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Venezuela: El pan nuestro de cada día

El pan nuestro de cada día

Luis Brito García

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Por dos cosas, apunta el pícaro Arcipreste de Hita, trabaja humanidad entera: el alimento, la primera, y por haber coyunda con hembra placentera. Así es. Por más vueltas que le demos o ropajes ideológicos que esgrimamos, en el fondo de todo acto y de toda controversia está la prosaica alimentación. Procede preguntarse quiénes la manejan.

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La tierra, en principio patrimonio de la humanidad, ha sido acaparada por un número ínfimo de terratenientes, que en última instancia decide quién podrá vivir y quién no. Así como crece una progresiva concentración del capital industrial y el financiero, se incrementa la del capital agrícola y pecuario. En el mundo unas 75 grandes empresas dominan la producción y comercialización de alimentos, clasificadas en 2018 de acuerdo con el monto de su índice de capitalización bursátil en miles de millones en euros, en una escala que arranca con los 202,67 € de la suiza Nestlé y concluye con los 3,99€ de la estadounidense Snyders Lance. Examinemos las primeras doce empresas de la lista. Siete pertenecen a Estados Unidos: Kraft Heinz, Mondelez International, General Mills, Tyson Foods, Kellog Co., Archer-Daniels-Midland Co. y Hershey. Una es francesa (Danone), otra inglesa (Associated British Foods), dos son chinas (Inner Mongolia Yili Indus, Foshan Haitian Flavouring). Para mayor detalle, en la lista de total de 75 empresas, 20 son estadounidenses, 16 chinas. (https://economipedia.com/definiciones/empresas/empresas-de-alimentos-mas-grandes-del-mundo.html). Por alguna razón, no se incluyen compañías de Rusia y Ucrania, que en 2019 exportaban más del 25% por ciento del trigo del mundo (https://bit.ly/3tEtf01).

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La organización Oxfam ofrece un cuadro todavía más sencillo en su informe de 2012 sobre «El lado oscuro del comercio mundial de cereales: El impacto de las cuatro grandes comercializadoras sobre la agricultura mundial». En dicho documentado e irrefutable estudio se revela que sólo cuatro grandes empresas –Archer Daniels Midland (ADM), Bunge, Cargill y Louis Dreyfus, conocidas colectivamente como las ABCD– dominan el 90% del comercio de los cereales a escala mundial, y tienen un papel central en el sistema agroalimentario del planeta. Según demuestran Sophia Murphy, David Burch y Jennifer Clap, autores del Informe, «Estas comercializadoras no sólo operan con las materias primas en su estado físico, sino que lo hacen desde el terreno donde se producen y a lo largo de toda la cadena hasta el procesamiento de los alimentos. Suministran semillas, fertilizantes y agroquímicos a los productores, y adquieren los productos agrícolas, almacenándolos en sus propias instalaciones. Actúan como propietarias de la tierra, productoras ganaderas y avícolas, procesadoras de alimentos, transportistas y productoras de biocombustibles, así como proporcionan servicios financieros en los mercados de materias primas (rr-cereal-secrets-grain-traders-agriculture-30082012-es).

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Que sólo cuatro empresas privadas administren a voluntad la producción de la cual depende la vida de las nueve décimas partes de los 8.000 millones de habitantes del mundo, parece desproporcionado. Es lo que los más acérrimos neoliberales llamarían un mercado de competencia imperfecta, en el cual no rigen las leyes de la demanda y la oferta porque esta última depende apenas de cuatro oferentes que fácilmente pueden ponerse de acuerdo para eliminar la competencia.

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Así como el capital tiende a concentrarse en un número cada vez menor de manos, la tierra tiende a caer en un cada vez más reducido número de propietarios. En los orígenes de la humanidad la tierra era común. La escisión de la sociedad en clases reservó violentamente para una élite su propiedad, y para las clases dominadas el duro trabajo que la hacía producir. Todavía en la actualidad son los campesinos arrojados de sus fundos o «desplazados» por supuestas operaciones militares en Indonesia o en Colombia. A veces la desposesión es más sutil: opera por vía de «deudas» impagables o la imposición de leyes que quiebran a los pequeños agricultores, como el TLC en México, que permitió que la producción agrícola altamente mecanizada de Estados Unidos arruinará a más de cuatro millones de campesinos mexicanos que debieron emigrar para engrosar la marginalidad de las ciudades. Pero la lucha contra los grandes latifundios transnacionales no cesa. En Brasil, sigue activo el Movimiento de los Sin Tierra, en el cual centenares de miles de campesinos sin fundos o expulsados de ellos acampan en el borde de las carreteras exigiendo disponer de medios de vida. En la India estalló una masiva revuelta campesina en 2020 y 2021, «contra la desigualdad producida por el neoliberalismo, el capitalismo y el imperialismo en el Sur Global», que obtuvo importantes victorias a pesar de una represión que causó 715 víctimas fatales (https://www.tni.org/en/article/dare-to-win-lessons-from-the-indian-farmers-movement?gclid=Cj0KCQiAkMGcBhCSARIsAIW6d0CJFQue2eYzCcB0YP2Qs0LF8X0afrHOSbQ12Vcm4U6EzcnqSIrNS3UaAqSDEALw_wcB).

En Sri Lanka, otra masiva sublevación campesina hizo huir en 2022 a un gobierno, que había puesto en peligro la producción de alimentos mediante un paquete de extremas medidas «conservacionistas» que entre otras cosas prohibían el uso de fertilizantes nitrogenados químicos. Durante tres años, los granjeros holandeses han protestado contra «crecientes regulaciones ambientales» tendientes a reducir las emisiones de óxido de nitrógeno y amoníaco en un 50% para 2030. (https://www.dailysignal.com/2022/07/15/sri-lanka-collapses-and-dutch-farmers-revolt-blame-green-policies/).


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Así como el capital financiero se desvía de la producción real para concentrarse en una especulación ficticia que sólo produce dividendos, también aplica la producción alimenticia como instrumento especulativo. De igual manera que el capital incurre cíclicamente en crisis de sobreproducción que arruinan a los productores pequeños y medianos a favor de los grandes, el capital agrícola y pecuario está sujeto a graves crisis periódicas que pagan los consumidores. Desde principios de siglo el precio de los alimentos no ha hecho más que aumentar. Como advierte el editorialista inglés George Monbiot, del cotidiano The Guardian, «nuestro sistema alimentario está a punto de colapsar como sucedió con los bancos en 2008 (https://bit.ly/3NXoZAF)».

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Para remediar la situación, movimientos y gobiernos progresistas debemos frenar la devastación de las zonas verdes y humedales del planeta; vetar todas las iniciativas de privatización de las aguas o de los sistemas para su distribución; colocar bajo control social aguas y tierras cultivables; prohibir las compras masivas de tierras por transnacionales o potencias extranjeras, ejecutar radicales reformas agrarias; declarar de interés público y proteger la producción de alimentos; limitar el cultivo de textiles, agrocombustibles o vegetales para consumo del ganado, y favorecer el de especies para alimentación humana directa; sujetar la importación o exportación de tales bienes al interés público; controlar rigurosamente los transgénicos y penalizar drásticamente la especulación con tierras o con productos alimenticios.

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De poco servirán sin embargo tales medidas mientras se las intente dentro del modo de producción capitalista, que funda la acumulación de cuatro empresas sobre el hambre de toda la humanidad.

TEXTO/FOTOS: LUIS BRITTO

 

Fuente de la Información: https://www.aporrea.org/ideologia/a317903.html

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Sociopolitica del Metaverso

Por: Luis Britto García

Metaopio

A fines del siglo XVIII, los capitalistas europeos derogan la Ley de la Oferta y la Demanda. Quieren venderle mercancías a China, pero las que ésta produce son superiores y más baratas. Los ingleses han devastado la agricultura de la India para imponer el cultivo de la amapola, de la cual se extrae el opio, que causa placeres ilusorios y desastres sociales reales. El Emperador de China prohíbe su importación en 1799; en 1838 su funcionario Lin Zexu confisca y quema 1.280 toneladas del estupefaciente, y escribe a la Reina Victoria: “En China, todas aquellas personas que vendan o fumen opio recibirán la pena de muerte. Hemos señalado el crimen de aquellos bárbaros que a través de los años han estado vendiendo opio. El profundo daño que han provocado y las grandes riquezas que han acumulado justificarán su ejecución de acuerdo a la ley”. Los humanitarios ingleses declaran dos guerras para obligar a cañonazos el consumo del opio. Imponen Infames Tratados por los cuales China queda dividida en Zonas Especiales donde no rigen las leyes, el gobierno ni los tribunales locales y los nacionales se ahogan en irreparable miseria apenas anestesiada por la droga. El metaverso estupefaciente deviene una de las tres industrias más productivas del mundo, con el tráfico de armas y los hidrocarburos.

Metacine

Los hermanos Lumiére desarrollan en 1895 una maravillosa linterna mágica que proyectando fotografías sucesivas reproduce el movimiento. Los espectadores saltan y echan a correr cuando la imagen de una locomotora parece embestirlos desde la pantalla. La toma siguiente muestra trabajadores saliendo de una fábrica. A partir de ese momento, saldrán de ella hacia los cines, por olvidar los mugrientos y extenuantes talleres.

Metaestrellas

Pronto la cámara deja de fotografiar documentos para filmar sueños. El prestidigitador George Meliés ofrece viajes a la luna y a los abismos del océano. Eisenstein revive un pasado de emperadores terribles y acorazados insurrectos. Luis Buñuel y Salvador Dalí presentan alucinaciones. Fritz Lang filma la aterradora mujer mecánica que suplantará a los trabajadores. Toda una maquinaria industrial crea una nueva religión que en vez de dioses adora estrellas. Las masas agobiadas viven en salas oscuras todo lo que la vida les ha negado: amor, aventuras, finales felices. Ilya Ehrenburg la llamará La fábrica de sueños. Ignorando a los seres humanos que le rodean, cada espectador sólo anhela convertirse en otra sombra de la pantalla de plata. Cuando ésta se achica e invade la sala de la casa, su fulgor banal le facilita ignorar a la familia.

Metasoledad

Bancos y latifundios devoran las granjas, las masas desalojadas afluyen a las ciudades, que devienen

metrópolis y megalópolis. El tumulto trae soledad en vez de compañia. En las calles las multitudes se

eluden, en las salas de cine nadie habla con nadie

en los sitios de trabajo nadie se relaciona con los competidores, en los edificios los vecinos no intiman con los vecinos. El hilo de voz del teléfono y el bullicio de la radio son débiles sustitutos del cotilleo aldeano. Según denuncian David Reisman, C. Wright Mills, William H. White y Vance Packard en su libro de 1959 The Lonely Crowd, Estados Unidos es una muchedumbre solitaria.

Metachisme

El avispado Mark Zuckerberg suscita en 2004 un escándalo en la universidad de Harvard, al aplicar un programa de seleccionar inscritos para una página web en la cual las estudiantes son clasificadas por belleza y accesibilidad. Sin saberlo, ha dado en el clavo. Lo que falta a los presuntuosos citadinos es el chismorreo de la aldea; la vitrina donde exhibir su vacío. En la prensa amarilla los millonarios disponen del Metaverso de las crónicas sociales y las solteronas del mundillo de los consultorios sentimentales. Faltaba elevar a evento mediático el anticuado álbum de familia, con sus postales, sus dedicatorias, sus souvenirs. Crear para cada quien la ilusión de ser magnate comunicacional mediante un portal que ostente su narcisista ego, su consumo ostensible, su insignificante nulidad. En 2012, Facebook alcanza el millar de millones de usuarios. Pronto la mitad del género humano participa en redes sociales, en la apasionante tarea de recibir publicidad, entregar datos privados a vendedores y agencias de espionaje, y comunicarse nada. Los charlatanes inventan monedas virtuales para comprar el mundo con divisas que, como el dólar, carecen de respaldo.

Meta-arte

Cada forma artística es un metaverso; cada metaverso pone a su servicio la totalidad de las artes disponibles. Liturgia, teatro, ópera y cine son en su momento artes totales, que compendian arquitectura, literatura, actuación, iluminación, música, vestuario. Cada metaverso propone como protagonistas a quienes la ideología de su época considera figuras centrales: dioses, héroes, políticos, millonarios, ídolos sexuales. En época postmoderna de supuesta defunción de todos los metarrelatos (menos el del mercado), el metaverso entroniza ilusoriamente al único punto de referencia restante: el Yo del espectador, por fin dotado de la ilusoria capacidad de actuar en un universo ficticio. El Yo elige videojuegos, contactos y ambientes virtuales, pero ante todo su imagen o Avatar, por lo regular lo contrario del original: desde selfies y currículos retocados hasta efigies y biografías parejamente alucinatorias. En lugar de invadir el mundo imaginario, el Yo es invadido y subyugado por éste: Objeto y Sujeto mutuamente falsificados se disuelven en cúmulo de mistificaciones.

Metadroga

Mark Zuckerberg anuncia que desarrolla la técnica de sumergir a los usuarios en realidades ficticias más nítidas que las de los videojuegos, y de interactuar con ellas y con otros participantes, llevando vidas ilusorias en entornos inexistentes ¿En qué se diferencia este Metaverso informático de las drogas estupefacientes, con su capacidad de suplantar al mundo real, disminuir la voluntad de modificarlo, sustituir vínculos sociales por relaciones ficticias y crear adicciones incurables? En que las drogas están prohibidas y el Metaverso es legal. Quizá, como el opio en China, represente un magnífico negocio capitalista, debilite al Estado y paralice a desempleados, marginados y excluidos dificultándoles cualquier salida radical. A la postre, la respuesta revolucionaria contra la imposición del Metaverso del opio convirtió a China en primera potencia del mundo.

Fuente de la información: https://www.aporrea.org/actualidad/a309340.html

Fotografía: ILUSTRACIONES: IMÁGENES GENERADAS CON COMPUTADORA POR LUIS BRITTO GARCÍA.

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Metaverso

Por:  Luis Britto García

En el Metaverso circulan fábulas, fake news, infundios difícilmente verificables. Sostienen los creyentes que existe un mundo no originado por programas, hologramas ni simulaciones, todavía por explorar.

Fuentes usualmente bien desinformadas anuncian la Fake New de la inauguración del Metaverso por Mandatarios Autoelegidos para el mandato de la Postverdad. Comunicadores Financiados por la Fuente y Portavoces sin Mensaje de Noticias sin Contenido emiten Atentados de Falsa Bandera, Cortinas de Humo, Globos de Ensayo, Información de Calorías Vacías y Fast Food Espiritual para exaltar Falsimedias y Monopolios Mediáticos alimentados con Big Data y difundidos con Bots. Pantallas espiadas por Cookies obturan los multimedias con Pop Ups imposibles de bloquear; tras todas las imágenes Manipulación Digital y Seducción Subliminal. Redes Antisociales atrapan peces chicos para alimentar a los Gordos; crímenes que no existieron desaparecen con aquél que los denunció. Rumores elevados a la categoría de Primicias sobredimensionadas con Sensacionalismos y Amarillismos abren para el Hit Parade de los eventos el cristal de la Opacidad. El telón de la Autocensura disimula que nada hay que ocultar.

Desechos

Primero desarrollé maquinarias para automatizar la agricultura y desechar a los campesinos. Luego construí maquinarias para automatizar la producción industrial y desechar a los obreros. Posteriormente monté maquinarias de automatizar formulación de diagnósticos, interpretación de leyes y cálculo de estructuras, para desechar médicos, abogados, ingenieros. Armé la máquina combinatoria que redacta relatos y poemas y realiza sinfonías y obras plásticas, para desechar a los artistas. Al fin todas las maquinarias unidas me desecharon a mí.

Metaverso

Metaverso o sea la Solución Final para el problema de la Humanidad. El informe Oxfam del remoto enero de 2021 reportaba que los 2.153 multimillonarios del mundo tenían más riqueza que el 60% de la población del planeta, para entonces unos 4.600 millones de personas. Siguiendo la Ley de Concentración de Capitales en virtud de la cual las grandes empresas devoran a las pequeñas y medianas, no tardó mucho todo el Capital del planeta en estar concentrado en manos de una sola persona. En un mundo en el cual todo el trabajo es ejecutado automáticamente por máquinas, ello convirtió a la casi totalidad de los humanos en irrelevantes. De manera voluntaria e incluso ávida casi quince mil millones de desempleados invirtieron sus últimos recursos para entrar en los ataúdes de Realidad Virtual del Metaverso que les permitieron alucinar que vivían existencias espléndidas en mundos inexistentes en los cuales consumían sólo ilusiones o experimentaban los Paraísos de sus religiones diversas, de manera que no había que temer revolución ni rebelión. El Metaverso solucionó también el problema de la explosión demográfica, pues en él son asimismo virtuales sexualidad y reproducción.

Avatar

Al despertar seguir las rutinas preceptuadas. Programar rasgos corporales mediante Photoshop y tono de voz a través del sintetizador que te permite elegir registro de soprano, tenor, contralto, bajo o bajo profundo. Por las palabras no preocuparse, el Asistente de Voz pondrá en tus labios las adecuadas. Elegir mediante Paint color de piel, de cabello y de ojos. Existe el Repertorio de Ideas, pero para evitar elecciones tediosas mejor dejarlo en Predeterminado. Retoques cuidadosos requerirán los proyectores de rasgos mediante el Reconocedor Facial y su antología interminable de Rostros de Celebridades. Diversas aplicaciones permiten elegir el elenco de expresiones; otras, los estilos corporales de movimiento. El sexo es opcional. Cada parte de tu cuerpo puede asumir la forma elegida entre nutridos catálogos, para crear el Ser Aparente que se presentará de manera virtual ante infinidad de otros Seres Aparentes integrados de la misma manera. No te preocupe tener que elegir tantas opciones al despertar. En el Metaverso nadie despierta en realidad.

Realidad real

En el Metaverso circulan fábulas, fake news, infundios difícilmente verificables. Uno de los últimos se refiere a la llamada Realidad Real. Sostienen los creyentes que existe un mundo no originado por programas, hologramas ni simulaciones, todavía por explorar. Al no resultar de una aplicación, sus propiedades no están enteramente predeterminadas, y puede dar lugar a situaciones inesperadas, desviaciones, sorpresas. Dicen que Realidad Real es un sitio multisensorial, con gran variedad de sonidos, aromas, sabores e incluso sensaciones táctiles y térmicas. Lo caracteriza un ritmo marcado por la monotonía, es decir, las percepciones no aparecen ni desaparecen en microsegundos, se toman su tiempo como si pidieran que hicieras el esfuerzo de contemplarlas e incluso reflexionar sobre ellas. También Realidad Real está marcada por el contraste. Por no se sabe cuál razón incluye cosas desagradables, feas o dañinas, quizá para que resalten con más intensidad las agradables, bellas o benéficas. Realidad Real parece dirigida por un conjunto de reglas que llaman Leyes de la Naturaleza, y parte del juego consiste en irlas descubriendo y aplicando. Dicen unos que Realidad Real está regida por el azar absoluto de la mecánica cuántica, otros que obedece a un plan preestablecido. Realidad Real parece ser también interactiva, hay otros jugadores que participan pero sus conductas son impredecibles porque usan estrategias complejas apenas regidas por el principio del provecho propio. En Realidad Real el sexo opuesto es verdaderamente opuesto, y peor son sus matices. El proceso de acceder a Realidad Real es tortuoso y poco recomendable. Presupone ante todo arrancarte los audífonos implantados en los tímpanos y las pantallas de las retinas. Con ellos debes desconectar la mascarilla olfativa de las fragancias sintéticas y el gotero que instila sabores electromagnéticos. El retiro de los guantes sensores de manos y pies es también necesario. Asimismo el de la piel informática que dosifica los placeres. Desconectar la red de electrodos que estimula los centros del goce y la que ocluye la sensación del tiempo creando la ilusión de eternidad. Se rumora que Realidad Real está prohibida, que los pocos que han accedido a ella no han vuelto. Es un programa para sicópatas o masoquistas. Otros dicen que Realidad Real es apenas otra simulación, sólo que sin hardware, apenas un desvarío o un sueño de nuestra mente o de la de un Creador. Mientras menos sepamos de ella, menor el daño.

Fin de los tiempos

En el Metaverso se extirpa el centro cerebral de percepción del tiempo, para lograr que un segundo parezca eternidad. Otra máquina te extirpa a tí para que no dure más de un segundo tu eternidad.

Fuente de la información e imagen:  https://www.alainet.org

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Las maquilas y los trabajadores

Por Luis Britto García

Los regímenes de zona franca permiten a los inversionistas aprovechar los servicios públicos, la seguridad jurídica y la educación y salud de los trabajadores de un país sin contribuir significativamente con el gasto público que los costea.

Desde comienzos de la Revolución Industrial luchan los trabajadores por sus derechos, y los capitalistas por negárselos. Tres estrategias marcan su política laboral. La primera, la conversión de toda relación estatutaria en contractual. La segunda, la transformación de todo mecanismo público de protección social en privado. La tercera, la progresiva desaparición de la relación laboral y del propio trabajador del campo de las relaciones jurídicas.

La maquila

El modelo privilegiado para la explotación globalizada del trabajo es la maquila. Consiste en una factoría que las transnacionales instalan en un país del Tercer Mundo para cumplir total o parcialmente un proceso cuyo producto se exporta en su casi totalidad, a fin de aprovechar la baratura de la mano de obra y diversos incentivos, tales como la suspensión de las leyes laborales y todo tipo de privilegios como exenciones y exoneraciones fiscales.

Las maquilas fueron introducidas en México en 1965 por el presidente Díaz Ordaz en virtud del Programa de Industrialización de la Frontera desarrollado por Arthur D. Little Co. en imitación de otro proyecto similar creado en Portugal. Su base es una medida proteccionista del gobierno de Estados Unidos, que desde 1964 premia con tarifa preferencial la importación de bienes previamente exportados del país para su elaboración, y exime de impuestos dicha exportación.

De unas 3.000 maquilas instaladas en México para comienzos de siglo, capitales estadounidenses son propietarios del 40%, y otro 47% es poseído por compañías mexicanas subsidiarias de estadounidenses. Vale decir, mediante la maquila el capital estadounidense evita cumplir con las leyes de su país y evade asimismo las de aquél donde se instala. Al principio se les limitaba vender en México un porcentaje de su producción, para que ésta no compitiera deslealmente con la industria local; desde la firma del TLCAN, esta restricción no existe.

Un modelo trasnacional

Bajo principios similares funcionan las maquilas instaladas en Centroamérica y en Asia. La Confederación Internacional de Sindicatos Libres (CISL) con sede en Ginebra comparó las condiciones de las maquilas de Centroamérica con las de los campos de concentración, y denunció que en ellas se cometían violaciones contra los derechos humanos tales como golpizas, abuso sexual y la distribución de anfetaminas para soportar las arduas jornadaas de trabajo, que promedian entre 10 y 12 horas diarias, con frecuentes horas extras no pagadas.

Los salarios oscilan entre 1,40 y 1,90 dólares, mucho más bajos que el salario mínimo legal de 2,83 dólares diarios. De trece sindicatos que había en Guatemala en 1990, en 1996 sólo restan tres: sus miembros son acosados hasta que se disuelven, y las empresas cierran y se trasladan en cuanto enfrentan cualquier problema laboral (Peace Brigades International: “Trade Unions and the Maquila Sector- Guatemala Special Report”, septiembre 1996).

Ínfima remuneración

En éste, como en la mayoría de los enclaves transnacionales en el Tercer Mundo, el negocio estriba en el costo ínfimo de la fuerza laboral. Los derechos cobrados por Michael Jordan por uso de su imagen para un calzado deportivo eran mayores que toda la remuneración cancelada a los maquiladores asiáticos que lo fabricaban.

En 1985, un trabajador manufacturero ganaba 1,26 dólares por hora en México, y 9,56 en Estados Unidos. En 1992, el mexicano ganaba 2,07 dólares por hora, y el estadounidense 11,3: casi seis veces más. (INEGI, mayo-agosto 1993, 30, cit. por Estévez, Edna (1998): Globalización, transnacionales e integración; Vadell Hermanos Editores, Caracas,148). A principios de siglo la hora de trabajo, cuya remuneración promedio es de 21 dólares en Estados Unidos, cuesta 5 dólares en México, donde las leyes laborales son menos exigentes y los sindicatos incapaces de imponerse.

Noam Chomsky hace notar que el colapso de la economía mexicana subsiguiente a la instauración del Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos en 1995, según la prensa financiera “transformó México en una fuente barata (es decir, más barata aún!) de artículos manufacturados con unos salarios industriales que son la décima parte de los de Estados Unidos” (Chomsky 1999, 127).

Mujeres y niños

Refiriéndose también a la experiencia mexicana resume Edna Estévez: Es decir, las maquilas desarrollan actividades productivas y/o de servicios, a veces contaminantes, intensivas en mano de obra barata, no cualificada y preferentemente, femenina (constituyen más del 90% de la mano de obra contratada), aunque utilizan también a niños de 12 años (igual que la primera producción industrial). Trabajo que le permite ahorrar hasta 25.000 dólares al año por empleado. (Estévez 1998, 149)

En República Dominicana me dicen conocedores del tema que la preferencia por la mano de obra femenina se debe a que la consideran más dócil y menos propensa a protestar por las duras condiciones de trabajo.

En el mismo sentido, hace notar Jean Ziegler que las maquiladoras de la industria del juguete por lo regular hacen trabajar a sus obreros jornadas de 16 horas, siete días a la semana, sin pago especial por horas extras ni salario nocturno, salario mínimo ni permisos por maternidad, gracias a lo cual los costos salariales apenas representan el 6% del precio de venta al público (Ziegler, Jean: (2003) Los nuevos amos del mundo; Ediciones Destino S.A. Barcelona,131).

Eliminación del fuero laboral

Las fuentes de los beneficios de las maquilas son el trabajo peligroso, preponderantemente femenino o infantil y mal remunerado. Todas surgen de la derogación o la violación de un estatuto que protege al trabajador, en aras de un supuesto libre consentimiento contractual. Todas dependen de la exclusión de su personal del campo de la protección laboral. En todo el Tercer Mundo se repiten experiencias similares, aunque la explotación maquiladora es particularmente inmisericorde en los llamados Tigres del Asia, en México y en los países centroamericanos.

Como reconocen los mismos asesores de la política exterior estadounidense en el Documento Santa Fe II: “Muchos de los mexicanos que cruzan la frontera méxico-norteamericana son hombres que por lo general no pueden obtener empleo en las maquiladoras, ya que las principales habilidades manuales y el trabajo a destajo son mejor desempeñados por las mujeres. Este empleo excesivo de mujeres ha tendido a debilitar la estructura familiar y a exacerbar las ya pésimas condiciones sociales, ambientales, sanitarias y educacionales en los pueblos fronterizos” (Santa Fe II 1988).

Paraísos fiscales transnacionales

A esto hay que añadir que los regímenes de zona franca permiten a los inversionistas aprovechar los servicios públicos, la seguridad jurídica y la educación y salud de los trabajadores de un país sin contribuir significativamente con el gasto público que los costea.

En dichas “zonas especiales de producción” por lo regular el inversionista está exonerado de pagar los derechos de importación de las materias primas y de exportación de los productos elaborados, además de que por lo regular los demás tributos le son dispensados gracias a los infames Tratados contra la Doble Tributación y otras normas de privilegio inconstitucional.

Así, el Estado debe cubrir el déficit fiscal recargando los impuestos al valor agregado y al consumo sobre los depauperados trabajadores, puesto que dichas zonas francas por lo regular son islas donde no rigen los derechos humanos pomposamente proclamados en Cartas y constituciones.

Por lo cual reconoce el Informe sobre Desarrollo Humano 1999 de la ONU que “cuando no se permite a 27 millones de trabajadores de las 845 zonas francas industriales que hay en el mundo organizarse en sindicatos, eso constituye una violación de los derechos de los trabajadores al igual que de sus derechos humanos” (PNUD 1999, 86). La libertad de mercado presupone la eliminación de todas las demás.

En fin, el sistema maquilador tiene efectos simétricos con respecto a la fuerza laboral de los países desarrollados y los subdesarrollados. Si los países pobres obtienen empleos miserables, los trabajadores de los países ricos pierden los suyos y pasan a integrar un ejército industrial de reserva que deberá aceptar salarios cada vez más bajos y condiciones menos favorables. En la globalización las condiciones laborales tienden inexorablemente hacia el mínimo común denominador.

Balance

En resumen, las maquilas o zonas especiales sólo producen beneficios para las transnacionales, y arrojan efectos negativos para todos los demás participantes:

1)P ara la clase trabajadora, que sólo labora en ellas en condiciones de discriminación sexista, sobreexplotación y remuneración ínfima, y a la cual arrebatan la totalidad las conquistas sociales y laborales ganadas mediante arduas luchas de décadas.

2) Para el Estado, que en virtud de los Infames Tratados contra la Doble Tributación, contratos de estabilidad tributaria, exenciones, exoneraciones y otros privilegios inconstitucionalmente otorgados a las transnacionales, prácticamente no percibe de éstas impuestos con los cuales costear la educación, salud y pensiones de los trabajadores y otros gastos indispensables.

3) Para la economía del país donde se instalan, que sólo opera una fase del proceso productivo, y casi nunca recibe para su consumo interno la producción maquiladora, en su mayoría destinada a mercados externos y a precios incosteables para los nacionales.

4) Para la soberanía nacional, que pasa a ser fragmentada en zonas donde no se aplican las leyes de la República ni operan sus tribunales, como si hubieran sido militarmente ocupadas por potencias extranjeras.

5) Y en fin, para las organizaciones políticas gestoras: Rafael Caldera dio el primer paso para la instalación de maquilas en Venezuela en 1997 con la anulación de la retroactividad de las prestaciones sociales y demás conquistas laborales. Su partido no volvió a ganar jamás una elección

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Venezuela: Las maquilas y los trabajadores

Las maquilas y los trabajadores

Luis Brito García

El  capitalismo contra la relación de trabajo

Desde  comienzos de la Revolución Industrial luchan los trabajadores por sus derechos, y los capitalistas por negárselos. Tres estrategias marcan  su política laboral. La primera, la conversión de toda  relación estatutaria en contractual. La segunda, la transformación de todo  mecanismo público de protección social en privado. La tercera, la progresiva desaparición de la relación laboral y del propio trabajador del campo de las relaciones jurídicas.

         La maquila

El modelo privilegiado para la explotación  globalizada del trabajo es la maquila. Consiste en una factoría que las transnacionales instalan en un país del Tercer Mundo para cumplir total o parcialmente un proceso cuyo producto se exporta en su casi totalidad,  a fin de aprovechar la baratura de la mano de obra y diversos incentivos, tales como  la suspensión de las leyes laborales y todo tipo de privilegios como exenciones y exoneraciones  fiscales.

Las maquilas fueron introducidas en México en 1965 por el presidente Díaz Ordaz en virtud del Programa de Industrialización de la Frontera desarrollado por Arthur D. Little Co. en imitación de otro proyecto similar creado en Portugal. Su base es una medida proteccionista del gobierno de Estados Unidos, que desde 1964 premia con  tarifa preferencial la importación de bienes previamente exportados del país para su elaboración, y exime de impuestos dicha exportación. De unas 3.000 maquilas instaladas en México para comienzos de siglo, capitales estadounidenses son propietarios del 40%, y otro 47% es poseído por compañías mexicanas subsidiarias de estadounidenses. Vale decir, mediante la maquila el capital estadounidense evita cumplir con las leyes de su país y evade asimismo las de aquél donde se instala. Al principio se les limitaba vender en México un porcentaje de su producción, para que ésta no compitiera deslealmente con la industria local; desde la firma del TLCAN, esta restricción no existe.

Un modelo transnacional

Bajo principios similares funcionan las maquilas instaladas en Centroamérica y en Asia. La Confederación Internacional de Sindicatos Libres (CISL) con sede en Ginebra comparó las condiciones de las maquilas de Centroamérica con las de los campos de concentración, y denunció que en ellas se cometían violaciones contra los derechos humanos tales como golpizas, abuso sexual y la distribución de anfetaminas para soportar las arduas jornadas de trabajo, que  promedian entre 10 y 12 horas diarias, con frecuentes horas extras no pagadas. Los salarios oscilan entre 1,40 y 1,90 dólares, mucho más bajos que el salario mínimo legal de 2,83 dólares diarios. De trece sindicatos que había en Guatemala en 1990, en 1996 sólo restan tres: sus miembros son acosados hasta que se disuelven, y las empresas cierran y se trasladan en cuanto enfrentan cualquier problema laboral (Peace Brigades International: “Trade Unions and the Maquila Sector- Guatemala Special Report”, septiembre 1996).

         Ínfima remuneración 

En éste, como en la mayoría de los enclaves transnacionales en el Tercer Mundo, el negocio estriba en el costo ínfimo de la fuerza laboral. Los derechos cobrados por Michael Jordan por uso de su imagen para  un calzado deportivo eran mayores que toda la remuneración cancelada a los maquiladores asiáticos que lo fabricaban. En  1985, un trabajador manufacturero ganaba 1,26 dólares por hora en México, y 9,56 en Estados Unidos. En 1992, el mexicano ganaba 2,07 dólares por hora, y el estadounidense 11,3: casi seis veces más. (INEGI, mayo-agosto 1993, 30, cit. por Estévez, Edna (1998): Globalización, transnacionales e integración; Vadell Hermanos Editores, Caracas,148). A principios de siglo la hora de trabajo, cuya remuneración promedio es de 21 dólares en Estados Unidos, cuesta 5 dólares en México, donde las leyes laborales son menos exigentes y los sindicatos incapaces de imponerse.

Noam Chomsky hace notar que el colapso de la economía mexicana subsiguiente a la instauración del Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos en 1995, según la prensa financiera “transformó México en una fuente barata (es decir, más barata aún!) de artículos manufacturados con unos salarios industriales que son la décima parte de los de Estados Unidos” (Chomsky 1999, 127).

Mujeres y niños

Refiriéndose también a la experiencia mexicana resume Edna Estévez:

Es decir, las maquilas desarrollan actividades productivas y/o de servicios, a veces contaminantes, intensivas en mano de obra barata, no cualificada y preferentemente, femenina (constituyen más del 90% de la mano de obra contratada), aunque utilizan también a niños de 12 años (igual que la primera producción industrial). Trabajo que le permite ahorrar hasta 25.000 dólares al año por empleado. (Estévez 1998, 149)

En República Dominicana me dicen conocedores del tema que la preferencia por la mano de obra femenina se debe a que la consideran más dócil y menos propensa a protestar por las duras condiciones de trabajo. En el mismo sentido, hace notar Jean Ziegler  que las maquiladoras de la industria del juguete por lo regular hacen trabajar a sus obreros jornadas de 16 horas, siete días a la semana, sin pago especial por horas extras ni salario nocturno, salario mínimo ni permisos por maternidad, gracias a lo cual los costos salariales apenas representan el 6% del precio de venta al público (Ziegler, Jean: (2003)Los nuevos amos del mundo; Ediciones Destino S.A. Barcelona,131).

 Eliminación del fuero laboral

Las fuentes de los beneficios de las maquilas son el trabajo peligroso, preponderantemente femenino o infantil y mal remunerado. Todas surgen de la derogación o la violación de un estatuto que protege al trabajador, en aras de un supuesto libre consentimiento contractual. Todas dependen de la exclusión de su personal del campo de la protección laboral.  En todo el Tercer Mundo se repiten experiencias similares, aunque la explotación maquiladora es particularmente inmisericorde en los llamados Tigres del Asia, en México y en los países centroamericanos. Como reconocen los mismos asesores de la política exterior estadounidense en el Documento Santa Fe II: “Muchos de los mexicanos que cruzan la frontera méxico-norteamericana son hombres que por lo general no pueden obtener empleo en las maquiladoras, ya que las principales habilidades manuales y el trabajo a destajo son mejor desempeñados por las mujeres. Este empleo excesivo de mujeres ha tendido a debilitar la estructura familiar y a exacerbar las ya pésimas condiciones sociales, ambientales, sanitarias y educacionales en los pueblos fronterizos” (Santa Fe II 1988).

          Paraísos fiscales transnacionales

A esto hay que añadir que los regímenes de zona franca permiten a los inversionistas aprovechar los servicios públicos, la seguridad jurídica y la educación y salud de los trabajadores de un país sin contribuir significativamente con el gasto público que los costea. En dichas “zonas especiales de producción” por lo regular el inversionista está exonerado de pagar los derechos de importación de las materias primas y de exportación de los productos elaborados, además de que por lo regular los demás tributos le son dispensados gracias a los infames Tratados contra la Doble Tributación y otras normas de privilegio inconstitucional.

Así, el Estado debe cubrir el déficit fiscal recargando los impuestos al valor agregado y al consumo sobre los depauperados trabajadores, puesto que dichas zonas francas por lo regular son islas donde no rigen los derechos humanos pomposamente proclamados en Cartas y constituciones. Por lo cual reconoce el Informe sobre Desarrollo Humano 1999 de la ONU que “cuando no se permite a 27 millones de trabajadores de las 845 zonas francas industriales que hay en el mundo organizarse en sindicatos, eso constituye una violación de los derechos de los trabajadores al igual que de sus derechos humanos” (PNUD 1999, 86). La libertad de mercado presupone la eliminación de todas las demás.

En fin, el sistema maquilador tiene efectos simétricos con respecto a la fuerza laboral de los países desarrollados y los subdesarrollados. Si los países pobres obtienen empleos miserables, los trabajadores de los países ricos pierden los suyos y pasan a integrar un ejército industrial de reserva que deberá aceptar salarios cada vez más bajos y condiciones menos favorables. En la globalización las condiciones laborales tienden inexorablemente hacia el mínimo común denominador.

 Balance

En resumen, las maquilas o zonas especiales sólo producen beneficios para las transnacionales, y arrojan efectos negativos para todos los demás participantes: 1)Para la clase trabajadora, que sólo labora en ellas en condiciones de discriminación sexista, sobreexplotación y remuneración ínfima, y a la cual arrebatan la totalidad las conquistas sociales y laborales ganadas mediante arduas luchas de décadas. 2) Para el Estado, que en virtud de los Infames Tratados contra la Doble Tributación, contratos de estabilidad tributaria, exenciones, exoneraciones y otros privilegios inconstitucionalmente otorgados a las transnacionales, prácticamente no percibe de éstas impuestos con los cuales costear la educación, salud y pensiones de los trabajadores y otros gastos indispensables. 3) Para la economía del país donde se  instalan, que sólo opera una fase del proceso productivo, y casi nunca recibe para su consumo interno la producción maquiladora, en su mayoría destinada a mercados externos y a precios incosteables para los nacionales. 4) Para la soberanía  nacional, que pasa a ser fragmentada en zonas donde no se aplican las leyes de la República ni operan sus tribunales, como si hubieran sido militarmente ocupadas por potencias extranjeras. 5)Y en fin, para las organizaciones políticas gestoras: Rafael Caldera dio el primer paso para la instalación de maquilas en Venezuela en 1997 con la anulación de la retroactividad de las prestaciones sociales y demás conquistas laborales. Su partido no volvió a ganar jamás una elección.

Fuente de la Información: https://rebelion.org/las-maquilas-y-los-trabajadores/

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La comunicación en la era de internet

Cada avance tecnológico suscita un sueño utópico y una pesadilla distópica. La invención de internet hacia 1990 generó expectativas entusiastas. Su propio comienzo fue utópico. Su creador Tim  Berners-Lee se negó a registrar las patentes que lo hubieran hecho multimillonario, para ponerlas a disposición de la humanidad. Un dispositivo al principio apropiado por el complejo militar industrial como red  subterránea invulnerable al ataque atómico, devino instrumento aparentemente a disposición de todos para el libre intercambio de mensajes y conocimientos. Si en la era que vivimos el bien más preciado es la información, un canal que prometiera multiplicarla y comunicarla de manera prácticamente gratuita y universal parecía puerta abierta hacia Utopía.

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Esta  perspectiva optimista fue prontamente clausurada. Así como todos los bienes a disposición de la humanidad –tierra,  aguas,  minerales,  organismos biológicos- no tardaron en ser acaparados, internet no demoró en caer bajo el poder y los planes de los operadores. La red concebida para transmitir mensajes no tardó en encontrar quien quisiera hacerse dueño de éstos  y a través de ellos de sus emisores. En la actualidad, cerca del 70% del PIB global es producido por el sector terciario (finanzas, investigación, educación, publicidad, informática, entretenimiento) que a su vez se maneja mediante la Red. Desde el siglo pasado, Estados Unidos desarrolló el sistema de espionaje Echelon para decodificar ofertas en las licitaciones y hacer que las ganaran las empresas estadounidenses. La información, como la plusvalía, es expropiada de la sociedad  que la crea, y tiende a concentrarse en un número cada vez menor de manos. Dominar la Red es dominar la economía.

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Todo control sobre la economía deviene control social. Internet y las  redes acumulan membrecías que superan con mucho a las ciudadanías de muchos de los Estados soberanos. A principios de 2021, usan internet 4.660 millones de personas: el 59,5% de la población mundial. Emplean teléfonos celulares 5.200 millones, el 66,6% de los habitantes del planeta. Están atrapadas en las redes sociales 4.200 millones de personas: el 53,6% de los terrícolas. En estas redes, sólo Facebook junta 2.740 millones de seres; You Tube, 2.291; Whats App, 2.000. Los usuarios de internet invierten en ella  en promedio seis horas  y 54 minutos diarios: la duración usual de una jornada de trabajo (https://marketing4ecommerce.net/usuarios-de-internet-mundo/). Estas desmesuradas clientelas son mercados inconmensurables que incesantemente aportan a sus operadores datos invalorables y reciben a cambio publicidad y propaganda.

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Imaginemos que un servicio postal por el mero hecho de transmitir correspondencia se atribuyera el derecho de abrir todas las cartas que transmite y de utilizar su contenido libremente. Tal servicio no tardaría en ser denunciado como  inadmisible instrumento de tiranía y en perder la totalidad de sus usuarios. Tal es el caso de internet. Desde los primeros tiempos, primero los gobiernos, y luego los operadores de la Red se atribuyeron abusivamente ambos privilegios. Hoy en día, el usuario puede tener la casi seguridad de que todos sus mensajes son abiertos, escrutados y utilizados para sus propios fines por las organizaciones que los transmiten y sus cómplices. Programas de análisis de contenido detectan la presencia de ciertas palabras o construcciones claves y alertan a mecanismos de vigilancia que aplican estrechos controles sobre los emisores del mensaje. En un avance del cerco, los canales instalan en los computadores de los usuarios cookies, programas espías que informan detalladamente sobre el contenido de los ordenadores y de los mensajes que emiten. Estos mecanismos acercan a todos los usuarios de internet a un mundo de control total, frente al cual parece un juego de niños la televisión de dos vías imaginada por George Orwell, que no sólo transmitía imágenes al espectador, sino que además vigilaba todos los actos de éste.

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El espionaje emplea todo tipo de dispositivo capaz de registrar información. Edward Snowden decidió desertar de los servicios de inteligencia estadounidenses cuando advirtió que éstos espiaban los teléfonos, y que el número de dispositivos de espionaje dedicados a vigilar ciudadanos estadounidenses era mayor que el de los aplicados contra el resto del mundo. Ya es casi imposible abrir una página web sin que ésta nos informe que usa cookies para servirnos mejor –en realidad, para espiarnos mejor- y que el mero hecho de utilizar la página equivale al consentimiento para alojar un espía en el aparato del cual depende nuestra comunicación con el mundo. Algunas, de manera inocente, nos piden de entrada la clave de nuestro correo electrónico, que es como solicitarnos a la vez la llave de la casa, del auto y de la caja fuerte. Pero nuestros llamados servidores ya las tienen: en realidad somos sus sirvientes. Las páginas web, las redes sociales se atribuyen explícita o implícitamente  el derecho de utilizar para sus propios fines todos los contenidos que los usuarios hagan circular en ellas. Es como si un servicio postal se atribuyera la propiedad de cuantos mensajes y objetos le fueran confiados. Fácil es comprender lo que esto significa en un mundo donde el bien económico fundamental es la información. Apropiarse de la información es apropiarse del mundo.

Fuente: https://rebelion.org/la-comunicacion-en-la-era-de-internet/

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Cómo nos arrebataron Guyana

Arbitraje sin venezolanos ni soberanía

El largo proceso de extralimitaciones, usurpaciones y abusos por parte de Gran Bretaña llevó a Venezuela al error de entregar la decisión sobre nuestra posesión de la Guayana Esequiba a la junta arbitral extranjera que emitió el llamado Laudo de París de 1899.

 

Basta examinar las reglas  del Tratado de Arbitraje que prepara dicho Laudo para adivinar su resultado. Su artículo II dispone que el Tribunal se compondrá de cinco juristas, dos de parte de Venezuela, nombrados uno por el Presidente de Venezuela  y otro por los Justicias de la Corte Suprema de Estados Unidos; otros dos designados por el Reino Unido, y un quinto elegido por los cuatro anteriores. El Presidente venezolano elige a Melville Weston Fuller, Justicia Mayor de los Estados Unidos; el quinto árbitro resulta ser el ruso Fiodor Martens, fervoroso partidario de la alianza entre Rusia e Inglaterra. Se negocian nuestro territorio y nuestra soberanía sin que un solo venezolano esté presente.

La posesión privada mata la pública

En cuanto a la metodología para la decisión, el Artículo IV, a) de las Reglas dispone que “Una posesión adversa o prescripción por el termino de cincuenta años constituirá un buen título, Los árbitros podrán estimar que la dominación política exclusiva de un Distrito, así como la efectiva colonización de él son suficientes para constituir una posesión adversa o crear títulos de prescripción”. Se admite así que una posesión privada de medio siglo o simplemente “efectiva” prevalezca sobre la pública de cuatrocientos años; o que una usurpación política o colonizadora de facto valga más que cualquier otro título. ¿Aceptarían Estados Unidos o Inglaterra que incursores ilegalmente ingresados pudieran despojarlas del territorio que llegaran a ocupar en forma privada en dichos países? Seducidas por la doctrina Monroe, las autoridades venezolanas aceptaron tales condiciones inaceptables.

Arbitraje del despojo

A tales reglas, tal resultado. En el Laudo Arbitral de París de 1899, estadounidenses y británicos que no sacrifican nada inmolan todos los derechos de Venezuela. Para ser válida, una sentencia requiere una motivación: en el Laudo no hay ninguna. Fallos, actos administrativos o laudos sin motivación carecen también de validez. En el Laudo de París ni hechos ni derechos son apreciados o evaluados. Simplemente se enuncia la lista de puntos de referencia de una línea de demarcación enteramente favorable a los intereses del Imperio inglés, sin apoyo de argumentos ni pruebas, que apenas deja a los venezolanos el control de las bocas del Orinoco, pero establece la libre navegación para los ríos Amacuro y Barima.

La letra del Despojo

Y así, el Laudo dispone:

…en conformidad con dicho Tratado de Arbitraje, finalmente decidimos, fallamos y determinamos por la presente, que la línea de demarcación entre los Estados Unidos de Venezuela y la Guayana Británica es como sigue: Principiando en la Costa a la Punta Playa la línea de demarcación correra por línea recta a la confluencia del Río Barima con el Río Mururuma, y continuará por el medio de la corriente de este Río hasta su fuente, y de este punto a la unión del Río Haiowa con el Amacuro, y continuará por el medio de la corriente del Amacuro hasta su fuente en la Sierra Imataca, y de allí al Sudoeste por la cima más alta del Espolón de la Sierra Imataca hasta el punto más elevado de la Cordillera Principal, al Sudeste, hasta la fuente del Acarabisi, y de este punto continuará por el medio de la corriente de este Río hasta el Cuyuní, y de allá correrá por la orilla septentrional del Río Cuyuní al oeste hasta su confluencia en el Wenamu, y de este punto seguirá el medio de la corriente del Wenamu hasta su fuente más occidental, y de este punto por línea recta a la cumbre del Monte Roraima, y del Monte Roraima a la Fuente del Cotinga, y continuará por el medio de la corriente de este

Río hasta su unión con el Takutu, y seguirá el medio de la corriente del Takutu hasta su fuente, y de este punto por línea recta al punto mas Occidental de la Sierra Akarai, continuará por la cúspide de la Sierra Akarai hasta la fuente del Corentín llamado Río Cutari. Queda siempre entendido que la línea de demarcación establecida por este fallo existe sin perjuicio y con reserva de cualquier cuestión que ahora exista o que ocurriese para determinación entre los Estados Unidos de Venezuela y la República del Brasil o entre esta República y el Gobierno de Su Majestad. Al fijar la mencionada línea de demarcación los Árbitros consideran y deciden que, en tiempo de paz, los Ríos Amacuro y Barima quedarán abiertos a la navegación de los buques de comercio de todas las Naciones , salvo todo justo reglamento y el pago de derecho de faro u otros análogos, a condición que los derechos exigidos por la República de Venezuela y por el Gobierno de la Colonia de la Guayana Británica con respecto del tránsito de buques por las partes de dichos ríos que respectivamente les pertenecen, se fijen a la misma tasa para los buques de Venezuela y los de la Gran Bretaña, la cual no excederá a la que se exija de cualquiera otra Nación. Queda también entendido que ningún derecho de aduana podrá ser exigido, ya por la República de Venezuela, ya por la Colonia de la Guayana Británica, con respecto de mercaderías trasportadas en los buques, navíos o botes pasando por dichos ríos; pero los derechos de aduana serán exigibles solamente con respecto de las mercaderías desembarcadas respectivamente en el territorio de Venezuela y en el de la Gran Bretaña. Hecho y publicado por duplicado por nosotros, en París hoy el día 3 de octubre A. D. 1899.

Documentos. “El Laudo Arbitral, despojo ilegal de la Guayana Esequiba. Revista” Memorias de Venezuela, (2015, 19-29).

Ultra petita

Cabe señalar, además, que entre las materias a decidir en el Laudo no estaba incluida la libre navegación por los ríos Barima y Amacuro, por lo cual al resolver sobre ella los árbitros incurrieron en ultra petita, defecto de la sentencia que concede más de lo solicitado, o bienes o derechos no comprendidos en el litigio.  Por todo lo expuesto, se trata de un laudo nulo. El contubernio entre las grandes potencias lo hará valer en contra nuestra.

Fuente: https://rebelion.org/como-nos-arrebataron-guyana/

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