, a partir de ellos, a la sociedad barquisimetana, durante el período de dominio hispano desde dentro; teniendo como marco referencial a las redes sociales y el problema educativo y generacional inherente a toda época, – aspecto que, por cierto, este último, en que lo sagrado como modelador de códigos axiológicos y teleológicos, es fundamental que pensemos que era necesarios profundizar en el papel de la religión, así como la manera en que su variación determinó el destino de una época», (ídem).

Por eso cierra esta parte de la siguiente manera: «La Nueva Segovia de Barquisimeto era así, una sociedad que, aunque con una forma de ida muy ruralizada, con prejuicios inherentes a la posesión de la tierra, a la ascendencia blanca y, unido a ello, a la limpieza de sangre y al sentirse perteneciente a lo más puro de la religión católica, proselitista y jerarquizada, imponía la diferenciación; no tanto física, pues los mismo blancos preferían vivir en el campo; sino un aspecto vital político-religioso que definía una posición en la ciudad, cercana o lejana al centro, donde se ubicaban las instituciones; y en la iglesia, un espacio que era definido por la cercanía o lejanía con respecto al altar y al sagrario, dividido inclusive por tramos a la hora de la muerte…», (ídem); en las estancias del Convento de San Francisco y la iglesia Nuestra Señora de la Inmaculada Concepción.

Las interrogantes al respecto pueden ser varias, y, aunque no se vayan a responder necesariamente y de manera definitiva, se dejan aquí formuladas. Pues bien, se dice en filosofía que las preguntas son más interesantes que las repuestas mismas; y que, como actitud filosófica, son un instrumento de trabajo intelectual, al modo de un taladro, a objeto de penetrar la realidad. Nos preguntamos entonces, sin ambages, y de forma intempestiva, ¿por qué en ambientes académicos de estudios avanzados poco se discuten estos temas de la conformación étnica de nuestras ciudades? ¿Será que se teme herir susceptibilidades o es que no ha calado lo suficiente en los sectores intelectuales e ilustrados la conciencia acera de la importancia de la historia regional y local, como factor de identidad? En cambio, parece preferirse en nuestros centros académicos no sólo el pincel extranjero, como decía el poeta Andrés Eloy Blanco, sino también las ideas de científicos sociales foráneos, como Peter wade que nos hablan de nuestras fisuras antiguas en la piel social, como discursos disgregadores.

Aunque, claro, reconocer la existencia de tales costuras sociales mal zurcidas es problemático. La tesis, si cabe el término, que se opone es del siguiente tenor. A saber, puede ser un argumento académico que trasluce un posicionamiento político ideológico que pretende, abierta o soterradamente, hacer explosionar las ideas que dan sustento a la existencia de lo que Jorge Abelardo Ramos (en libro de 1973) ha dado en llamar «La nación latinoamericana»; y por tanto, constituye una posición disolvente, que en último análisis apuesta por el neocolonialismo institucional, donde el ciudadano y la ciudadana sean sujetos, precisamente, del neocolonialismo, parafraseando así a Luis Antonio Bigott (1978, en El educador neo colonizado). Aunque no se niega que, siguiendo a Michel Vovelle (1978, en Ideología y mentalidades), lo anterior es «…un cuestionamiento que podría ser ingenuo», (P. 7).

Un corolario provisional podría ser que, deslastrados de nuestra historia romántica, de florilegios montunos, los procesos sociales observados descarnadamente no son para cantar canciones, sino que imponen tareas para construir espacios de tolerancia, como pide ahora todos los sábados en el diario El Universal el teólogo Félix Palazzi.

 

Se considera en este aparte bajo la voz «Lascivia brevis» el adjetivo relativo a «…Vagabundo, de movimiento blando y libre, juguetón, alegre», ya que la primera refutación a la cuestión aquí considerada (Quaestio) dice relación con el adjetivo «Lascivia»; pues, con perdón si alguien se ofende, se toma la tesis de Peter Wade acerca de que el mestizaje constituye una ideología que homogeniza el ser de la nación latinoamericana (ontología o la naturaleza del ser de los entes nacionales, en lo humano, cultural, económico, jurídico-político, entre otros); decimos, pues, ideología esta del mestizaje que oculta la exclusión racista.

 

Esta idea peregrina parece propia de un vagabundo, juguetón y alegre, con pretensiones de «ablandar» la idea-fuerza de la unidad latinoamericana, ya que según los versos de Lino Gallardo «América toda existe en nación»; y cuyos elementos vendrían a ser la lengua española, el cristianismo y otras expresiones atinentes al sincretismo étnico-religioso, con diversos epifenómenos de mariofonías y religiones afroamericanas, también presentes en la ciudad de Barquisimeto, con La Divina Pastora; que a partir de 1853 en su procesión une a toda la población sin distingo alguno.

Todo ello, sin embargo, en su diversidad son fuente de identidad y pertenencia en lo que Ramos (1973) considera es la conformación de la nación latinoamericana, con un pueblo mestizo que habita en un territorio, con sus riquezas materiales e inmateriales; además se denuncia que la tesis de Wade padece de un vicio lógico. A saber, el deseo irrefrenable y obsceno de atentar contra la patria mestiza. Pues con el cantor Alí Primera en su metáfora sobre Simón Bolívar, Venezuela y Latinoamérica y el Caribe: «…La patria es una mujer/ y él regresó para amarla/ contra los que se desvelan / tan solo por disfrutarla/ y en vez de darle caricias/ lo que hacen es manosearla/ Vámonos pa´allá vamos a su encuentro/… (Sangueo para el regreso, fragmento).

Pero algunos académicos foráneos, que a veces se consideran autoridades en ciertas áreas del conocimiento, suelen ser leídos en esa comunidad de indagación como impolutas e ínclitas autoridades, cuando en realidad no son otra cosa que un recurso a la falacia, (Falatia ad baculum). Es decir, un argumento cuya validez deriva de la fuerza del bastón de autoridad; por ejemplo, considerar que como el socorrido Wade sea un investigador británico su tesis, (Argumentum ad consequentiam), es necesariamente verdadera; siendo que en realidad, subrepticiamente, esconde una actitud colonialista y se burla (burla burlando, como quien no quiere la cosa), de los «esencialismos», como la cultura mestiza e híbrida que distingue y da identidad al subcontinente latinoamericano y caribeño. Peter Wade, entonces al escarbar revela cosas desagradables, cae mal, el pobre, es inglés, con poco sentido del humor, pues, o de humor inglés que llaman, que sólo ellos dizque entienden. Con ese cielo siempre oscuro y una lluvia pertinaz, por eso siempre cargan con un paraguas, qué incómodo. Aquí me parece que los que venden paraguas por la 20 no les va muy bien, a menos que haya vaguada en la zona de convergencia intertropical.

No obstante, no se está negando que, por supuesto, y, precisamente, el neocolonialismo de antaño y ogaño nos ha convertido en regiones geo-económicas dependientes de los centros de poder mundial. Y ser, además, naciones-estados con sociedades (pueblos) asimétricos, con marcada división de clases y escenarios de luchas intestinas; ya que volviendo a citar al poeta y cantor venezolano Alí Primera: «…En mi pueblo los hombres/ han tomado partido/ algunos por la vida/ y otros contra ellos mismo/ Pero la tierra agreste/ Va pariendo un camino/ en todos los pasos llevan un solo ritmo/» (Alí Primera. Mi pueblo me hace cantar, fragmento. Recuperado en acordes.la cuerda.net/ali-primera/mi…).

De allí que esta refutación intempestiva (e ingenua), ya que aunque no seamos pares académicos de figurones (o figurines) del jet set como Peter Wade ni hablamos inglés (como canta Juan Luís Guerra y su 4-40 en El Niágara en Bicicleta), creímos que, tal vez como parte de una reacción airada o intempestiva, (se dice en Latín: «Ira furor brevis est»), podíamos expresar este recado breve de un lector ocasional (o lector in fábula) como diría Umberto Eco, para la discusión.

Por su parte, en el lector in fabula viene a ser un estado o situación donde se produce la cooperación de tipo interpretativa entre el texto mismo y el lector, en una hermenéutica de sentido, (Eco, 1979, Apocalípticos e integrados). Con el agregado de que en palabras de Gisela Kozak Rovero (2008, en su obra Venezuela, el país que siempre nace), la nación más allá de la entelequia institucional y jurídica-política, está hecha de memoria y subjetividad, (P. 27).

El corolario de este aparte es que, junto a las estructuras objetivas de la economía y la política, como cosa pragmática o empírica, hay una geografía de la sensibilidad y cuerpos narrativos que exaltan y cantan la nación. A la herencia histórica de variado tenor desde la historia romántica y su cancionero popular, aunque con dolorosas heridas sangrantes hacen parte de un legado que informan o comunican unidad al conjunto societal; de lo contrario seremos, recordando a Don Miguel de Unamuno respecto de la España del 1889, naciones invertebradas. Es lo que Peter Wade da en llamar homogenización nacional que oculta una realidad de exclusión: ciudades sin centro y ni polis céntricas, sin memoria e identidad; dejada a la recreación de ciertas élites. Siendo que en realidad el mestizaje y el sincretismo implican una dimensión ontológica permanente en cuanto a que al ser de estas entidades políticas e históricas están marcadas por la diversidad; pero la vida no pasa en el tiempo y el espacio como un rebaño de pueblos dispersos, semejante a aquel cuento de Antonio Arráiz: «Todos iban desorientados».

Wade describe tal situación siguiendo la metodología de estudios de casos; pero tal vez como investigador que expresa «la mirada del otro» parafraseando así a los historiadores Elías Pino Iturrieta y Pedro E. Calzadilla, no siente que tiene la responsabilidad de proponer también una salida; que viabilice un sistema histórico-pedagógico y que haga visible a los sectores excluidos, en un paisaje donde, no sólo afloren las diferencias. Sino también, y principalmente, afloren las confluencias. Pero no, Wade se conforma con realizar un diagnóstico con neutralidad valorativa, y describe las variables de conjunto que a su parecer están involucradas, como quien se solaza en diseccionar un cuerpo inerme

Su autor, Peter Wade, es del taxón inglés según decía mi maestro de cuarto grado hacia 1980 en la Escuela Ciudad de Maturín, en el popular barrio San José de Barquisimeto, y propiamente pertenece al Department of Social Antropology , University of Manchester, Reino Unido; institución fundada en 1824 en esa ciudad de Manchester, Inglaterra, que en 2004 se fusiona con el Manchester Institute of Social Science and Technology; en su frontispicio, se lee según una fuente electrónica la siguiente frase latina: «Cognitio, Sapintia, Humanitas». Y se localiza en Oxford Road, Manchester y en la actualidad cuanta con la segunda mayor matrícula del Reino Unido: 29 mil estudiantes, después de la Universidad de Londres, (recuperado en Página Google. Places).

Es desde allí que parte la mirada de este investigador hacia Latinoamérica; Wade es Doctor en Antropología Social, egresado de la Universidad de Cambridge y, como ya se ha reseñado pertenece al claustro de la Universidad de Manchester, siendo su área de interés «…los procesos de discriminación racial, identidad negra y movimiento social negro, incorporando también la sexualidad a sus temas de investigación». Algunos de sus libros son: Raza y etnicidad en América Latina; Música, Raza y Nación; Gente Negra. Nación Mestiza.

Así se tiene que las credenciales que adornan al personaje eventualmente pueden deslumbrar a las almas piadosas que tienden a reverenciar y postrarse de hinojos ante el Magister dixit y los PhD del mundo tenido por desarrollado, pero para los (des)formados en la «Escuela de la sospecha» y la Dialéctica negativa, que tienden a adentrarse en lo que está oculto y desvelar, hacer «ver» lo oculto; ciertos investigadores confunden como cualquier hijo de vecino ciencia con ideología y quieren hasta meter gato por liebre, con perdón, y no se ofenda el señor, pues, probablemente haya sido yo quien no lo haya entendido.

 

VI

 

Con todo lo señalado caven varias conclusiones y aquí se opta por una apoyada en cierta reflexión de alguien que extiende la mirada en el recorrido histórico de Venezuela, también como estudio de caso y muestra sociológica. Así hemos de destacar que compartimos el criterio del escritor José Balza (en su obra Pensar a Venezuela, Caracas, 2008), cuando afirma que para el caso particular «La rigidez colonial reemplazó el disperso mundo indígena», (P. 6), agregando que:

«Se trata de una forma de unidad social que sostiene el habla hasta la familia, desde la sexualidad y la percepción del paisaje, los engranajes económicos y religiosos hasta el amor y la alimentación. Un magma paralelo a las leyes y los ministerios, a las noticias y las ideologías. Algo que emerge desde las sombras de la más remota tradición indígena, negra o blanca y va reflejándose en todas las instancias de la sociedad para nutrirse de sus voces, costumbres, intimidades e imaginaciones», (P. 7).

E allí pues una respuesta. Nos parece a la tesis de Peter Wade, la diversidad no niega la unidad. Paradojas de Latinoamérica y el Caribe. Igualmente, es plausible lo que José Balza en su prosa ensayística, al Pensar a Venezuela, denomina la integración de sangres a partir de 1492 converge también en el dominio de la cultura, ideas, actitudes y mentalidades. Vendría a ser de acuerdo con Vovelle (op cit) expresión de la «relación dialéctica entre las condiciones objetivas de la vida de los hombres y la manera como la cuentan y aún en la que viven», (P. 19); de allí que decir sin más que el mestizaje es una ideología que encubre las exclusiones y solazarse en ello, al menos es un simplismo abrumador, sobre todo ante el pensamiento complejo de Edgar Morín (en La vía, 2012); además de que considerar el mestizaje como retórica nacionalista constituye un argumento ad homini pues descalifica a un grupo humano que como pueblo tiene como seña de identidad el elemento mestizo.

Aunque hay que reconocer a Peter Wade que ciertamente existen múltiples procesos de mezclas e identidades mixtas en Latinoamérica y el Caribe, que da lugar al sintagma pluri y multiculturalidad. Pero sin renunciar a la unidad nacional. ¿Se da cuenta usted amigo/ga lector/ra que todo el cuestionamiento de la tesis central de Peter Wade al final parece un cuestionamiento ingenuo y que la ira furor brevis est?

Pero lo que no deja de ser interesante es que semejantes disputas también puedan verse reflejadas en la micro historia de una ciudad como Barquisimeto, que no parece que hay uno solo sino varios, según se viva el este, el centro o el oeste, sur o norte, pero lo cierto es que todos somos mestizos tanto en lo físico como en la música y la comida, por decir algo banal.

Aborda un ambito cultural donde muestra tradiciones que nos dejaron eso antepasados, el autor resaltar la etnologia de todo un ámbito de las viejas y nuevas generaciones siguen el mismo parametro, pues, estudian las interacciones en y con la sociedad, especificamente relacionar el comportamiento del ser humano con la cultura en la que está inserto.

Su método de investigación consiste en la observación de los grupos sociales y los procedimientos culturales, a veces teniendo que investigar desde el centro mismo de los grupos sociales y culturales. La etnografía está bastante ligada a la Etnología, que no es otra cosa que la ciencia encargada de estudiar la comparación entre los pueblos y culturas del mundo antiguo, relacionándolas con el mundo actual.

La cultura involucra al conjunto de saberes, creencias y pautas de conducta, no cabe duda que la ciencia, es también parte de nuestra cultura, de la misma manera que las artes o las humanidades. Sin embargo no siempre se la ve de esta manera. Suele considerarse que las ciencias deben ser dominadas por los especialistas. Pero la cultura científica ha de ser un elemento fundamental de la educación de la población en general con la finalidad de lograr una ciudadanía que no solo valore el desarrollo del conocimiento, sino que fundamentalmente lo utilice para comprender y participar en el mundo en que vivimos.

Cada pintor o músco expresa lo que siente en una pieza,siendo esta obra de arte parte de la sociedad en un pais creencias como herencia de nuestros antepasados, por su parte la cultura es todo aquello material o inmaterial (creencias, valores) que identifica a un determinado grupo de personas ,y surgen de las vivencias en una determinada realidad. Dicho de otro modo, la cultura es la menera como los seres humanos desallorramos nuestra vida y construimos el mundo o parte donde habitamos, tales aspectos los recoge el artista en sus creaciones de diverso tipo.

En este texto se pretende abordar, grosso modo, algunas de las contradicciones más flagrantes del mundo actual como sistema-mundo capitalista y en Venezuela, donde a partir de la gestión de Chávez se iniciaron un conjunto de transformaciones que aún no cuajan, sino que la tradición del viejo sistema-mundo capitalista continúa tanto en las relaciones sociales generales y objetivas de la economía y la política, como en el plano subjetivo y las preferencias éticas y estéticas.

En tanto que estructura económica, política, social y cultural dominante en la modernidad, el capitalismo campea, sólo los funcionarios vociferan la existencia de una revolución en la que la mayoría de ellos no cree, por cierto; pero también es un mundo en general y en Venezuela en Particular, donde también se asoman otras alternativas de relacionamiento hombre-naturaleza y con otros hombres en sus creaciones culturales y con sus tecnologías sociales.

Esto es, la postulación de nuevas formaciones sociales y modos de vida, sistemas de producción con economías equivalentes y comercio justo; cuestión en la se detuvo el comandante Hugo Chávez desde aquella cumbre de Seatle hasta el Plan de la Patria, o al modo de lo que Cortazar (1970) en su cuento «Continuidad de los parques» da en llamar: «… las ceremonias de una pasión secretan, protegida por un mundo de hojas secas y senderos furtivos» (en: Ceremonias. 1970 p. 12).

En efecto, el horizonte de futuro de los humanismos utópicos, materialistas o religiosos, con sus filosofías optimistas o los estudios de prospectiva fundamentados en los aportes de las ciencias sociales, principalmente la filosofía de la cultura y los estudios culturales, ya que de acuerdo con Kung (1977, «Ser cristiano») y Francés (1989) la aproximación al trazado de «un sueño posible para Venezuela» y todo el «universo-mundo» (o de la humanidad toda, en términos de «agenciar» los distingos de una nueva civilización) pasan por denunciar la contradicciones del mundo que impone numerosas sujeciones y obliga a los trabajadores, sobre todo, a renunciar a derechos humanos fundamentales ( Marcuse y Morin, 1971, en «La nueva imagen del hombre», p. 38).

VII

Las conclusiones que se puedan extraer de las anteriores proposiciones están en relación al tipo de hermenéutica que se pueda hacer y la crítica abierta de muchos aspectos en los que se requiere profundizar más allá de la cosmética de las ideologías acomodaticias y arbitrarias, con su repertorio de mínima dogmática que, antes que abrir, nublan el entendimiento y la práctica consecuente del legado de Chávez; de donde se tiene que no es este un ejercicio vacuo, propio de diletantes en tertulias de café. Sino parte de una actividad militante.

La metodología empleada en este escrito guarda relación con los estudios de naturaleza documental sobre un tema teórico, acerca del que se reflexiona fundamentado en el manejo de un cuerpo de información expos facto, esto es: la selección de un repertorio biblo-hemerográfico, documental y/o testimonial ( Manual de trabajos de grado…Upel, 2006); y la complementación, ampliación del conocimiento existente al respecto o también puede ser que haya una complementación o ruptura a que se pueda arribar en las consideraciones finales va a depender de la perspectiva filosófica que se asuma, aún a sabiendas como recuerda Gadamer (1999, «¿Quién soy yo y quién eres tú?) que en «…la osada empresa de nuestra comprensión, sólo constataría que aún falta mucho camino por recorrer para comprender lo suficiente» (p. 151).

En este caso, se parte de una posición antrópica (Francisco Zambrano, dixit), en el sentido de que se asume la perspectiva de la antropología pragmática en el marco del racionalismo crítico para luego incursionar en el ámbito de la historia actual, en la «borden line» de la relación presente-pasado; apoyados en los métodos de la historia como como ciencia y de la filosofía, en tanto disciplina rigurosa cuyas proposiciones se ubican por encima de la mera lógica formal y avanzan hacia las demostraciones de los hechos sociales y sus interpretaciones, en consonancia con «la rectitud científica» (Kung, 1977, op cit., p. 25).

La asunción de esta perspectiva, en lo personal, obedece al consenso a que se arribó luego de algunas consultan realizadas a colegas de reconocida experticia en el campo de las ciencias sociales y la filosofía, quienes coincidieron al menos en dos aspectos fundamentales (a) que para abordar asuntos como el que ocupa convenía hacerlo desde algunos clásicos de la teoría crítica (Ricardo Galindez, Henri Montero, Corteza Galindez) y (b) que los clásicos del marxismo-leninismo estaban bien pero que sin embargo cualquier otro autor contemporáneo y actual puede ser útil a los efectos del presente ensayo, a condición de que se asumiera una hermenéutica filosófica rigurosa (Francisco R. Zambrano Cano); colegas a quienes quien esto escribe agradece sus aportes.

Tanto como a otro grupo que animaron la discusión con el humor propio de los guasones, recomendando que leyera a Nostradamus o al historiador Manuel Caballero (1932-2010), por aquello de las profecías auto cumplidas o que si la historia enseña algo es que no enseña nada, negando a Cicerón cuando afirma que «La historia magistra vitae est testi temporum», «La historia es maestra de la vida y testigo de los siglos», (en: latin.dechile.net/?Ciceron=21). Y cada persona y sociedad en su tiempo debe capear los temporales como una experiencia única e intrnasferible, ya que como señala Marc Bloch (1986, «Apología de la historia o el oficio del historiador») las personas se parecen más a su tiempo que a sus padres.

Ergo, siempre hay que actualizar la interpretación elaborada del pasad en la coyuntura actual, pues la acción de las generaciones adultas sobre las más jóvenes de que habla Durkheim (1977, «Educación y sociología»), en tanto que parte del proceso de socialización, no siempre alcanza a penetrar las conciencias como se desearía; y la validez de los meta relatos en general suele ser limitada, ya que el conocimiento es históricamente situado, pues al final, es siempre una apuesta fenomenológica, cual vuelve a decir Gadamer (ob cit):

«¿Qué será lo opuesto a fenomenológico? ¿Qué las palabras son sólo palabras? ¿O que no se debe pensar nada ante las palabras aisladas, pero no respecto a la unidad de sentido del poema? Habrá que contestar diciendo que las palabras nunca tienen sentido por sí solas y que sólo mediante su tal vez múltiple significado constituyen ese sentido único que, en los múltiples lazos de las líneas de sentido que vibran al mismo tiempo, mediante sin embargo la unidad del conjunto del texto del discurso» (p. 150).

 

Las nuevas generaciones pueden recrear tales discursos porque no siempre les satisface en su contexto de vida, tanto en su dimensión descriptiva como axiológica y teleológica, por eso Caballero (2007, «La peste militar. Escritos polémicos 1992-2007) acota, burla burlando, que si la historia enseña algo es que no enseña nada y cada generación ha de habérsela con la historia-acontecimiento y la historia-conocimiento, reinterpretar el pasado en función de las inquietudes del presente, porque «La conciencia nacional es ante todo una conciencia histórica», (P. 12).

 

VIII

Pero eso no niega los grandes relatos no tengan validez general, sino que hay que reubicarlos en la perspectiva del presente, con sus «rasgos apofánticos» o proposiciones que contienen ciertas verdades; pero que «L comprensión más precisa puede ser limitada y aproximada…», (Gadamer, 1999, p. 152) dado el estado del arte de las ciencias humanas y sociales actuales puede ser eventualmente complementados, ampliados o hacer rupturas en el bosquejo del pensamiento de lo social, contenido en cierta literatura especializada y «traducida» en el lenguaje de quienes, parafraseando a Horkheimer, se pudiera llamar realizan un diagnóstico de nuestro tiempo.

Con su dialéctica negativa Horkheimer ofrece una mirada no contemplativa de la acción social e inaugura de esa suerte la denuncia de la insensatez de la razón instrumental, donde en sus palabras «…todos nuestros inventos y todo nuestro progreso» parecen desembocar en la contradicción flagrante que describe la imposibilidad de la realización de la libertad propuesta por Hegel y la felicidad plena del hombre que entraña la idea de progreso y modernidad; o de la paz perpetua de Kant; produciéndose una contradicción en los términos entre «el sujeto que contempla y la verdad contemplada», ya que ello debía estar mediada por la experiencia; de donde se tiene que la respuesta a las preguntas últimas del hombre se hallan no en la metafísica o dogmas religiosos sino en la práctica histórica, ya que la relación teoría-praxis constituye una de las aporías o contradicciones irresolubles de mayor calado, tanto en plano individual como societal.

Ese aspecto aporético deviene de que las metas e ideales que imponen las generaciones adultas, que se suponen realizadas, tanto en términos de tener cubiertas las necesidades básicas y existenciales, según la teoría de Maslow, como en el establecimiento de ciertas cotas muy altas según las medidas de las élites mundiales, con morales efectivas o efectivamente practicadas, cuya superación exigen esfuerzos físicos o ascéticos bastante exigentes; y que al no lograrse generan frustración. Al respecto Sánchez (2007) analiza que:

«Vivimos en la contradicción, nuestros valores morales están muy arriba de nuestra posibilidad de llevarlos a cabo. No hay nada más crudo que te díganlo que se encuentra detrás de la cotidianidad. Muchas ONGs, colectivos de artistas y activistas se encargan de recordarnos quiénes producen las telas de nuestra ropa, los transgénicos de nuestra comida y las marcas que deseamos. La decisión de cambio es individual, el buen salvaje no existe no existe, tampoco hay un afuera del capitalismo, lo que sí permiten este tipo de acciones es una consecuencia sobre el consumo y la forma de vida que llevamos. Dentro de este flujo se encuentran las ilustraciones del artista español Luís Quiles»; así, una de sus caricaturas es un hombre en el estadio del Real Madrid en cuyo cuerpo lleva tatuados los logotipos de todas las marcas más sobresalientes de las corporaciones mundiales: Mcdonals, C: K:; Siemen, Adidas, entre otras y muestra una mirada «vacía» e igualmente presenta a una mujer con múltiples brazos que sostienen sendos celulares para estar conectada a las diversas redes sociales y cuya interpretación es que de esa manera muestra al ser humano alienado o enajenado.

Véase, pues, cómo puede expresarse tanto en un registro utópico como en lo concreto lo que se viene señalando en este aparte metodológico, escrito no para aburrir al posible lector sino para advertir la vista desde el punto de donde se mira, acotando con ello tanto las posibilidades como las limitaciones, en atención a que uno de los aspectos fundamentales de la historia como proceso social es el cambio, lo cual se expresa tanto en el horizonte del paisaje, la demografía, la economía o los mecanismos de los intercambios simbólicos de la cultura (Santana Pérez, 2013, p. 235).

Cortazar (1970) en su cuento «Las armas secretas» recogido en la obra «Ceremonias» ofrece unas metáforas luminosas para la aproximación a la noción principal que ocupa, a saber, mundo contradictorio y multiforme, véase:

«El mundo se asemeja a un cilindro de caucho que cabe en la mano; girando apenas a la derecha, todos los árboles son de un solo árbol tendido a la vera del camino; entonces se hace girar una nada a la izquierda, el gigante verde se deshace en cientos de álamos que corren hacia atrás, las torres de alta tensión avanzan pausadamente, una a una, la marcha es una cadencia feliz en la que ya pueden entrar las palabras, jirones de imágenes que no son las de la ruta, el cilindro de caucho gira a la derecha, el sonido sube y sube, una cuerda de sonido se tiende insoportablemente, pero ya no se piensa más, todo es máquina, cuerpo pegado a la máquina y viento en la cara como un olvido…».

La cita de Julio Cortazar (1914-1984) pudiera considerarse una metáfora de las diversas perspectivas de la que pudiera valerse el investigador que se detiene en las contradicciones del mundo desde un prisma epistemológico cuyos ases vendrían a reflejar los diversos colores o jirones de imágenes que reportan su ruta investigativa; pero, a veces, como reza el dicho, el árbol ideológico no deja ver el bosque, ya que se vive, por así decir, con el cuerpo y la mente pegada a las máquinas de la modernidad, a un «presentismo» donde antes que hacer florecer el espíritu lo marchitan y empequeñecen. Flagrante contradicción ya en sí mismo es un abismo.

Cortazar (op cit) ilustra tal contradicción, precisamente, de la siguiente manera:

«El domingo al levantarme oí que mamá hablaba por el alambrado con el señor Negri. Me acerqué a decir buen día y el señor Negri estaba diciéndole a mamá que en el cantero de las lechugas donde salía el humo el día que probamos la máquina, todas las lechugas se estaban marchitando. Mamá le dijo que era muy raro porque en el prospecto decía que el humo no era dañino para las plantas, y el señor Nefri le contestó que no hay que fiarse de los prospectos, que lo mismo es con los remedios que cuando uno lee el prospecto se va a curar de todo y después a lo mejor acaba entre cuatro velas…» («Los venenos», en op cit., p. 31-32).

El mundo entendido como red extensa o de la historia natural o red de pensamiento, propuesta por Descartes en su «Discurso del método» (trad., 1970) y susceptibles de ser conocidos por medio de la razón, que en sus palabras es un recurso parejamente todos creen tener muy bien distribuido:

«En lo cual no es verosímil que todos se engañen, sino más bien esto demuestra que la facultad de juzgar y distinguir lo verdadero de lo falso, que es propiamente lo que llamamos buen sentido o razón, es naturalmente igual en todos los hombres; y por tanto, que la diversidad de nuestras opiniones no proviene de que unos sean más razonables que otros, sino tan sólo de que dirigimos nuestros pensamientos por derroteros diferentes y no consideramos las mismas cosas. No basta, en efecto, tener el ingenio bueno; lo principal es aplicarlo bien. Las almas más grandes son capaces de los mayores vicios, como de las mayores virtudes; y los que andan muy despacio pueden llegar mucho más lejos, si van siempre por el camino recto, que los que corren, pero se apartan de él» (p. 49).

El mundo, entendido como todo lo real dado físico y social, se rige por leyes que es común están ocultas y que es preciso descubrir, poner en evidencia; porque revelan las estructuras fundantes de la dinámica propia de los elementos; todo lo cual ha dado lugar en el campo de las ciencias sociales, a la economía política, la filosofía de la historia y los estudios culturales c cuyo objeto de estudio es el hombre en sentido colectivo, autor de su historia, «hacedor» o también su «destructor».

En ese sentido, Marx (Trad., 1975) en su obra «Los dieciocho brumarios de Luís Bonaparte» establece un criterio que demuestra lo que Zambrano, citado de memoria páginas atrás da en llamar «postura antrópica», esto es, una reflexión sobre la acción de los hombres en el tiempo (Bloch, 1986, dixit) que permite establecer las contradicciones típicas de los sistemas sociales y que en Marx a la letra dice:

«Los hombres hacen su propia historia, pero no la hacen a su libre albedrío, bajo circunstancias elegidos por ellos mismos, sino bajo aquellas circunstancias con que se encuentran directamente, que existen y transmite el pasado. La tradición de todas las generaciones muertes oprime como una pesadilla el cerebro de los vivos», (p. 15), de tal suerte que las contradicciones del pasado, muchas veces son similares a las de hoy, en ese sentido recuerda que: «Hegel dice en alguna parte que todos los grandes hechos y personajes de la historia universal se reproducen, como si dijéramos, dos veces. Pero olvidó agregar: una vez como tragedia y otra vez como farsa» … (Ídem).

Pero, con todo lo dicho hasta aquí a modo de advertencia metodológica, previa a la reconstrucción histórica del «alojamiento donde uno habita», (Descartes, 1970, p. 43), con el acopio de los materiales necesarios, ¿cuáles son algunas de las contradicciones más flagrantes en el mundo actual y cómo se expresan? ¿A qué conclusión podemos arribar, desde la perspectiva que se ha adoptado? Porque en ese proceso gnoseológico se padece otra contradicción, esto es, que lo sentido por los sentidos también está sujetos a la ilusión, error y engaño (Morin, 2001); como ya lo señalara Descartes:

«Pero si hay algunos que están persuadidos de que es difícil conocer lo que sea Dio, lo que sea el alma, es porque no levantan nunca su espíritu por encima de las cosas sensibles y están acostumbrados a considerarlo todo con la imaginación –que es un modo de pensar particular para las cosas materiales- que lo que no es imaginable les parece no ser inteligible. Lo cual está bastante manifiesto en la máxima que los mismos filósofos admiten como verdadera en las escuelas, y que dicen que nada hay en el entendimiento que no haya estado antes en el sentido…», (52).

A manera de síntesis, en el mundo moderno, es decir, el capitalismo, la contradicción fundamental es aquella referida al «enfrentamiento de las clases antagónicas», o «Concretamente, el choque del proletariado naciente y en desarrollo, con la burguesía consolidada en el poder y decidida a defender, a cualquier precio, un «orden» que garantizaba su dominio. Europa asiste al crecimiento impetuoso del proletariado y comienzan a estallar batallas en que éste actúa como una clase capaz de la iniciativa histórica, en realidad, la única consecuentemente revolucionaria, en condiciones incluso de arrastrar tras de sí a importantes capas pequeño burgueses de la ciudad y del campo, de las que va diferenciándose más y más», (op cit., p. 5).

La consolidación del sistema-mundo capitalista luego del aniquilamiento de las revueltas campesinas por la propiedad parcelaria frente a los terratenientes franceses, permite que se consolide la industria y el comercio, las concesiones ferroviarias y los manejos especulativos en la bolsa de valores, hace que el lumpemproletariado bonapartista se enriquezca y se genera una anarquía en nombre del orden, de donde se tiene que «las contradicciones del hombre explica las contradicciones del gobierno (de Bonaparte)», ya que tenía que lidiar con interese irreconciliables.

Estas contradicciones han avanzado en el tiempo y se han permutado al presente hasta derivar en lo que From (1964, citado por Rodríguez Rojas 2012) dan en llamar «una sociedad enferma», cuyos indicadores serían del siguiente tenor:

La paradoja de que la abundancia no trae aparejada la felicidad, como hace creer cierta publicidad de base conductista que creara estímulos y cree hallar recompensa sólo en los objetos materiales y no en el sentido más profundo en el ámbito de la existencia, un consumismo compulsivo al contario arroja vicios como el despilfarro, consumo innecesario, las ideas prejuiciosas de que la pobreza sea sinónimo de violencia, como se suelen hacer aparecer a los barrios o los latinos o negros en Estado Unidos; lo que no quiere decir que ser rico sea malo sino que cada familia y persona debe contar con lo necesario y para ello requiere educación, trabajo digno, vivienda, hábitat; pero el hombre y la mujer en la sociedad industrial no es más feliz que un campesino que con sus labranzas ha tenido una relación amigable con la naturaleza.

Aunque esa relación ha estado siempre mediada por cierta tecnología, ya que es esta la que permite alcanzar sus objetivos, pues en palabras de Rodríguez Rojas (2012) «No son las condiciones instintivas genéticas las que determinan su accionar, sino las condiciones sociales en las que vive», de donde se tiene que las bondades de la ciencia y la técnica modernas son muy necesarias pero la sociedad moderna se ha desarrollado bajo el paradigma fragmentario, sin una visión sistémica que integre las mayoría de los elementos.

Lo fundamental vendría a ser encontrar un modo de vida donde los avances tecnológicos alcancen atender a todos, los del norte del mundo desarrollado, los del sur en vías de desarrollo y atienda los bolsones de miseria aún en áreas que se consideran de amplio desarrollo humano, urbano e industrial, así se tiene por ejemplo que volviendo a citar a Rodríguez Rojas:

«Durante los últimos 50 años, la esperanza de vida aumentó casi 20 años», de 45 en 1950 a 65,2 años en 2002 y 78 años para mujeres en países en desarrollo, pero en África subsahariana disminuyó a 46 años, principalmente por la epidemia del VIH/ SIDA, pero si hubiera un acuerdo entre los países más desarrollados ese escenario pudiera ser otro más optimista, como el que hizo el presidente Chávez en Venezuela donde se pudo avanzar bastante en el cumpliendo de las metas del milenio, mientras el mundo estuvo envuelto en guerras, algunas promovidas por Obama, que es un Premio Novel de la paz.

IX

En artículo reciente Bernardo Kliksberg (en «Hambre en América Latina», El Universal, Caracas, 25 de marzo de 2015) señala que: «América Latina es la única región del planeta que cumplió con la meta del milenio fijada por la ONU de reducir en un 50 % las personas que sufrían hambre desde 1990 al 2015», (p. 1- 8), «…los hambrientos cayeron de 69 millones en 1990-92 a 37 millones en el 2012-14»; sin embargo, es de hacer notar que no es un problema de producción de alimentos o bienes sino de acceso, sobre todo en América Latina «…que produce alimentos para tres veces su población, y que sin embargo presentaba vastos sectores en desnutrición, como los 45 millones que tenía Brasil, cuando Lula inició su presidencia», (ídem).

Sin embargo, en el caso de Brasil y toda la región se presentan serios desafíos, como la potenciar a los sectores campesinos con créditos y asistencia técnica que fortalezca su capacidad de concientizarse, organizarse y movilizarse en función del desarrollo sustentable, tanto económica y social como desde el punto de vista ecológico, lo que se llama desarrollo duradero; en ese sentido, dice Kliksberg puede jugar un papel muy importante la «Responsabilidad Social Empresarial y la sociedad civil en todas sus expresiones», por otra parte, «La Oficina Regional FAO elaboró un plan para alcanzar hambre cero en América Latina en el 2025, en el que las políticas de acceso son un pilar centrar. Fue aprobado por todos los gobiernos en el Celac (enero 2015)», (ídem).

Sin embargo, sigue diciendo este autor: «Se necesita más que nunca profundizar políticas contracíclicas en lo social» …. No se ha avanzado hacia transformaciones más profundas en los estilos y modos de vida, ha continuado la corrupción, el burocratismo, clientelismo e ineficiencia; o cuando intentan cambiar ese estado de cosas aún no han producido lo efectos esperados.

Es el anterior un contexto socio histórico concreto donde se dan las diversas manifestaciones musicales, entre éstas el rock y que recogen flagrantes contradicciones como bien se expresa en la siguiente cita de Londoño (2013):

 

«Estoy muy solo y triste acá en este mundo abandonado, tengo una idea, es la de irme al lugar que yo más quiera. Me falta algo para ir pues caminando yo no puedo, construiré una balsa y me iré a naufragar», así inicia La Balsa (1967), canción compuesta por Litto Nebbiay Tanguito (José Alberto Iglesias) e interpretada por Los Gatos, y considerada como una de las mejores de la música argentina y la abanderada de un movimiento que años más tarde se tomaría todo un continente: el rock argentino.

 

Los ochenta y noventa sin lugar a duda fueron la época dorada en la que, por coyunturas sociales, políticas y culturales, la música propia, en especial el rock en español, tomó fuerza. Las diferentes dictaduras del continente, principalmente la chilena y la argentina, así como la Guerra de Las Malvinas entre Argentina y el Reino Unido, desataron una prohibición de todo tipo de productos, como la música que proviniera de esos países con los que había enemistad. Las personas tenían que consumir lo de su país, no podían poner música de otro lado y paradójicamente favoreció al fortalecimiento de la música local».

Sin embargo, antes de este auge, ya estaban Charly García con sus bandas: Sui Géneris, La máquina de hacer pájaros y Serú Girán. También Luis Alberto «El flaco» Spinetta con Almendra, Pescado Rabioso, Spinetta Jade y Spinetta y los Socios del Desierto. Miguel Abuelo, de Los Abuelos de la Nada; Pappo, Sandro:

«México y Argentina son la cuna del rock latinoamericano, pero sin lugar a duda los argentinos nos marcaron mucho más. Pero ese fenómeno se extendió, tocando otros países vecinos y llegando con más fuerza a Chile y Colombia. Comenzaron los nombres de bandas y solistas que llenaron estadios de cánticos enardecidos de fanáticos que aún los siguen. Luca Prodan (Sumo), Jorge González (Los Prisioneros), Fito Páez, Rubén Albarrán (Café Tacuba), Roco (Maldita Vecindad), Vicentico (Los Fabulosos Cadillascs), Saúl Hernández (Caifanes), Elkín Ramírez (Kraken), Andrea Echeverry (Aterciopelados), Gustavo Cerati (Soda Stereo), el Indio Solari (Los Redonditos de Ricota), Andrés Calamaro (Los Abuelos de la Nada y Los Rodríguez) y seguramente muchos otros con gran trascendencia quedan por fuera, solo se trata de un panorama para entender el inmenso repertorio de talentos que marcaron la historia de un rock que fue completamente nuestro: la representación no solo de sonidos, sino de las realidades de cada país».

Ahora, es bastante claro que desde hace años, con la muerte de varios de los mencionados, la separación de algunas agrupaciones, los nuevos rumbos que varios de estos artistas les han dado a sus carreras y, por supuesto, la introducción de nuevas propuestas a la escena musical, hicieron que esa pasión que generó el rock latinoamericano, incluso llenando estadios, como lo hizo Soda Stereo, hoy solo lo logren las presentaciones de grandes bandas mundiales como The Rolling Stones, Guns N’ Roses o Metallica, o con festivales que reúnan a varios artistas en un solo espacio como lo es el Lollapalooza y en nuestro caso, el Estéreo Picnic.

«En países como Argentina y México me parece que hubo un estancamiento, respecto de lo bueno que hubo en los ochentas y noventas, y radica en que se acabaron los ídolos. Los ídolos no se reinventaron y las generaciones más jóvenes no suplieron esos vacíos, no hubo en Argentina quién se aventurara a retomar el legado de Calamaro o Spinetta, o un nuevo Soda Stereo, vivieron de una buena cosecha del pasado, pero no supieron reinventar el presente», expone el periodista y experto en rock, Jacabo Celnik.

Es allí donde surge la duda: ¿Qué pasó con el rock latinoamericano?, ¿se estancó, renovó o acabó?

«Diría que es uno de los mejores momentos, guardando las distancias de las épocas de Soda, Aterciopelados, Caifanes… Lo que hay es un relevo generacional, ese relevo no se quedó con el sonido del pasado, el clásico», expresa Diego Londoño.

La Vida Bohéme, de Venezuela, Eruca Sativa, de Argentina, Diamante Eléctrico y Telebit, por Colombia, son las agrupaciones que considera hacen propuestas interesantes en el panorama de América Latina. Sin embargo, es consciente de que a muchas personas les cuesta adaptarse a esta nueva generación musical, «porque aprendieron a querer tanto un sonido, una banda y no consideran que llegue otra», agrega.

Mientras para Jacobo Celnik, depende del país donde se mire: «Se ha avanzado bastante en el tema y Colombia es un ejemplo de un momento de desapego al rock, si bien todavía hay rock, las bandas aquí están más allá, hay más convergencias, más fusiones, más posibilidades que el clásico ritmo del rock and roll».

También considera que como parte de esa evolución hay solistas y bandas que resaltan, en su caso, tres: Monsieur Periné, Diamante Eléctrico y Edson Velandia (Velandia y La Tigra). «Ellos tres son el reflejo, cada uno a su manera, de lo que significa hacer música en estos días, pero no la encasillo como rock», puntualiza.

Por otro lado, hablamos con Juan Antonio Agudelo, coordinador de extensión cultural de la Eafit y conocedor del tema. «El referente que teníamos ha cambiado y seguramente ya no hay todo ese boom, pero hay gente que viene haciendo cosas importantes en la música latinoamericana. En Colombia se están consiguiendo experiencias muy interesantes, lo que se puede llamar la nueva música colombiana».

Así como Celnik, considera que Edson Velandia es un artista talentoso, porque «es un interesado por la literatura, por la escritura de sus canciones y la poesía».

Afirmativamente, asume que el rock se ha renovado, lo que ha traído tanto buenas figuras emergentes, como algunos desaciertos. «La generación de hoy está haciendo lo suyo, hacen las cosas a su manera con sus propias maneras de leer la sociedad», concluye.

A lo anterior se suma la voz de Chucky García, periodista y coordinador de Rock al Parque. Para él «la infraestructura que en un momento permitió que las bandas latinoamericanas fueran agrupaciones muy grandes y llegaran a un punto de vender muchas copias y llenar estadios, cambió definitivamente».

Nos explica que antes las bandas latinoamericanas, en su gran mayoría, eran fichadas por multinacionales discográficas, sonaban en las emisoras y un punto fundamental en esa consolidación, fue la llegada de MTV Latino, «porque les terminó de meter un superempujón a estas bandas y entonces llegó un momento en que tuvimos una camada de agrupaciones como Maldita Vecindad, Café Tacuba, Molotov, Fabulosos Cadillacs, Babasónicos… entre mal contadas teníamos 10 y 20 agrupaciones capaces de convocar miles de personas».

Ahora, las actuales, tienen un perfil más emergente y no tienen la capacidad de mover tantos espectadores. «Lo que creo es que hoy en cuanto al tema estilístico y de variedad vivimos un momento como nunca, antes había un solo eje temático, porque más o menos se parecían, pero hoy es lo contrario, lo que hace que la paleta de opciones se haya ampliado muchísimo».

No siente que el rock latinoamericano se haya estancado, simplemente encontró otras raíces, fusiones que van desde el folclor y jazz, hasta la música indie y el folk.

En su concepto hay muchas buenas propuestas en el país: Bomba Estéreo, Diamante Eléctrico, Los Petit Fellas, Monsieur Periné, Esteman.

Aunque cree que «el rock latinoamericano de hoy es música alternativa», pues sobresalen muchas banderas, desde las causas indigenistas, las feministas, la comunidad LGBTI, hasta la conservación del planeta, resalta algo que pasa desapercibido: «Hay algo tan obvio que a veces se pasa por alto y es que la música se trata de canciones y eso es lo que tenían las bandas de rock clásico, un repertorio de canciones que viven al tiempo».

En conclusión, el rock como lo conocíamos cambió, evolucionó, ahora lo podemos ver en una o muchas agrupaciones, depende de afinidades, pero las letras de esas canciones que marcaron alguna época de la vida siempre estarán ahí y no es cursilería, están en YouTube, Spotify, Deezer y el sinfín de plataformas que tenemos a la mano.

 

Jofre Leal (2012) sostiene que de 1950 a 1960 es cuando se desarrolla «la producción de rock en Latinoamérica, las bandas realizaban interpretaciones en español de éxitos de las agrupaciones más destacadas en Estados Unidos» siendo en esa cronología histórica musical:

 

«México uno de los primeros países con bandas que cantaban en español esos éxitos, pero hubo una en 1960 que tuvo gran influencia en América Latina y España, Los Teen Tops, que versionaron al español grandes hits para la época como La Plaga y Pototitos que han perdurado en el tiempo. La primera canción de rock escrita en español que consiguió convertirse en un gran éxito fue La Bamba y la interpretó Ritchie Valens en 1958. Valens era (México-americano). El segundo rocanrol en español que alcanzó la fama fue Tequila del también mexicano Danny Flores, quien se convirtió en el padre del rock latinoamericano. En 1959 un grupo mexicano que cantaba versiones en inglés llamados Los Locos del Ritmo tendía a mezclar su repertorio con música de su autoría y de allí salió el primer gran éxito del rock en español, compuesto por una banda iberoamericana, titulado Yo no soy un rebelde. Para comienzo de los 60, gracias a la radio y la televisión el rock es tomado como una moda por la juventud de la clase media mexicana y así nace el primer gran movimiento de rock en castellano, como un fenómeno pop mediático creado por los medios de comunicación. En esa misma época, en otros países bajo la influencia de la música de Bill Haley & his Comets, así como de Elvis Presley, comenzaron a conformarse bandas de rock. Mr. Roll y sus Rocks, Billy Cafaro, Los Gatos Salvajes, Sandro y los de fuego, Los Dukes (primera banda en la que tocó Tanguito), Los Gatos, en Argentina; Los Shakers, Los Mockers y Los Walkers, en Uruguay; Los Daro Boys, The Speakers, The Flippers, The Young Beats, en Colombia, fueron algunas de ellas. En los 60 el guitarrista mexicano (después naturalizado estadounidense) Carlos Santana, tocaba en clubes norteamericanos canciones en español e inglés, hasta llegar a tocar en 1969 en el mítico concierto de Woodstock al lado de otros grandes del rock mundial como Jimmy Hendrix y Janis Joplin. Santana se convierte en el primer mexicano y latinoamericano en dar a conocer el rock latinoamericano y en español en el mundo. El cock comienza a ser censurado por los mismos medios que ayudaron a su auge y durante los 70 pierde fuerza en la región. Para mediados de los 80, el rock resurge en Latinoamérica con el fenómeno denominado Rock en español y por primera vez la industria de la música ve al género como un producto».

 

Más adelante agrega que «Para esta época la influencia llega desde España, gracias al movimiento de rocken español (avalado por el pionero del rock español Miguel Ríos) y por el fenómeno musical «La Movida madrileña». De allí surgieron bandas con una gran proyección internacional como Alaska, El último de la Fila, a las cuales les seguirían otras como Héroes del Silencio, los Hombres G, Cómplices, La Unión, entre otras». Por su parte «En Latinoamérica se empiezan a conformar bandas musicales que dejarían huella en el rock en español como Miguel Mateos y Zas (quienes se convierten en los primeros en ser apoyados por grandes disqueras), Charly García, Soda Stereo, Los Enanitos Verdes, en Argentina» y cuyas principales expresiones se dieron:

 

«En México Caifanes, Maldita vecindad, Café Tacuba, los Enemigos del Silencio, Fobia, Maná, entre muchas más, firmaron con sellos discográficos multinacionales especialmente BMG Ariola y Sony Music. En 1997 las bandas que ya vendían un gran número de álbumes dentro de sus países empezaron buscar la internacionalización. En Argentina lo consiguieron Charly García, Soda Stereo y Andrés Calamaro. Por Venezuela bandas como Sentimiento Muerto, Zapato 3, Caramelos de Cianuro y otras con un movimiento de rock independiente que presentaron propuestas con una fusión de ritmos como Los Amigos Invisibles con estilos denominados funk folclórico. Cada 13 de julio se conmemora el Día Mundial del Rock. Esa fecha fue la elegida tras el concierto «Live Aid» celebrado en 1985 de manera simultánea en el estadio Wembley en Londres y en el estadio JFK de Filadelfia. Este concierto recaudó en ese entonces casi 40 millones de euros y se recuerda como mágica la actuación de Queen, catalogada hasta el momento como la mejor actuación del rock en el mundo» (ídem).

Galván (2012) resume la historia del rock latinoamericano de la siguiente manera y en un contexto contemporáneo y actual que conviene citar sin mayores intervenciones para dejar que la narración fluya en el tono periodístico que asigna su autor. En efecto,

 

«Latinoamérica posee una gama extensa de sonidos, de tendencias musicales, de cultura sonora. Desde Tijuana hasta la Patagonia abundan las formas, los estilos, las interpretaciones, los sonidos; con cada uno de ellos se vislumbra una interpretación de la vida, una asociación interminable entre el sujeto que escucha y la onda sonora que se manifiesta. Los latinos hemos generado muestras musicales propias, asociamos nuestros entornos y los volvemos tangibles y simbólicos a través de distintos ritmos. Latinoamérica le ha dado al mundo sonidos tan emblemáticos como la samba, la cumbia, el son, la salsa, el reggae, el danzón, la chicha y el ska. Sin embargo, también hemos adaptado uno de los ritmos más significativos del siglo XX: el rock El rock nació en Estados Unidos como una representación del mestizaje cultural: la cultura de sobrevivencia de los afroamericanos, la rebeldía de los blancos hijos de la gran represión y las condiciones sociales de cambio de la posguerra impulsaron la cultura musical que marcaría tendencia en las décadas posteriores».

 

Más adelante agrega que así:

«Nacía el rock and roll; se levantaba la cultura rebelde, de protesta, de reclamos y de darle presencia a los jóvenes y hacerlos partícipes de algo. Mientras eso sucedía en Estados Unidos, en Latinoamérica empiezan a surgir pequeños movimientos, auspiciados por el mass media, que buscan emular parte del discurso «rockero» norteamericano. En México se importó todo un modelo y se suavizó en las voces de Angélica María, Alberto Vázquez, Cesar Costa y Enrique Guzmán. En Sudamérica, el rock empezó a tomar dos vertientes: una más ligada al subterráneo como Los Saicos de Perú y otra, mucho más ligada a la estética norteamericana, como Sandro en Argentina. Con el paso de los años y con la expansión musical que gracias a The Beatles se dio en el mundo, el rock latinoamericano fue tomando forma. La llegada de las dictaduras militares fue una pausa para el desarrollo de la mentalidad protestante del rock. A pesar del clima de represión, la actitud simbólica del rock tomó otras formas en las voces de Chico Buarque, Violeta Parra y Víctor Jara en Chile».

Esa propuesta estética musical, pero de contenido político rebelde trajo algunas consecuencias tanto en el plano social como en la forma de expresarse social misma su lírica de rasgos míticos y prohibidos, según sigue contando el relato siguiente:

«En toda la región, la represión provocó que se fueran generando los míticos «hoyos funkies» donde empezaron a surgir agrupaciones legendarias y la música se pasaba de uno en uno, cual producto prohibido y reprimido. El rock se volvió subterráneo, las juventudes de los sesentas y los setentas tenían que ver de lejos los grandes movimientos musicales que venían de Inglaterra y Estados Unidos; adiós al punk, adiós al metal, adiós al progresivo. La modernidad musical venía suavizada con la balada y los grandes dramones musicales. Ante este clima, la juventud latina encontró formas de escape, los grupos musicales comenzaron a importar los movimientos culturales anglosajones; iniciaba el mestizaje musical. Con la llegada de los años ochenta y de la instauración de la televisión como el medio masivo por excelencia, el movimiento de rock en español tomaría fuerza. La semilla que plantaran las voces de Charlie García y Three souls in my mind; las guitarras de los Dug Dugs y Los Lobos; la fuerza de Vox Dei y Álvaro Peña, florecería en esta década. El surgimiento del movimiento del «Rock en tu idioma» trajo consigo la masificación del rock latinoamericano, surgieron Soda Stereo, Caifanes, Enanitos Verdes, Miguel Mateos, Paralamas, Ekhymosis. Las grandes disqueras pusieron sus ojos —y temibles garras—sobre las agrupaciones latinoamericanas. Surgía un mercado musical, un proyecto que explotar y vender. La actitud e ideología del rock se diluía con el poder de las grandes corporaciones: el rock murió en los ochentas, pero dejó un legado que provocó su posterior resurgimiento» (ídem).

El rock como género musical

Sostiene también el autor anterior que «En nuestra región continental surgió algo maravilloso: podemos hablar del rock como género musical, pero también podemos hablar del rock como una actitud. El rock no sólo es la forma, también es el fondo; la música va más allá de las fronteras puritanas que encasillan las notas musicales», agregando que se trata de una expresión hibrida al referir que:

«El mestizaje musical se ha hecho presente, la semilla importada desde Estados Unidos floreció en las tierras del sur del continente; la flor cambió y se enriqueció. La música combinó las guitarras con las jaranas, el folclor latino se apoderó del género musical y lo hizo nuestro: le dio cara y cuerpo latino, le dio forma y sonido, un nuevo génesis se vislumbraba. Las fusiones musicales empezaron a tener éxito, tanto a nivel comercial como a nivel creativo: Café Tacvba conquistó el continente con una mezcla de ritmos folclóricos; Illya Kuryaki and The Valderramas levantaba el puño a ritmo del hip hop mestizo sudamericano; Aterciopelados rescataba la canción de protesta en un nuevo contexto globalizado; Los Fabulosos Cadillacs ponían nuevamente los oídos de todo el continente en Argentina. Todos eran parte del nuevo rock latinoamericano.En pleno siglo XXI, la avanzada musical vino otra vez desde Inglaterra, la camada de agrupaciones «indies» nos enseñaron que la música también era autogestiva. Muchos grupos decidieron aventurarse hacia el movimiento de «hágalo usted mismo»; el resultado ha sido sorprendente y alentador: empezamos a vislumbrar un cambio generacional en el movimiento musical latinoamericano».

En lo que se refiere a México acota con orgullo que:

«la situación musical es de bonanza: tenemos festivales, público y agrupaciones en cantidad. Poco a poco agrupaciones como Zoé, Chikita Violenta, Austin TV, Panteón Rococó, Kinky y Nortec Collective: Bostich Fussible, han hecho el relevo generacional y se convirtieron en los nuevos estandartes del rock nacional. Nuestro país se ha vuelto una centralita de difusión de propuestas musicales, un polo donde los músicos latinoamericanos buscan un espacio, con un público vasto y en su idioma. México hoy representa el mejor mercado para el rock latino, muestra de ello es el Festival Vive Latino que, tras 12 ediciones, se ha consolidado como el lugar ideal para recibir y exponer propuestas musicales de toda Latinoamérica».

Por su parte, señala algo muy particular en lo atinente al sur, así acota que:

«Un caso especial se vive en Chile, en los últimos diez años ha surgido una generación de músicos que están haciendo muy bien su labor. Los músicos chilenos se encuentran en una época de bonanza: Javiera Mena, Francisca Valenzuela, Lucybell, Pedro Piedra, Perrosky, Los Bunkers, Fernando Milagros, Gepe, Astro, Dënver, y la lista puede continuar. Sin duda Chile se ha vuelto un polo artístico y en la actualidad son el gran importador de propuestas musicales independientes del continente. El otrora gran vanguardista del rock latino, Argentina, se encuentra en una fase de renovación. Los grandes monstruos argentinos se encuentran en receso y dan paso a la consolidación de otros tantos: Bersuit se provocó un revulsivo y empieza una nueva historia sin la voz de Gustavo Cordera; Los Auténticos Decadentes celebran 25 años de vida y se convierten en la punta de lanza de la nueva generación de músicos argentos; Kapanga y Los Caligaris levantan la mano para marcar una historia propia en la grandeza musical de Argentina. La música independiente argentina se encuentra preparando el paso para una nueva generación de artistas, aquellos que regresarán, en algún momento, el geocentro del rock latinoamericano al sur del continente».

La cuestión en la zona del caribe y los andes es diferente respecto a esta propuesta musical y destaca en concreto que:

«En otras regiones de Latinoamérica también se están gestando movimientos de rock independiente de gran interés. Venezuela levantó la mano con Los Amigos Invisibles, una avalancha de funk folclórico que ha logrado internacionalizarse; Los Telecaster siguen siendo la una de las agrupaciones de rock más interesantes de la región y Los Mentas completan la avanzada de agrupaciones de este país. Ecuador nos heredó a Eljuri, una mujer con el temple suficiente para elevar un solo de guitarra hasta el mismo cielo. Colombia es la casa de Dr. Krapula y Bomba Estéreo, ambas propuestas muy interesantes del nuevo sonido latinoamericano. Uruguay pone a El Cuarteto de Nos y No te va a gustar como los nuevos representantes de la escena independiente nacional. Paraguay tiene en Kchiporros a los elegidos para llevar la bandera del movimiento urbano, música que refleja lo que ocurre en las calles y que da esperanza y genera conciencia en sus escuchas. Un caso muy particular viene desde Puerto Rico: Calle 13. La agrupación de música urbana se ha convertido en los nuevos abanderados de las causas sociales del continente. En su música buscan generar diferenciadores que hagan un poco de conciencia de lo que pasa en toda la región. Sin duda, son hoy la agrupación estandarte de la región; su voz tiene alcance mediático y no tienen miedo de defender el orgullo latinoamericano en cualquier lugar que se presentan» (ídem).

Al hacer una proyección el autor que aquí se sigue acota que la música popular urbana adoptada al contexto latinoamericano y caribeño como el rock ha venido adquiriendo ciertas características que conservará y replanteará en el futuro, o como él denomina «Cuando el futuro nos alcance»; así acota que:

«Si volteamos a nuestro alrededor, encontraremos en el rock latinoamericano nuevas formas, nuevas maneras, nuevos conceptos; sin embargo, mantienen el mismo fondo: la rebeldía, la protesta y la inclusión. Hoy el «rock» ha mutado, se ha fusionado con la sangre latina. Podemos hablar de una actitud «rockera», de una ideología común entre estilos, pero también podemos hablar de una comunión cultural que se está dando en nuestra región. El día de hoy encontramos una amplia gama de proyectos musicales originarios de Latinoamérica; la independencia es la nueva panacea de la región. Los países sudamericanos viven una bonanza artística, México posee las mejores plataformas para la proyección y la venia musical regional parece estar en su mejor momento. Las propuestas de calidad empiezan a ser más numerosas, los millones de jóvenes están esperando por escucharlos; solo esperamos que esa actitud y dinamismo del rock latino siga presente, perpetuo. Que crezca, que cambie, que continúe vivo; que las manifestaciones musicales no paren, el rock es un sueño que poco a poco se vuelve realidad. ¡Despiértame cuando pase el temblor! En Sudamérica, el rock empezó a tomar dos vertientes: una más ligada al subterráneo»

Por su parte, Montiel Cupelo (2002) al realizar una periodificación de esta expresión musiscal destaca que:

«El Rock de Latinoamérica, que no debe ser confundido con el género rock latino, es el término usado por los especialistas para designar a la música rockque se ha hecho en Hispanoamérica, el Caribe de habla no española, Brasil y en la comunidad latina de los Estados Unidos. Este término abarca más que rock en español realizado en Hispanoamérica ya que no discrimina a las bandas que interpretaban en inglés como La Revolución de Emiliano Zapatade México así como al rock de Brasil, el ska jamaiquino o la soca caribeña. Las primera manifestaciones de una rocka iberoamericana se generaron en la región que integran México y California (Estados Unidos). Por un lado apareció el hit mundial de «La Bamba«, adaptación de una canción tradicional mexicana realizada por Ritchie Valens, alías del californiano-chicano Ricardo Valenzuela que originó el llamado rock chicano, del que emergerían luego figuras mundiales como Carlos Santana y Chris Montez. La repentina muerte de Valens en un accidente de aviación, truncó la posibilidad de que existiera una figura latina desde el origen mismo de mainstream del rock internacional. En el Perú el grupo «Los Saicos«, crea el punk, destacando entre sus temas Demolition. Simultáneamente en UruguayMéxicoBrasil y Argentina comienzan a aparecer figuras locales que interpretan rock and roll. Pero fue México donde se produjo el primer «boom», con el apoyo de la radio, la televisión, las compañías discográficas, la prensa, el cine y el público. Luego del éxito temprano de Gloria Ríos, surgieron una serie de agrupaciones como Los Teen TopsLos SinnersLos Blue CapsLos Black JeansLos Locos del RitmoLos HooligansLos Loud JetsLos Crazy Boys y muchísimos otros».

De seguidas agrega que:

«Existe una polémica sobre la verdadera relevancia de esta época para las décadas posteriores. Algunos dicen que lo único que fueron es convertirse en productores de refritos, es decir, ponerle letras en castellano a los hits de los rocanroleros estadounidenses Elvis PresleyChuck BerryBo DiddleyLittle RichardJerry Lee LewisBuddy Holly o Fats Domino. El argentino Kay Galifi, uno de los integrantes de la banda Los Gatos, se refiere así al momento en que le apareció la pasión por el rock, cuando la banda mexicana Los Teen Topsse encontraban de gira en Argentina, en 1962: (Fue) allá en Rosario. Bueno, una vez oyendo radio en el comercio de mi papá escuché un grupo mexicano… Los Teen Tops, exactamente. Cuando oí aquel sonido de Strato, quedé loco. El timbre era brillante. Fui a verlos tocar en el auditorio de la radio. No conseguí. Había mucha gente. Conseguí verlos después en un club. Cuando vi a los tipos tocando en el escenario, todo aquel clima, enloquecí y pensé: «es eso lo que yo quiero». Entonces le hice unos agujeros a mi guitarra, le puse dos cositas, un pedazo de hilo y pasé a tocarla como si fuese una guitarra eléctrica.1​ Luego aparecieron Sandro (quién terminaría desarrollando una versión latina de Elvis fusionada con la música romántica y una base roquera, que daría origen a la balada romántica) y el Club del Clan en Argentina, cantando en español; Roberto Carlos y su Joven Guardia en Brasil cantando en Portugués; los Shakers en Uruguay; los Los Flippers en Colombia y los Impala en Venezuela«.

Otros aspectos destacables son del siguiente tenor y destaca por la adaptación que se hace del género en el contexto regional continental, lo que introduce una nueva variante en lo referente a la identidad cultural y a la incorporación de otros rasgos culturales en el marco de la modernidad tardía de nuestros países, así expresa que:

«Debido a la influencia de Los Beatles, a mediados de los años 1960 aparece uno de los movimientos más populares denominado «La Nueva Ola«, que era un estilo que seguía el merseybeat combinado con la canción italiana, e incluso, bolero. Bandas como Los Iracundos o Los Ángeles Negros serían las más notables. En la medida que la influencia psicodélica se hacía más presente, las bandas empezaron a incursionar en nuevos experimentos que podía ir desde la estética, la música o la vestimenta. En Argentina, el éxito entre la juventud de La Balsa, interpretada por Los Gatos en 1967, se masificó lo que dio en llamarse «rock nacional» abriendo camino a una generación de bandas y músicos de gran popularidad entre el público juvenil, como ManalAlmendraArco IrisMorisVox DeiLos Abuelos de la NadaTanguitoLos NáufragosBanana, seguidos luego por otras como Pescado RabiosoColor HumanoAquelarrePappo’s BluesLa Pesada del Rock and Roll y Sui Generis. En Brasil, desde 1967 Caetano Veloso, junto con Gilberto GilGal CostaRita Lee y Os Mutantes, dieron forma al «Tropicalismo», uno de los movimientos más originales de la época, donde se trata de modelar una nueva forma de hacer música brasileña a partir de la influencia del rock. En Colombia, estaban Los FlippersLos Yetis y The Speakers como grupos más destacados. El álbum En el maravilloso mundo de ingeson es considerado como obra maestra de la psicodelia latinoamericana. En Uruguay, aparece El Kinto y luego Tótem, con el candombe-rock, y en ChileLos Jaivas se convierten en los forjadores del rock con tintes andinos».

Otro aspecto sobresaliente tiene que ver con la identidad lingüística, base de todo registro cultural y elemento de identidad y pertenencia en la que los creadores se la juegan en esos tópicos, pues:

«En México, Los OvnisLos MonjesEl Klan sorprenden con composiciones originales y garageras y aparece lo que se denominó «la Onda», con Javier BátizRaul HitlerKaleidoscope (banda)Reinaissance (banda)Los Dug DugsLove Army, Soul Force, Three Souls In My MindTequila (banda) y Last Soul Division, donde la gran mayoría cantaba en inglés. Se quisieron emular a Woodstock y los grandes festivales como Monterrey Pop o Isla de Wight. En la capital Argentina se hacían los B.A. Rock (Buenos Aires Rock); en la capital Mexicana el Festival Rock y Ruedas de Avándaro que fue por muchos años el máximo festival de Iberoamérica en tamaño y asistencia y un gran parteaguas en la historia contemporánea de México, y en Caracas el Festival del Parque del Este (donde para entrar había que llevar solamente una flor). Todo eso chocó con una sociedad donde veía a los roqueros como drogadictos y una juventud alienada y caótica se veía emerger. Las políticas dictatoriales, ya sean de izquierda o derecha, reprimieron estos focos de diversas maneras, hasta el punto donde en la mayoría de países se detuvo el desarrollo del rock por ese entonces. Los años 1970 fueron una década muy difícil, pero muchos artistas se adaptaron a los tiempos, ya sea tomando posturas menos encausadas o simplemente volver al concepto minimalista de solo la música y nada más. Esa fórmula les sirvió a 2 artistas argentinos que harían una discografía prolija en distintas bandas durante esos años: Charly García y Luis Alberto Spinetta. En México se cuentan por decenas los grupos a inicios de la década del 70, entre los más importantes La Revolución de Emiliano ZapataEl Ritual (banda)Enigma (banda)NáhuatlNuevo México (banda) y el importantísimo Three Souls In My Mind. En Colombia la banda más destacada fue Génesis del músico Humberto Monroy, que mezcló los sonidos andinos de su país con el rock».

El hecho de que el rock sea una manifestación de la cultura global tiene vinculaciones con otras expresiones musicales y movimientos culturales en el contexto de la historia contemporánea y actual, veamos cómo la enfoca el autor que seguimos, pues, acota que: «Influenciados por los diferentes movimiento internacionales: el fenómeno Punk, la New Wave, el Postmodernismo, etc., con bandas como The ClashThe Sex PistolsThe CureThe PoliceThe B-52’sTalking HeadsDevoDepeche Mode y muchos más, en los países iberoamericanos surgen una serie de bandas a la saga del sonido del Nuevo Rock».

El rock como parte de la cultura de masas es caracterizada por Montiel Cupello se expande desde lo local y regional entrando en el circuido del mercado mundial del entretenimiento y los negocios sujetos al marketing comercial típico del capitalismo, en efecto dice que:

«Muchos de los rockeros argentinos firman con las transnacionales y esto les garantiza distribución Latinoamericana. Por su parte, el Rock Español comienza a hacer otro tanto y apuesta a Latinoamérica para expandirse. Ambos movimientos ya presentan propuestas sólidas, interesantes, bien grabadas, etc. Así, una serie de profesionales de la comunicación social (prensa, radio y t.v.) comienza a interesarse progresivamente en el fenómeno de un Nuevo Rock Iberoamericano con grupos buenos, incluso más allá de Argentina y España; y aparece un público que se engancha con esto del Rock Iberoamericano, cantado en nuestros idiomas y acerca de nuestras realidades. Como el caso de Los Prisioneros, por tomar un ejemplo, y la letra de su tema «Latinoamérica es un Pueblo al Sur de Estados Unidos» o el Peruano Miki González y su tema «Puedes Ser Tú» donde se refiere a situaciones de represión estatal, golpes militares y narcoterrorismo. Es decir, música que trata de estar acorde con la realidad de nuestros países y sus actuales situaciones dejando a un lado toda alienación de potencias extranjeras que jamás podrían dar algún tipo de identificación contundente en nuestra juventud».

En cuanto a los giros propiamente técnicos y características estéticas este autor sostiene que ha logrado asumir ciertas características particulares y que están en las siguientes dimensiones sonoridades, ideas y manifestaciones líricas:

«El rock iberoamericano de los 80 comienza a incorporar sonoridades e instrumentos autóctonos, como sucede con Fito Páez y los aires tangueros de «Giros«, las raíces en la sambay la bossa nova de los Paralamas do Sucesso, el Ska y el reggae de Jamaica, el soca trinitario, el zouk martiniqueño, la música negra de Estados Unidos y los sonidos del África madre. En este orden de ideas es interesante recordar unas declaraciones de Fito Páez para la prensa venezolana en octubre de 1987, cuando produjo el primer disco de Sentimiento Muerto: Hay un rock que es distinto al sajón porque se vive en otro lugar. No es lo mismo un tipo que vive en Nueva York que otro que vive en Buenos Aires: hay distintos problemas, vas a distintas carnicerías, panaderías, se habla otro idioma, las chicas son diferentes. A eso se le suma que la manera de cantar de los musicos latinos son únicas y muy peculiares en cada region, ya sea en ritmo de funk o de chacarera. No es como dicen por ahí que el rock es imperialista. Éste es un concepto muy de los sesenta, de los libros… Para fines de la década del 80 lo que se denominaba indistintamente «rock en tu idioma», «rock en español», «rock nacional» o «rock latino» ya era un fenómeno de masas juvenil internacional que abarcaba almenos ArgentinaBrasilChileColombiaEcuadorMéxico PerúUruguay y Venezuela. Bandas argentinas como Soda StereoGITCharly GarcíaFito PáezMiguel Mateos y Los Enanitos Verdes viajaban por toda América Latina. Los Paralamas do Sucesso de Brasil tocaban en Uruguay, Argentina, Chile, Paraguay y España. Y los discos de Los Prisioneros de Chile eran editados en Perú, Colombia y Venezuela».

Ya en la última década del siglo XX el rock ya contaba con varias generaciones de cultores, forma lo que se ha llamado «cultura rock» compuesto tanto por diletantes como los creadores musicales propiamente, además de los industriales o promotores, véase la narrativa que a continuación se cita:

«La década de 1990 consolidó el estallido del rock iberoamericano como fenómeno internacional juvenil masivo. Las bandas comenzaron a desarrollar nuevos sonidos, experimentando con fusiones de todo tipo, sin abandonar la pretensión de llegar a cada vez mayor cantidad de jóvenes. Entre los ejemplos más notables se encuentran,2​ Soda Stereo con sus poderosas letras y potente música siendo una de las bandas más influyentes dentro de la escena del rock no solo en Latinoamérica sino a nivel internacional y Café Tacuba, con sus notables fusiones de fuentes diversas, que integró toda una generación de notables bandas que dominaron en el plano internacional, como los mexicanos CaifanesKenny y los EléctricosEl Tri y Maná quienes domino el rock en México y abrió las puertas a todos los grupos que le siguieron del rock mexicano, en México es considerada como la banda más influyente e importante del país, Caifanes también fue de las bandas más importantes del rock en español junto con Soda Stereo y Héroes del Silencio. Por Chile se destacaron Los TresLa Ley y Lucybell; y por Colombia Aterciopelados. En esta década también comienzan a instalarse ámbitos comunes para el rock iberoamericano, como la aparición del Premio Latino dentro de los Premios MTV, primero, y luego (ya en los años 2000) la organización de los Premios MTV Latino. La primera década del siglo XXI ha visto como tanto el rockcomo el pop iberoamericano comenzaron a ocupar primeros planos mundiales de manera sistemática y ya no solo como productos exóticos para la cultura anglosajona. Fenómenos como los Premios Oscar que fueron ganados por en el uruguayo Jorge Drexler en 2005 con la canción «Al otro lado del río» de la película «Diarios de motocicleta«, (2006/2007) ganados por el roquero argentino Gustavo Santaolalla, o la popularidad de la banda Mexicana Jaguares a nivel internacional, señalan que el rock iberoamericano ha dejado definitivamente de ser una manifestación local del rock, para afianzarse como una corriente internacional autónoma. Simultáneamente, la música rock «latino-caribeña» en inglés, ha crecido en la consideración del público juvenil internacional, con grupos como The Fugees o géneros como la soca, influyendo asimismo poderosamente en los nuevas composiciones que va desarrollando el rock mundial. El fenómeno no puede ser desconectado de un fenómeno similar (o mayor) para el pop latino, con estrellas globales como la colombiana Shakira , boricua Ricky Martin o la banda Rock Pop Maná, ni de las implicancias culturales del proceso de latinoamericanización de Estados Unidos, que ha generado un enorme mercado internacional para la música iberoamericana».

La historia del rock latinoamericano, sugieren las citas anteriores, presentan una lírica que, a su modo, recoge el estado de la cuestión social y cultural de las sociedades de la región. Un mundo desolado o abandonado, tanto por las tradiciones ancestrales originarias de los pueblos indianos como de los indicadores estándar del progreso moderno; la lírica de José Alberto Iglesias, fundador del rock argentino, expresa en una de sus canciones que: «Estoy muy solo y triste en este mundo abandonado, tengo una idea, es de irme al lugar que yo más quiera. Me falta algo para ir pues caminando yo puedo, construir una balsa y me iré a naufragar», 1967, interpretada por «Los Gatos».

El poeta y compositor musical si bien mantiene una autonomía relativa respecto del entorno sociocultural en el que actúa indirectamente, sintetiza en sus creaciones lo que hemos llamado aquí «la cuestión social», lo que inquieta el espíritu en un contexto histórico concreto. Por ejemplo, la aspiración de huir de un mundo abandonado, hacer una balsa y naufragar o, en todo caso, exponerse a peligros ingentes, ya que en el continente latinoamericano predominaron en las décadas de 1970 y 80 las dictaduras militares y conservadoras que aplicaron políticas de represión frente al diferente e intolerantes frente a los movimientos de inspiración izquierdista marxista, percibidos como enemigos de la nación, la familia y las tradiciones propias del régimen de cristiandad católico o evangélico fundamentalista; ello en el marco general de la llamada Guerra Fría».

La nueva generación musical tuvo al menos tres dimensiones apofánticas del nuevo espíritu reivindicativo del ser, libre y plural, a saber, (a) en el plano psicológico, reafirmación de la dignidad de la persona humana frente al poder de las ideologías de la «Seguridad Nacional» e «Internacional de las Espadas» con su «escuadrón de la muerte» o «Cabalgata» en connivencia con el modelo de neoliberal que se expande desde los centros más dinámicos de la economía capitalista; (b) los movimientos sociales y musicales llevan en sus entrañas una reafirmación de la industria cultural en varias naciones latinoamericanas y caribeñas; (c) tales movimientos sociales, musicales y culturales contienen, a su vez, una propuesta política que reivindica la democracia fundamentada en los Derechos Humanos, la universalidad, la interculturalidad y, en casos más extremos, hasta la anarquía; de tal suerte que la música rock constituye una inserción con un estilete muy cortante en sociedades desiguales e inequitativas, ya que de hecho parece que «los caballeros del sonido y el metal», como denomina Paul Gilman a los rockeros, portan una peligrosa semilla de rebeldía.

Esta corriente musical que es el rock de origen inglés británico y norteamericano, en su evolución en Latinoamérica y el Caribe, al realizar interpretaciones o traducciones de los grandes éxitos sobre todo de grupos musicales famosos de Estados Unidos, incorporan tópicos culturales foráneo, lo que contribuye al llamado fenómeno de la transculturización o pérdida de la identidad regional y local o aún nacional. Piezas musicales como «La Plaga», «Polotitos», «La Bomba» fueron las primeras versionadas, luego realizaron canciones propiamente en español, entre otras canciones aparecen «Tequila», «Yo soy un rebelde», eso en las décadas de 1960, 1970 y 1980; lo que en España dieron en llamar «La movida madrileña», claro, en el marco de la transición dictadura franquista-democracia socialista o popular, una novedosa experiencia que las generaciones antiguas y maduras se mostraban dubitativas y la juventud pedía a gritos. Es parte de lo que del Val Ripollés (2014) denomina «Roqueros Insurgentes, Modernos Complacientes: Juventud, Rock y Política en España (1975-1985)» como se lee en su «Memoria para optar al grado de doctor en la Universidad Complutense de Madrid», donde sostiene en más de quinientas páginas que se trató de un movimiento que expresó los cambios los cambios culturales con los que la juventud vivía la transición en el campo político, uno de cuyos productos vino a ser el rock, ya que textualmente expone que el propósito de trabajo académico fue:

«En resumen, analizar este período de la música popular española puede ser útil para conocer un momento clave de este campo cultural, cuyas dinámicas aún están presentes en España. ejemplo de ello es que de este período surge una «inteligentsia» cultural que todavía hoy sigue teniendo peso en la música, el periodismo, el cine u otras disciplinas artísticas afines, como ha mostrado algunos trabajos de Val, Noya y Colman (2014) acerca del peso que los grupos de la Movida madrileña tienen en la construcción del canon estético del pop-rock español» (p. 10).

También en Latinoamérica y el Caribe el movimiento cultural expresado en el rock retrata una época sociohistórica y un momento político, ya que las reglas del arte comportan una reproducción de las condiciones actuales, junto al anuncio de ciertas condiciones eventuales de las realidades futuras que posiciona conceptos y procesos nuevos, formas y estructuras que si bien se desprenden de anteriores estados de la «cosa social actual» o presente en un tiempo histórico dado, no son su continuidad; esto es, las canciones con sus ritmos y lírica, no son sólo piezas artísticas sino cuerpos y texturas de ideas, representaciones y paradigmas en el hacer intelectual y el sentir emocional. Esto es, que se afectan los planos prácticos-contemplativos, es lo que Bourdieu llama «Campos» (De Val, ob cit, 2014, p. 57), nuevos estilo y expresiones de subculturas que pueden ser formas de resistencia simbólica ante la cultura hegemónica (ob cit., p. 63). O sea, un estilo y formas rituales de consumo de bienes culturales que delimitan identidades individuales y sociales, personales e institucionales.

X

Aclaremos que estilo es gusto, preferencia estética, ética y política. Un nuevo modelo de comunicar ideas y sentimientos a través de la música y de consumir productos de la industria cultural que tiene un registro económico expresado en la ecuación patrimonial de la contabilidad y la balanza de pagos, pero incluye también el consumo simbólico que crea o destruye posibilidades de realización humana mediante una representación diacrónica y sincrónica de una vida en un medio urbano-industrial, donde además existen ciertas formas aceptadas de «hacer música» (ob cit., 2014, p. 74); una perspectiva estética que impone los gustos. Así se tiene que el rock constituye una forma discursiva tanto en la música popular como en formas de vida particular en sociedades industriales, urbanas y modernas que requieren renovarse o reinventarse en los referidos planos material y simbólico.

Por otra parte, el creador musical o de otras disciplinas afines de las artes visuales o literarias hace propuestas contra el orden social dado históricamente en sociedades asimétricas, genera rupturas, lo que generalmente se asume como parte de los avances de las vanguardias, que dan lugar a discusiones en entornos convulsos o con los que metafóricamente le «toman el pulso» o la temperatura al nivel del desarrollo social, artístico y político; los creadores son, en síntesis, un indicador del «estado del arte» de la ciencia, la técnica y las humanidades, pues por una parte hace una abierta o soterrada crítica y por la propone que, en el caso de la música, sus letras constituyen una forma de comprender líricamente con la razón sintiente la situación espiritual de una época, de tal suerte que la estética se convierte así en una mordiente posibilidad de conocimiento. O, al menos, en una aproximación doxográfica que describe desde la vivencia subjetiva el movimiento de la dinámica social en un período determinado. En síntesis, también el músico puede ser un cronista político no tan anónimo de la realidad cultural y política sino ser un agitador de las masas populares en cuya voz se expresan ellos, al modo de los rapsodas antiguos o los trovadores medievales.

Ahondando en esto, podemos decir que la poesía lírica presente en las canciones de rock son un lenguaje, una posibilidad de crear realidades o confrontarlas, una vía de modelar un cuerpo social futuro sustentado en libertades, justicia y paz; porque, como ya se ha dicho previamente, existen otras posibilidades de crear saberes en paralelo a los procedimientos tradicionales de la «ciencia normal» en términos de Khum (1963) o modelo empírico analítico. La develación de las estructuras sociales básicas, lo que está debajo o detrás de las apariencias formales, los intereses ocultos, las creencias aviesas y las percepciones fantasmagóricas de las ideologías; o las consecuencias secundarias que afectan a la naturaleza o la vida de las personas humanas debido a la aplicación reduccionista y con visión parcial de las técnicas o productos contaminantes de industrias o las distorsiones comerciales de su comercialización; suelen ser identificadas y mejor descritas por los artistas, aunque no necesariamente orienten sus creaciones bajo la perspectiva del «realismo social»; si no que, per se, sus propuestas estéticas pasan a formar parte de la sociología del conocimiento, ya que como ya se ha dicho la crítica a los modos de hacer ciencia, resolver problemas y vivir en conciencia vigilante, dibujan verdades de acuerdo al contexto y con fines de afirmarlo o subvertirlo, labor esta que el rock ha asumido con denuedo como cultura underground.

En este sentido, Giusti (2014) al abordar la cultura rock sostiene que «este propone prácticas culturales y establece vínculos de identidad y comportamiento social que se enfrentan y/o coexiste con el orden institucional de un modo estético y artístico» (p. 1); en todo caso, el rock es un «sistema discursivo» a medio camino entre la industria cultural o de masas y la contracultura, puede vender gran cantidad de álbumes en el mercado musical, produce riquezas, banaliza asuntos humanos complejos pero, al propio tiempo, muestra ingentes luchas por cambiar el sistema de representaciones y prácticas consuetudinarias en las sociedades modernas occidentales; volviendo al precitado autor él sostiene que las letras de las canciones establecen «entornos reflexivos sobre la discografía y su circulación» (ídem).

Por su parte, Poblet (2016) en su tesis doctoral «El Heavy Metal en España, 1978-1985: Frases de Formación, Cristalización y Crecimiento», presentado en la Universidad Complutense de Madrid, sostiene que el correlativo:

«El heavy metal es uno de los movimientos socioculturales más extendidos de la cultura occidental. Musicalmente es, además, uno de los géneros más ricos de cuantos conforman el crisol de la música popular urbana, habiendo despertado el interés de sociólogos y musicólogos, fundamentalmente europeos y norteamericanos, que lo han introducido en el currículo académico» (p. 7).

Su carácter principal viene a ser que «… constituye un código que distingue de otras manifestaciones culturales, y que implica una devoción por la música y una lealtad a los principios de la subcultura en la se inserta» (ob cit., p. 14). En este sentido, tanto en España como en Latinoamérica, fue la juventud el segmento demográfico que hubo de manifestar en las décadas de 1960, 70 y 80 gran descontento frente a los regímenes políticos conservadores, con censuras y control social férreo, tanto por parte de las fuerzas policiales y militares como de la jerarquía de la Iglesia Católica (ob cit., p. 14); pero tanto en la «Madre Patria» como aquí en Hispanoamérica, los conatos de rebeldía fueron protagonizados por los grupos estudiantiles, sus protestas de calle, huelgas de paradas y trancazos de vías de tránsito público, su resistencia a la más brutal represión hallaron en este estilo musical del rock su aliado más fiel a los estudiantes y grupos políticos aliados; la poesía rebelde, de denuncia social de un entorno dominado por las imposturas intelectuales y espirituales que más que posibilitar la convivencia civilizada, ahogaron los atisbos de libertad, de forma que de forma y fondo, esta situación aplica tanto para la Península Ibérica como para Latinoamérica y el Caribe.

Fuente: https://www.aporrea.org/internacionales/a275525.html

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Crimen del ministro Roa y la OPSU

Por: Luis B. Saavedra M.

 

«El distintivo peculiar de la virtud de la justica es que tiene por misión ordenar al hombre en lo que dice relación al otro; … mientras que las demás virtudes se limitan a perfeccionar al ser humano exclusivamente en aquello que le conviene cuando se lo considera tan sólo en sí mismo» (Tomás de Aquino, Summna Theologica, 2,2, 57, 1; citado por Josef Piepper en «Las virtudes fundamentales». 5°edición. Rialp. Madrid. 1997. P. 99).

«La injusticia es la más nefasta corrupción del orden moral. (…) «Si la justicia es la virtud moral en donde principalmente se pone de manifiesto el uso de la recta razón… de ahí que, recíprocamente, sea el vicio a ella opuesto el lugar donde encuentra el indebido uso de la razón una expresión más manifiesta». «La más nefasta corrupción del orden en el ámbito natural humano, la más auténtica perversión del «bien humano» tiene el nombre de injusticia», (ob cit., p. 119).

«No hagas el mal, y el mal no caerá sobre ti. Apártate del injusto, y él se apartará de ti» (La Nueva Biblia Latinoamericana, Eclesiástico, 7, 1-2, ediciones Paulinas/Verbo Divino. Madrid. P. 966).

El crimen del ministro Roa y la OPSU consiste en no negar los recursos para el pago de la 1ra quincena de enero 2019 en la UPEL, no asignar los recursos necesarios y suficientes para el adecuado funcionamiento institucional en sus funciones básicas de docencia, investigación y extensión, además se corre la bola estos días de que va a ser eliminada formalmente o adscrita como una dependencia más de la nueva universidad del magisterio.

Por otra parte, la respuesta del Gobierno Nacional a las demandas salariales y seguridad social de los trabajadores de la educación universitaria; así, hasta la ahora que escribo estas líneas, 6: 00, de la tarde del 18 de enero de 2019, la Universidad Pedagógica Experimental Libertador, Instituto Luis Beltrán Prieto Figueroa de Barquisimeto, UPEL-IPB, no ha pagado la 1ra quincena; cuestión que agrega más motivos para la protesta y rechazo contra el Gobierno Bolivariano, ¿no es eso una expresión más de la ineficaz burocracia y de corrupción? Ergo, los enemigos de la administración de Maduro no están a fuera solamente, los tiene adentro; duerme con el enemigo, como dicen por ahí recordando una ya vieja película.

Por cierto, noche la Asociación de Profesores de la UPEL, APROUPEL difundió un comunicado en facebook donde denunciaba que las dependencias técnica-administrativas o sus autoridades rectorales y decanales no habían recibido los recursos para hacer efectiva la quincena, ¿no es eso un crimen del ministro Roa y la OPSU? En realidad, casi todos los años es el mismo cuento, que, si esto o lo otro con no sé qué, ¿pero no pueden prever semejante situación?

A sabiendas de cómo están las cosas, un retraso tan largo en el pago de la quincena (aunque ésta sea muy poca y que además ha sido licuada por la inflación en el marco de una economía informalmente dolarizada como la venezolana, eso no obstante que el gobierno lo niegue o se haga de la vista gorda), incrementa la injusticia e iniquidad del Ministerio del Poder Popular para la Educación la Educación Universitaria, Ciencia y Tecnología, MPPEUCT.

Otras universidades locales, es decir, asentadas en Barquisimeto (Ucla, Uptaeb, Unexpo) sí pagaron la susodicha primera quincena de enero de 2019 pero dizque con «recursos propios», ¿por qué la UPEL-IPB no lo hizo así? ¿Ya no tienen otros ingresos? Por otra parte, tal situación de incumplimiento del pago a tiempo de la quincena UPEL, propiciada por el Ministerio del Poder Popular para la Educación Universitaria, Ciencia y Tecnología, junto a la Oficina de Planificación del Sector Universitario, ¿no es agregar más leña al fuego de la conflictividad social tan a flor de piel hoy en Venezuela? ¿A quién conviene mantener una situación así?

Así mismo, ayer no más hubo una muy concurrida marcha de educadores de todos los niveles y modalidades en Barquisimeto, todos juntos: los docentes de educación primaria, bachillerato y universidad, todos tenían la impresión de que en Venezuela subsiste un grave, gravísimo problema de injusticia; hay desilusión por la carrera docente, también un cambio importante, en las actuales condiciones la carrera docente en Venezuela es inviable, aunque ya el ministro Aristóbulo señaló en VTV que haría los ajustes adecuados a las tablas salariales e igualmente el ministro del trabajo habló del ajuste salarial de los trabajadores universitarios por el nuevo factor de corrección en la moneda, por lo que un docente instructor según nos comentaba una amiga de la Uptaeb pasaría a ganar 25 mil y el titular 38 mil; sin embargo se niega el gobierno hacer cumplir el famoso 4,75 de salarios mínimos acordados para el sector, ¿qué son 25 mil o 38 mil cuando el kilo de queso pasó a costar 7 mil bolívares y así los otros rubros? Se terminó preguntando. La universidad venezolana va al paro indefinido, concluía. ¡Ya no se puede! Han matado la ilusión de ser docente universitario. Un crimen, verdaderamente.

Ahora quien no se pronuncia a este respecto es el otro ministro, Roa, MPPEUCT que por cierto poco se ocupa de las universidades, parece estar más pendiente de la otra cartera, la ciencia y tecnología, pero sólo por lo del petro, porque de investigación, ciencia y tecnología, nada o sabe muy poco; con decir que no se le conoce aún ni un solo artículo científico o «paper» que llaman; en fin, eso sería lo de manos si no cometiera tantas injusticias con el sector que tiene a su cargo, en cambio ha cometido verdaderos crímenes de «lesa universidad».

Fuente del artículo: https://www.aporrea.org/educacion/a274501.html
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Otra universidad del magisterio venezolano. ¿Y la UPEL?

Venezuela / 23 de septiembre de 2018 / Autor: Luis B. Saavedra M. / Fuente: Aporrea

El presidente Nicolás Maduro a su regreso de su viaje de alto nivel a China, de gran éxito con fines de fortalecer el programa de recuperación, reimpulso y rectificación de la economía venezolana y alocución por el inicio del nuevo año escolar 20018-2019; también muy promisorio por los nuevos programas de apoyo a los estudiantes y la familia, anuncia que la Micro Misión Simón Rodríguez, cuyo fin al perecer es la de especializar en ciencias naturales y sociales en un tiempo perentorio a egresados como docentes generales u otras carreras universitarias, pasaría a ser universidad: la universidad del magisterio venezolano.

El presidente de la República, Nicolás Maduro, informó este lunes que la Micromisión Simón Rodríguez será transformada en una universidad para los trabajadores del magisterio educativo.
«He decidido convertir, transformar, la Micromisión Simón Rodríguez en una nueva universidad del magisterio (…) para los cursos de postgrado. Transformar esa idea de la micromisión Simón Rodríguez», expresó el jefe de Estado desde el Palacio de Miraflores, en Caracas.
La Micromisión Simón Rodríguez busca fortalecer el proceso de formación estudiantil en el país, al ayudar a los docentes a mejorar sus métodos y conocimientos a través de especializaciones que les permiten impartir educación de manera dinámica y con mejor comunicación.

Cabe preguntarse, sobre todo uno que es egresado y ha hecho toda la vida en la Universidad Pedagógica Experimental Libertador, UPEL, al oír ese anuncio: ¿otra universidad? ¿No es una mejor opción apoyar y fortalecer a las ya existentes y con buen ganado prestigio por la calidad y pertinencia en sus procesos de formación? ¿Qué no es la UPEL el ente asesor del Estado venezolano en cuestión de educación y pedagogía? ¿No se está contento ni conteste con la formación y el perfil de los egresados y “todo lo que ahí se hace” por el país con las especializaciones, maestrías y doctorados, en tanto que formación de alto nivel según el estado del arte de la ciencia y las humanidades? ¿Tienen éstas otro proyecto de país? O siguen o no los lineamientos de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela (1999), aplican o no el Plan de la Patria 2013-2019, son fuente de moralidad pública o por el contrario motivo de escándalo.

Igualmente se puede inquirir: ¿Quién ha hecho la evaluación de la calidad de los egresados de la Micro Misión Simón Rodríguez y bajo cuál modalidad se ha realizado? Cuántas promociones y/o egresados tienen ya, porque que se recuerde no tiene mucho tiempo ¿Qué tipo de investigación han realizado esos estudiantes de postgrado y cuáles son sus líneas de investigación? ¿Cuál es el equipo de formación y cuál es su dotación en cuanto a biblioteca, laboratorios y plataformas tecnológicas, donde interactúan esos cursantes de postgrado? ¿Comparte el presidente Maduro entonces la tesis de su amigo y ex Ministro del Poder Popular para la Educación, camarada Rodulfo Pérez, con quien al parecer surgió ese mencionado programa alternativo, acerca de que “la UPEL es un veneno” y no está formando el tipo de educador que necesita la Revolución Bolivariana, sino que es una especie de reducto de la oposición? ¿Son todas las nuevas universidades politécnicas territoriales, del arte, medicina, el deporte y otras que han surgido al fragor de las nuevas políticas públicas actuales buenas referencias de calidad, relevancia científica-técnicas, valores, ideas y prácticas revolucionarias o son meros remedos y reproducciones burdas de los viejos modelos viciosos de formación universitaria tradicional en Venezuela? ¿Quién ha hecho los estudios de factibilidad para la creación de otra universidad del magisterio venezolano?

Qué rápido han olvidado algunos colegas hoy en puestos relevantes del Gobierno Bolivariano, alcaldes, ministros y viceministros, entre otros funcionarios de línea media que lo ellos son como ciudadanos integrales, nobles personas, buenos padres y hasta amantísimos esposos o esposas, lo debe en mucho a las experiencias vividas en los espacios de los diferentes Institutos Pedagógicos que repartidos por toda la geografía nacional forman la estructura matricial de la Universidad Pedagógica Experimental Libertador; si hasta el mismo Aristóbulo Istúriz, Rodulfo Pérez y muchos de los viceministros, asesores, directores son flamantes egresados de algún Pedagógico, aunque parece que siempre han tenido una relación de amor-odio con la UPEL, nunca han estado contentos del todo con “Alma Mater”, tienen el feo vicio de ser malagradecidos y estarían de plácemes si ésta fuera eliminada de cuajo como universidad; pero si uno hace eso que en gerencia dan en llamar Benchmarking o proceso de comparación de modelos organizacionales exitosos puede observar que en Colombia, México o Chile las casas de formación pedagógica siguen siendo las famosas escuelas normales y los pedagógicos y, cada cual en su contexto, son exitosas.

¿Sabrá el presidente Maduro que la universidad venezolana lo que necesita es apoyo decidido, respaldo y confianza? La UPEL, al igual que otras universidades actualmente nacionales públicas o privadas, padecen de grandes limitaciones pero hacen un esfuerzo ingente y requieren de un apoyo financiero, infraestructura y dotación bibliográfica, laboratorios urgente porque la crisis sistémica de la nación, como parte de los mismos errores nuestros como lo reconoció el mismo camarada Diosdado Cabello en Barquisimeto, los errores de la oposición, los empresarios y la misma ciudadanía, junto a las innegables agresiones imperialistas, las ha puesto al borde la quiebra; es así como hace falta desarrollar mucho estímulo a su población estudiantil, profesoral y personal de apoyo en lo administrativo y obrero; una de cuyas soluciones más sencillas y elementales vienen a ser, por ejemplo: implementar clap universitario, plan de viviendas, asistencia médica, dotación de uniformes, planes sencillos y prácticos de recreación, apoyar al investigador con viajes al exterior con fines de actualización, financiar aquellos proyectos de investigación pertinentes en ciencias y humanidades; presidente, que la cosa no es sólo decretar universidades porque supuestamente son más afines ideológicamente, la cosa es más compleja.

Pero como quiera que estas son reflexiones que uno hace sólo para conversar, y más bien uno debería ser un disciplinado militante y como un conocido nuestro sólo retwitear lo que dicen los jefes del partido o de los ministerios a que se esté adscrito, ello, aunque sea flamante diputado regional y que tampoco hace vida política en calidad de constituyente, son obedientes como los monjes: “El que obedece no se equivoca”, solía decir mi buen maestro de formación de aspirante religioso hace ya tantos años; ah, perdón, a menos que la sede de esta nueva universidad pedagógica sea el Centro de Formación Pedagógica Simón Rodríguez, ubicada en San Antonio de los Altos, una bella edificación cómoda y funcional, donde fuimos la otra vez por casualidad, que fue donde el Prof. Rodulfo Pérez soltó aquello de que “La UPEL es un veneno” y tenía ahí mismo en la otra silla a una profesora de la UPEL-IPC que, al parecer carece de todo sentido de identidad y pertinencia porque no dijo ni pío.

Fuente del Artículo:

https://www.aporrea.org/educacion/a269424.html

Fuente de la Imagen:

http://actualidadygente.com/noticias-venezuela-hoy/88507-inicio-la-alianza-contadores-publicos-y-la-upel

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Comunicación para mejorar la educación rural

Por Luis B. Saavedra M.

El presente texto resume un trabajo académico sobre la comunicación del personal directivo con el talento humano de un Núcleo Escolar Rural en Venezuela, en particular el NER 243 del municipio Petit del estado Falcón, realizado con la Profesora Lida Laguna, hoy Magister en Gerencia Educacional de la UPEL-IPB, luego de un arduo esfuerzo; más en estos días cuando las cosas se han tornado tan duras, por lo que su difusión resulta necesaria y así pueda servir a muchos otros colegas. Se fundamenta el mismo en la teoría de las relaciones humanas de Mayo y otros (1987), la acción comunicativa de Habermas (2002), el comportamiento organizacional y la comunicación (Weihrich y Koontz, 1994).

Se trata de una investigación de campo con un diseño no experimental, como es típico en ciencias sociales y los sujetos involucrados fueron: dos directivos y cincuenta y seis docentes, quienes respondieron una encuesta consistente en un instrumento tipo cuestionario con ítems semiestructurados, cuya confiabilidad fue 0,7; los datos arrojados de las frecuencias se analizaron manualmente mediante estadística descriptiva, en un corte transaccional.

Se concluyó que el personal directivo pocas veces motiva a los docentes a participar en la toma de decisiones, así como en el fortalecimiento de los equipos de trabajo, por lo que se impone que los medios de comunicación (memorándum, correspondencia escrita, reuniones, correo electrónico) que disponen deben optimizarse y alcanzar así altos niveles de inspiración. Respecto a las barreras de la comunicación, destaca los directivos que pocas veces expresan con claridad las demandas o requerimientos al personal a su cargo. Ello da lugar a situaciones confusas y equívocas a la hora de interpretar la finalidad de la información ofrecida o comentario emanada de la dirección. La función de la comunicación, poco se ejerce, porque el personal no siente la suficiente confianza para preguntar al gerente respecto a alguna tarea; otra función que requiere mejorarse es la innovación. Por lo que se recomienda mejorar la escucha activa, así como sensibilizar y formar habilidades y destrezas gerenciales en la dimensión comunicación asertiva mediante círculos de estudio.

Delors (1996) señala que la educación «tiene que adaptarse en todo momento a los cambios de la sociedad, sin dejar de transmitir por ello el saber adquirido, los principios y los frutos de la experiencia» (p. 18); por lo que es un medio eficaz que permite vivir experiencias significativas de acuerdo a las necesidades e intereses del que aprende en la medida en que se potencia a su desarrollo integral. Sobre todo, en el nivel de Educación Primaria, en donde se pretende promover cambios significativos que conduzcan a la formación integral de manera que pueda participar en la transformación personal y del hecho educativo y, por lo tanto, del país.

Entre otros procesos, se entiende que la educación es comunicación eficaz, que logre los objetivos del emisor y tenga correspondencia, participación y co-creación de nuevos saberes. Sólo en esa medida habrá calidad educativa, pero ésta constituye una cualidad que requiere valorar la comunicación como un medio para alcanzar el compromiso, excelencia y competencias necesarias científica-técnicas y humanísticas en el educando, de acuerdo a las demandas actuales.

Al respecto, la comunicación es un proceso fundamental, implícito en toda actividad humana, debido a que se utiliza para establecer relaciones con otras personas, así como intercambiar ideas, exponer opiniones, interactuar con el mundo que le rodea. A partir del lenguaje y la consiguiente comunicación se desarrolla el proceso de socialización que caracterizan a los seres humanos, por lo que genere relaciones interpersonales adecuadas, que contribuya a compartir información. Lo cual motiva e incide en ciertas actitudes. Claro, si este es un diálogo abierto, porque cada uno de los actores puede opinar y participar, con lo que se logrará un ambiente armónico entre los directivos, docentes, estudiantes, personal y comunidad. Sin embargo, como reconocen Whetten y Cameron (2005) es un problema difícil (p. 212).

En este sentido, las escuelas pueden convertirse en organizaciones óptimas, en las cuales se fortalecen los valores y el sentido de identidad de cada uno de los miembros de una institución, tal como lo señala Habermas (1995), la grandeza de las organizaciones no se fundamenta en garantizar solo la sobre vivencia de quienes las crean, sino, sobre todo, que su trascendencia deviene de ser instrumento del desarrollo de la humanidad. De allí que se les da importancia a las relaciones humanas, la comunicación y del trabajo en equipo en los procesos productivos de sentido y de resultados.

En el caso de la comunicación organizacional, permite la interacción entre los empleados y el entorno, por lo que se dice que es interna y externa. En efecto, King (2012) expone que la comunicación organizacional «es una importante herramienta de mucho aporte laboral en la actualidad que da lugar a la transmisión de la información dentro de las organizaciones para identificar los requerimientos, logros de la organización y los colaboradores de la misma» (p. 1).

De allí que, para el desenvolvimiento eficaz de la gerencia educativa, se hace necesario que exista una efectiva comunicación, por lo que es recomendable conocer al talento humano, desarrollar y aumentar la habilidad para escuchar, aprender a dar la información de forma clara, precisa, sencilla, asimilable; que permita la participación, cooperación entre el personal, estudiantes y representantes; ello supone lograr que los personas participen activamente en el logro de los fines de la organización. La efectividad, el buen trato y el entendimiento de la información dada y recibida, hace parte de la plenitud con que se desarrolle la comunicación organizacional interna.

Atendiendo a estas consideraciones, se destaca la importancia de la comunicación organizacional en las instituciones educativas, porque contribuye a mejorar las relaciones interpersonales entre el personal y comunidad, que promuevan una comunicación interna, de manera que se conozca la situación de la escuela; evitando cualquier tipo de conflicto o confusión al momento de laborar y enviar o recibir la información, generando a su vez, que éstos desarrollen un sentido de pertenencia y colaboración, ya que se encuentran informados de todas la decisiones, acciones y proyectos a realizar por parte de la dirección y de los docentes. Al mismo tiempo, les brindan la oportunidad de manifestar sus opiniones y ofrecer sugerencias.

De esta manera, en las escuelas se debe propiciar el trabajo en equipo eficaz entre los directivos y docente, ya que permite que cada integrante exprese o comparta sus diferentes puntos de vista u opiniones, acerca de la consecución de las metas y objetivos educativos. En efecto, el triunfo de una organización educativa depende de la identificación, comunicación y compromiso que pueda existir entre sus integrantes.

Funciones de la Comunicación Interna

La comunicación interna cumple funciones esenciales para la vida de organización, para Ongallo (2007) algunas de estas funciones en base a lo que considera «las cinco ies de la comunicación», son las siguientes:

-Impulso: esta se le deben dar los líderes de la organización, porque mediante la comunicación hacen que se alcancen los resultados y objetivos de la organización; con ello se busca canalizar la voluntad de impulsar cambios, de allí que es fundamental para motivar a los miembros de una empresa. Las organizaciones que canalizan el proceso de comunicación para impulsar a su personal a la consecución de las metas, estará fortaleciendo el conocimiento de la organización, los equipos y los estilos de dirección.

-Innovación: la comunicación permite dinamizar el proceso de incorporación de las innovaciones en las organizaciones, ya sea en cuestiones tecnológicas, estructurales, jerárquicas, de expansión de marca, entre otras. La función innovadora de la comunicación incluye actividades de comunicación tales como los sistemas de sugerencias a nivel general, el trabajo de investigación y desarrollo. En la innovación de la organización se requiere cambios en el comportamiento de los individuos, hecho que afecta a todo el conjunto ya que exige una actitud positiva y de mucha prospectiva en todos y cada uno de los estamentos: directivos, administrativos y empleados.

-Implicación: este punto marca el objetivo mismo de la comunicación: poner en común, hacer común. La comunicación interna permite que los miembros que participan en el proceso se involucren en la toma de decisiones y se identifiquen con el proyecto en común. La comunicación en la empresa es eje fundamental para la productividad pues una comunicación eficaz permite la optimización de ventas y para los colaboradores pues el que exista una buena comunicación permite que se construya un buen clima organizacional y además que estos se sientan involucrados con la organización.

-Información: La adecuada gestión de la comunicación interna propicia la llegada de la información relevante a todos los niveles de la organización, dinamizando su funcionamiento, reduciendo los niveles de incertidumbre, entre otras cuestiones fundamentales.

-Identidad: Una comunicación bien entendida genera valor para la organización, puesto que contribuye a que los miembros asuman los valores, estilo organizativo y modus operandi de la misma. Todo lo que se comunica debe estar en consonancia con lo que se es. La misión de la comunicación interna es crear las condiciones necesarias para la satisfacción de la estrategia general de la organización.

En este sentido, la comunicación interna es una estrategia transversal al servicio de las otras. Todos los colaboradores de una organización, no importa si ésta tiene o no fines de lucro, necesitan conocer el rumbo hacia dónde se dirigen como conjunto. Es decir, la visión de la organización. Ésta debe ser claramente definida y transmitida desde la dirección hacia todos los niveles de la estructura, con el fin de clarificar las metas (dispuestas según un análisis previo de los escenarios futuros) y motivar. Las funciones antes descritas resultan de interés para cualquier organización, porque permite mediante la comunicación lograr cambios en el personal, la organización y sus procesos, a través de la participación, cooperación e identidad de sus miembros, en la búsqueda de la excelencia.

El paradigma en el cual se sustentó este estudio es el positivista, definido por Hurtado (2000) como aquel que se basa en el análisis de datos recolectados directamente de la realidad, mediante instrumentos de medición, en la que busca la causa de los fenómenos sociales con independencia de la subjetividad de las personas; de allí que se diga que el investigador se limita a responder, por lo que dice que la comunicación es vertical entre el investigador y el investigado.

Por lo tanto, las investigaciones basadas en este paradigma se orientan a la comprobación de hipótesis, considerando la vía hipotético-deductiva como la más efectiva para todas las investigaciones. Tal como lo exponen De Urrutia y González (2003), este paradigma parte del supuesto de que toda ciencia debe ser neutra, imparcial y objetiva, sostiene que deben utilizarse los procedimientos de la ciencia naturales para estudiar los hechos. En base a lo expuesto, el investigador y el objeto de investigación son independientes; el conocer y el objeto conocido constituyen un dualismo discreto.

A fin de diagnosticar el proceso de comunicación organizacional entre los directivos y el talento humano del Núcleo Rural 243 del municipio Petit del estado Falcón, se utilizará como tipo de investigación de Campo, ya que los datos serán recogidos directamente de la realidad donde ocurren los hechos. De acuerdo a la Universidad Pedagógica Experimental Libertador (2011), está definido como:

…el análisis sistemático del problema en la realidad, con el propósito bien sea de describirlo, interpretarlo, entender su naturaleza y factores constituyen, explicar sus causas y efectos, o predecir su ocurrencia, haciendo métodos característicos de cualquiera de los paradigmas o enfoques de investigación conocidos o en desarrollo. Los datos de interés son recogidos en forma directa de la realidad… (p. 18).

Este tipo de investigación es también conocida como investigación in situ ya que se realiza en el propio sitio donde se encuentra el objeto de estudio. En este sentido, fue de nivel descriptivo, definida por Silva (2008) como aquella cuyo «…propósito es exponer el evento estudiado, haciendo una enumeración detallada de sus características, de modo tal que en los resultados se pueden obtener dos niveles de análisis, dependiendo del fenómeno del propósito del investigador: …» (p. 19). Se presentan, describen, analizan e interpretan en forma ordenada los datos obtenidos los cuales son recogidos de primera mano por el propio investigador, lo hace en la propia realidad donde ocurre el fenómeno.

De acuerdo al objetivo general de este estudio el diseño de investigación fue no experimental, ya que no se manipularon ni se tuvo control sobre ninguna de las variables. Con relación a este tipo de diseño, Palella (2006) expone que: «Es el que se realiza sin manipular deliberadamente la variable. El investigador no sustituye intencionalmente las variables independientes. Se observan los hechos tal y como se presentan en su contexto real (p. 96).

En función de lo planteado, en esta investigación los datos fueron recogidos directamente de la realidad de la escuela, sin intervenir, ni modificar las condiciones. Por lo que será un diseño transeccional descriptivo, expresado por Hernández, Fernández y Baptista (2006) como aquel en el cual se recolectan datos en un solo momento, en un tiempo único, con el propósito de describir variables y analizar su incidencia e interrelación en un momento dado. En consecuencia, se procesaron los datos provenientes del instrumento (cuestionario) que se aplicará, en un solo momento.

Sistema De Variables

Cuadro 1. Técnico Metodológico

Variable Dimensiones Indicadores Ítem
Comunicación organizacional en las instituciones educativas Comunicación -Motivación

-Trabajo en equipo

-Medios

-Relaciones Interpersonales

-Clima organizacional

1

2

3

4

5

Barreras -Personales

-Semánticas

-Físicas

6,7

8,9

10,11

Funciones -Impulso

-Innovación

-Implicación

-Información

-Identidad

12,13

14,15

16,17

18,19

20,21

 

Fuente: Elaborado por Laguna (2017)

 

Población y Muestra

 

 

La población, según Tamayo y Tamayo (2000) «es la totalidad del fenómeno a estudiar en donde las unidades de población poseen una característica común, la cual se estudia y da origen a los datos de investigación». (p. 114). La muestra para Tamayo y Tamayo (2000), es definida como «una parte representativa de la población que se investiga» (p. 218). La muestra debe proporcionar datos válidos respecto a la población, la muestra en sí debe constituir un perfil bastante preciso de la población. En este sentido, la población a los efectos del presente estudio, estuvo conformada por 2 directivos y 56 docentes del Núcleo Rural 243 del municipio Petit del estado Falcón, por ser población finita, pequeña y de fácil acceso, no se tomó muestra sino que se trabajó con el total de la población, constituyéndose un censo poblacional, como el procedimiento que permite obtener información de carácter primario y abarca a todos las unidades poblacional, porque la población coincide con la muestra (Tamayo y Tamayo, 2000).

Cuadro 2. Distribución de la Población

Escuela Básica Personal Docente
1 Colombia 3
2 Murucusa 8
3 Juan Camejo 3
4 Curairima 1
5 Despedida 3
6 Los Riegos 5
7 La Caridad 1
8 San Ilario 8
9 Las Puente 6
10 Santa Rosa 8
11 Macanilla 4
12 El Canide 2
13 San Lorenzo 1
14 Trapichito 2
15 San Diego 1
56

Fuente: Información suministrada por la Dirección del NER 243 (2017)

Técnicas e Instrumentos de Recolección de Datos

 

Técnicas de Análisis de Datos

Los datos que se obtuvieron a través de la aplicación del cuestionario permitieron que sean tratados mediante el análisis descriptivo en oportunidad de medir la efectividad del mismo. Por lo tanto, el tratamiento estadístico de los datos que se obtendrán, fueron efectuados con la aplicación de la estadística descriptiva donde se apoyara en gráficos y diagramas que presentan los datos organizados para facilitar si interpretación. Según Sierra (2000) que se refiere «a la tarea de describir los datos, valores o puntuaciones obtenidas para cada variable» (p. 356).

Dentro de esta perspectiva, el presente trabajo fue la variable en referencia, posteriormente se especificaron los valores o puntuación obtenidas, de igual forma se elaborará una tabla de distribución de frecuencia para cada una de las preguntas o ítems del instrumento, presentándose su respectivo gráfico, a partir de los cuales se realizaron las inferencias vinculadas con el tema de investigación.

Tomando en consideración los señalamientos que proceden, se tiene que una vez aplicado el instrumento, se procesaron los datos en forma manual, para lo cual se tabularon las frecuencias y los valores porcentuales emanados de las respuestas. Los resultados se colocaron en cuadros y gráficos, para luego proceder al análisis de los mismos y poder elaborar conclusiones y recomendaciones.

A continuación, se presenta la información recolectada a través del instrumento aplicado a los docentes del Núcleo Rural 243 del municipio Petit del estado Falcón, el cual está estructurado por 21 ítems, que permitieron analizar la gestión, barreras y funciones presentes en la comunicación.

Dimensión: Gestión de la Comunicación

Cuadro 3

Motivación

 

ITEMS Alternativas
Si Frecuentemente Pocas veces No
f % f % f % f %
1 La comunicación que se produce en la escuela le motiva a participar en la toma de decisiones 0 0 13 23,21 32 57,14 11 19,64

Fuente: Datos obtenidos del cuestionario aplicado al personal objeto de estudio (2017)

 

 

De los resultados obtenidos del cuadro anterior, se tiene que el 57,14% de los docentes del Núcleo Rural 243 del municipio Petit del estado Falcón, encuestados exponen que pocas veces la comunicación que se produce en la escuela le motiva a participar en la toma de decisiones, un 23,21% de ellos respondieron que frecuentemente y el 19,64% que no en relación a la interrogante.

De lo expuesto se expone que en la escuela se requiere gestionar de forma eficiente la comunicación, debido a que la tendencia de respuesta indica que es un aspecto que presenta debilidad; lo que difiere del deber ser en las organizaciones, así lo manifiesta Fernández (2008) al opinar que la comunicación es un aspecto que contribuya a la motivación, cuando es bien definida y confiable, ya que fomenta la participación y la cohesión de las personas buscando la efectividad en el trabajo.

Conclusiones

De acuerdo con el análisis de los resultados obtenidos, se presentan a continuación las conclusiones con base a los objetivos planteados en el presente estudio:

Al diagnosticar la gestión del personal directivo en la comunicación organizacional interna en el Núcleo Escolar Rural 243, municipio Petit del estado Falcón, se conoció que pocas veces motiva a los docentes a participar en la toma de decisiones, así como en el fortalecimiento de los equipos de trabajo, que es fundamental para la cohesión del grupo, lo que contribuiría a crear procesos sinérgicos en las escuelas y, con ello, la mejora del quehacer diario del docente; por lo tanto poco contribuye a mejorar la efectividad en el logro de las metas organizacionales.

La comunicación que se da frecuentemente entre los miembros de la escuela contribuye a que se mantengan buenas relaciones interpersonales; a pesar de ello, pocas veces la comunicación que mantiene el personal directivo con los docentes contribuye a un ambiente organizacional armonioso. Es de indicar que los medios de comunicación que disponen deben mejorarse, debido a que existen debilidades en el manejo de la información, necesario para la efectividad en el logro de las metas organizacionales. Es de indicar que, para algunos docentes, la comunicación poco contribuye a crear un ambiente agradable y a valorar la escuela en la que trabajan; por lo que se requiere mejorarla, a fin de mantener buenas relaciones interpersonales.

Respecto a la identificación de las barreras de la comunicación presentes entre el personal directivo y docente del Núcleo Escolar Rural 243, municipio Petit del estado Falcón, se pudo conocer frecuentemente la comunicación con el personal directivo depende del estado de ánimo que este tenga, no propician un ambiente de privacidad para tratar temas confidenciales con el personal docente, pocas veces expresa claramente sus requerimientos al personal. Además, se presentan situaciones problemáticas debido a la mala interpretación por parte del personal de alguna información o comentario emanada de la gerencia; en relación con el nivel de ruido en la escuela permite que las personas se escuchen de forma adecuada y la interacción entre el personal directivo y demás miembros de la escuela se produce a distancias apropiadas para que la escucha sea efectiva.

Recomendaciones

En base a los objetivos y las conclusiones obtenidas surge se recomendación lineamientos gerenciales en la comunicación organizacional dirigido a la institución, directivos y docentes del NER 243:

En toda institución educativa para lograr sus fines realiza un conjunto de actividades o tareas de manera coordinada e interrelacionada, para lo cual debe contar con una comunicación organizacional adecuada. El caso de las Escuelas Bolivarianas, como organizaciones en donde interactúan los diferentes colectivos, directores, docentes, administrativos, obreros, estudiantes, padres y representantes para que exista un buen desempeño de todos los actores debe haber relaciones de trato y comunicación de tal forma que permitan crear ambientes de trabajos armoniosos, donde la participación e integración sea positiva para la escuela. Es decir que los directivos y docentes para lograr un trabajo efectivo tienen que establecer una comunicación de alta fidelidad entre ellos, con los padres y representantes, la escuela y el entorno.

Instituciones

Lograr mediante la gestión de comunicación en el Núcleo Escolar Rural 243, municipio Petit del estado Falcón, motivar al personal a objeto de crear las bases de una buena relación, porque sin comunicación es imposible que se llegue a solucionar algún problema.

Crear espacios extramuros para mejorar la función de información; mediante oportunidades que se presentan para propiciar una comunicación entre los integrantes de la organización (reuniones, entrevistas, actos, actividades sociales, entre otras), a fin de propiciar la comunicación cruzada y ascendente.

Mejorar la función de implicación en la comunicación a través del desarrollo de talleres de comunicación organizacional interna, para lograr la participación efectiva del personal en la propuesta de alternativas, toma de decisiones y que se promuevan valores como trabajo en equipo, calidad, cooperación, convivencia, honestidad, el respeto, entre otros.

  1. Directivos

Crear y fomentar el trabajo en equipo, para que todos los integrantes sientan suya la organización, reforzando su misión, visión y objetivos, a fin de incentivar e involucrar a todo el Núcleo Escolar Rural 243, municipio Petit del estado Falcón para la consecución de los objetivos, con ánimo y energía, a través del diseño de un modelo de gestión gerencial basada en la comunicación efectiva.

Utilizar todos los medios e instrumentos disponibles (intranet, jornadas informativas, reuniones, buzón de sugerencias, revistas y boletines,) para establecer mecanismos de retroalimentación informativa.

Propiciar la gestión de comunicación, para mejorar las relaciones interpersonales en el Núcleo Escolar Rural 243, municipio Petit del estado Falcón, debido a que estos son la clave fundamental para lograr la cohesión grupal, incentivo y cooperación.

Minimizar las barreras personales en el proceso de la comunicación, para facilitar información y motivar a los docentes; con ello, mejorar el entendimiento de los mensajes, para coordinar esfuerzos en el cumplimiento de los objetivos organizacionales.

Desarrollar y aumentar la habilidad para minimizar las barreras semánticas, para escuchar, aprender a dar la información de forma clara, precisa, sencilla, asimilable; que permita la participación, cooperación entre el personal; ello supone lograr que los personas participen activamente en el logro de los fines de la organización.

  1. Docentes

Promocionar la comunicación en Núcleo Escolar Rural 243, municipio Petit del estado Falcón, basada en un clima organizacional de respeto, la cordialidad, empatía, comprensión y firmeza en lo que se les dice, sin dejar de ser amable; para lo cual se debe tener una sonrisa, un gesto amable no solo con el personal directivo, sino con los demás compañeros.

Propiciar las funciones de impulso e innovación, mediante el rol comunicador de los directivos, quienes deben hacer partícipes permanentemente a todo el personal de las escuelas, en las decisiones, aplicación de estrategias, proyectos, entre otros.

Fijar estrategias para mejorar la función de identidad en la comunicación organizacional interna, debido a que es la clave fundamental para lograr un mejor desempeño, base de una buena relación y medio para solucionar algún problema.

Promocionar la comunicación basada en el respeto, la cordialidad, empatía, comprensión y firmeza en lo que se les dice, sin dejar de ser a amable; para lo cual se debe tener una sonrisa, un gesto amable con todos los que hacen parte de la institución educativa.

REFERENCIAS

Berlo, D. (1982). El proceso de la Comunicación. Introducción a la Teoría y a la Práctica. (Octava Ed.). Buenos Aires: El Ateneo.

Berlo, D. (2000) El proceso de la Comunicación. México: El Ateneo.

Castillo, J. (2013). La comunicación del Director dentro del Centro Educativo. En Línea. Disponible en: http://es.slideshare.net/juli0castillo/comunicacion-director-y-docentes. (Consultado: Octubre, 2016).

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Fuente del artículo: https://www.aporrea.org/educacion/a267757.html

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La universidad no se rinde

Por Luis Saavedra

El título recoge la pretensión de «reducción ontológica», para hablar así en términos de Frege y von Newman, si cabe, para describir no sólo los «números naturales» sino el significado que pueden adquirir ciertas lógicas difusas en el marco de discursos de ocasión producidos en la inmanencia de coyunturas existenciales, personales e institucionales álgidas como la actual en Venezuela; donde como sujetos racionales y sintientes, que dice Xavier Zaburi, cada cual tiene sus posiciones política-ideológicas tomadas de manera irreductible y por eso unos evocan viejos tiempos, de cuando dizque el Consejo Nacional de Universidades era muy riguroso en la aprobación de nuevas universidades y carreras, se supone que sin pasar por el filtro político-partidista adeco-copeyano, había rigor en las pruebas de admisión y evaluación universitaria, dotación de bibliotecas, laboratorios y todo lo demás, cuando la democracia amplió la cobertura escolar como nunca antes en el país; para otros en cambio, semejante modelo de universidad para las élites y las clases medias de la cultura del petróleo ya no tiene sentido. Se ha producido un cambio de época, hay otras orientaciones. La pregunta es cómo seguir formando docentes en este tiempo de la cuarta revolución digital, 2 y 3. 0, la realidad virtual, la integración regional y mundial y un largo etcétera.

Así, se compara lo pasado con lo presente, en una nostálgica evocación cuando en Venezuela había libertad y democracia, dicen décadas de 1960, 70, 89 y 90, una elipse con fines de justificar las críticas y denuncias sobre «esto que padecemos» hoy de la neo dictadura del siglo XXI, un coctel que han pensado romper con las técnicas de las revoluciones pacíficas o de colores combinadas con la llamada guerra de cuarta generación: inseguridad, escasez, hiperinflación, emigración y en eso están y las universidades allí tienen también su rol. En general suelen explayarse «alternativas de explicación totalizadoras de las estructuras reales» que, más allá de las ciencias formales o lógico-matemáticas, la tal «reducción ontológica» puede aplicarse también a la dinámica socio histórico que domina lo actual y cuyo fragor de la inmediatez nos obnubila, perdemos la perspectiva sobre la valoración pasado presente; de donde se tiene que frases como «La universidad no se rinde» pronunciada por el ciudadano Raúl López Sayago, rector de la UPEL recientemente en el Instituto Pedagógico de Barquisimeto, a propósito de un acto de grado el pasado 31 de julio de 2018, puede entrañar toda una «Proclama» o, en todo caso, un elogio a una institución muy querida por muchos en Venezuela por ser su principal espacio de formación profesional y ciudadana.

La Universidad Pedagógica Experimental Libertador, hoy disminuida en tantos aspectos como esa de no entregar las tradicionales medallas a los graduandos porque salían muy costosas, pero como los recipiendarios lo que les importa es el título para luego irse del país (bueno no todos, a decir verdad) aceptaron semejante eventualidad sobrevenida. Así terminaron graduados sin la medalla del libertador Simón Bolívar, el gran epónimo cuyas dimensiones axiológicas vendrían a ser la libertad y la democracia, la soberanía y la independencia, valores inculcados a lo largo de los treinta años de la consolidación la UPEL. Una historia social e institucional que se inicia hacia 1989 a propósito del bicentenario del libertador Simón Bolívar (1783-1983), hasta los días que corren donde se ha oído decir por fuentes off the record que como ya no tiene sino poca matrícula, siendo esta la última promoción así de numerosa, sus instalaciones serán entregadas a la UNEFA, nueva universidad que también tiene carrera docente, Misión Sucre, Alma Mater y demás.

Con un orfeón universitario, por cierto, sin la magnificencia de otrora que hacía vibrar el aforo del Magdalena Siegas de López, en la interpretación de los himnos, el rector López Sayago acotó entre otras cosas que la UPEL «entrega a la nación un nuevo contingente de profesionales de la docencia, la profesión más relevante que se puede tener, con emoción y entusiasmo entregamos títulos que son resultados de varios años de esfuerzos; la universidad no se rinde, seguimos trabajando, la crisis también es oportunidad, porque somos una institución consustanciada con la realidad del país, comprometida con la formación en valores, aunado al esfuerzo de análisis y transformación personal y social, somos parte de un pueblo amable, respetuoso, de buenos modales, de allí la importancia de enfrentar la pérdida de orientaciones ética y prácticas morales que nos hace una nación grande».

Finalmente, se le oyó decir al rector Sayago poco más o menos que para reflotar la universidad venezolana había que seguir el ejemplo de Singapur cuya inversión en educación es elevada porque su filosofía de Estado asocia la formación de recursos humanos directamente con el desarrollo económico, social, político y cultural del país, donde además la universidad impulsa el mérito, no la improductividad; con ello pareció revelar que su opción es el liberalismo; entendimos que la UPEL no puede desaparecer porque constituye una universidad matricial heredera del viejo Instituto Pedagógico Nacional, obra de uno de los más preclaros intelectuales venezolanos, don Mariano Picón Salas, quien son su Delegación de Educadores chilenos que ha dado y sigue teniendo mucho que dar a Venezuela. Entendimos pues que toda la intervención del rector Raúl López Sayago constituyó un elogio de la UPEL y en otras referencias estuvo llena de significativos matices, como esa de afirmar que la educación sólo puede ser posible en marcos generales de la libertad y la democracia.

 

Fuente del artículo: https://www.aporrea.org/educacion/a267295.html

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